¿¡Nuestra Hermana!? - Brothers Conflict fanfic

21° La Boda.

Suspiré en la ventana.

- Venga ya tío... Ni que me fuera a casar yo.. -sonreí enternecida al pensar en mi padre. - Supongo que... -puse mi mano en mi pecho. - Estoy felíz por él. -el timbre sonó interrumpiendo mis pensamientos, abrí la puerta topándome con unos ojos serenos y una sonrisa clara. - Oh, ¿Louis-san? -se quedó unos segundos con su sonrisa imperturbable.

- Buenos días _tn-chan... -le devolví el saludo. - Vine a arreglar tu cabello... -le miré expectante. - seguro usarás un lindo vestido y tu maquillaje debe estar a juego... -al ver que no dije nada al respecto ladeó su rostro. - ¿No te molesta, cierto? -negué de inmediato saliendo de su mirada.

- N-No para nada... -sonreí contenta a lo que me devolvió la sonrisa.

- Bueno, venga... -lo seguí dentro de mi habitación, me sentó y se puso manos a la obra, con tal facilidad y delicadeza sostenía mi cabello peinándolo y alisándolo, observaba su rostro detenidamente cuando pasaba frente a mi para alcanzar algunas cosas y decoraciones. - Terminé con tu cabello... -se puso frente a mi observandome con minuciosidad. - Hermosa... -me miró a los ojos a lo que me sonrojé y miré a otro lado.

- G-gracias... -el sonrió sereno acariciando mi mejilla, lo miré a lo que el se separó y me dio la espalda revolviendo un bolso.

- Empezaré con tu maquillaje. -se acercó para comenzar a emperifollar mi rostro, sus caricias eran tan sutiles, que cerré mis ojos y me relajé. - ¿_tn?

- ¿huh? -me sonrojé. - c-casi me quedo dormida... -él estilista rió dulcemente.

- Terminé. -se alejó observando desde lejos.

- Eso fue rápido. -puso sus manos en el respaldo de la silla girándola al espejo para que pudiese obsevar. - Oh vaya... -me quedé boca abierta. - n-no... -apenas pude balbucear a lo que él me miró con una pequeña mueca.

-¿No te gusta? -negué embobada.

- Lo amo.... -mascullé a lo que él volvió a sonreir, me levanté y la abracé agradecida. - ¡Gracias Louis-san!

- No te preocupes, estoy encantado de hacer a _tn-chan más linda todavía. - me sonrojé poniendo un mechón de mi cabello detrás de mi oreja. - Te dejo para que te vistas... -asentí ayudándolo a recoger para luego despedirlo en la puerta.

...

Toqué un par de veces para luego entrar al escuchar un pase, mi padre y mi ya madrastra se giraron a verme sorprendidos.

- ¿_tn? -sonreí bajando la mirada. - No te reconocí, te ves hermosa hija mía. -miré a Miwa que me sonreía emocionada.

- A-Ah e-esto... -mi voz se cortó a lo que ella se acercó dando saltitos.

- ¡Ah sí! ¡Las chicas si que son una alegría! -sonreí ante su mirada vívida. 

-  Muchas gracias por el vestido, e-es hermoso. -ella asintió.

- Sí es muy lindo. -miró a mi padre. - Me alegro de que lo hayamos escogido ¿cierto?

- Sí, lo es. -miré el vestido de la novia.

- A-Ah, M-Miwa-san esta muy linda con ese vestido.. -sonreí avergonzada a lo que ella rió tierna.

- Ya no me llames Miwa-san, de ahora en adelante puedes llamarme mamá. -me sonrojé ante tal petición.

- A-ah... e-eso... -mi padre jadeó llamando la atención.

- Eso no es algo que pueda ocurrir tan rápido ¿No? -Miwa lo miró.

- Bueno, es cierto... -me miró. - De todos modos, espero con ansias una vida juntas -me miró con una sonrisa de emoción, a lo que contagiada asentí sonriendo dulcemente.

- S-Sí... -dije para luego despedirme y dejarlos solos.

Suspiré caminando por los amplios pasillos del lugar, miré el cielo por entre los pilares.

- Se ven lindos juntos... -miré el suelo. - Ouhmg... Desearía que Mamá también consiguiera a alguien... -suspiré mirando al frente una puerta de madera, la abrí levemente observando el altar con poca iluminación y una cabellera particular, abrí los ojos sintiendo una punzada nerviosa en mi pecho. - N-Nat... -me sonrojé y resbalé el pomo de la puerta cayendo al suelo soltando un chillido.

- ¡_tn!... -el pelinaranja sobresaltado corrió hasta mi para ayudarme, se arrodilló frente a mi a la vez que yo me sentaba para observar sus ojos violetas levemente iluminados, ninguno dijo nada, solo oíamos nuestras respiraciones sutilmente alteradas. 

- ¡¡Hola!! -nos giramos a la vez para observar a los 12 hermanos juntos, miré al frente observando a Natsume sonrojada, el cual me sonrió muy levemente para extenderme la mano y ayudarme a ponerme de pie. - Te ves bastante linda... -el peliblanco junto su gemelo sonreían.

- Sí, te vez fantástica.. -el azabache respaldó.

- Viéndote tan linda, siento que te robarás la atención de todos. -

- Bien, vestirse elegante para parecer elegante.

- Te queda muy bien...

- Como esperaba de Louis, un gran trabajo.

- Sí, _tn-chan te ves muy linda...

- ¡Onee-chan parece una princesa!

- Es cierto...

- Con esto, todos estarán hipnotizados por ti.

Ante tantos cumplidos solo observaba sonrojada a cada uno, escuchando por encima, realmente en mi mente tenía a..

- ¡Hey! -abrí los ojos ante el repentino grito.

- ¿Oh Natsume-san está aquí? - el peliblanco se acercó para rodearlo con el brazo, el azabache se paró a un lado, los miré recordando aquel día en el parque a lo que bajé la mirada.

- ¿Que estaban haciendo? -Hikaru preguntó con una sonrisa traviesa, captando la atención de casi todos, yo los miré.

- ¿Ah? Yo solo me tropecé y Natsume-san estaba aquí... -Ukyo ladeó su cabeza.

- ¿Con que ya se conocen? -asentí inocente.

- Hah Natsume-niisan va a saco... -comentó el idol a lo que los demás empezaron a murmurar cosas similares, hice una mueca mirando al pelinaranja el cual frunció el ceño.

- ¡Deténganse! -todos miraron al trillizo mientras cerraban sus bocas mientras este mantenía su semblante serio, me miró y yo no pude evitar devolverle la mirada.

...