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Capítulo 22 (Parte 1)

Sentí como alguien posaba sus labios en mi mejilla. Abrí mis ojos.

A Shawn fue lo primero que vi.

—Buenos días—susurró Shawn mientras me dedicaba una sonrisa, me plantó otro beso en la mejilla.

Me quité las cobijas de encima y Shawn se sentó en mi cama a mi lado.

—Buenos días—lo devolví el beso en la mejilla—¿qué haces en mi habitación?

Tomé mi celular y vi la hora, eran exactamente las 7 en punto.

—Entré por tu balcón—dijo y señaló con la mirada. La puerta estaba abierta y entraba una corriente de aire que hacía mover mi cortina.

—Si mis papás nos encuentran nos van a matar—dije riendo delicadamente. Me levanté de mi cama y fui a ponerle seguro a mi puerta.

Caminé de nuevo a mi cama y me senté. Shawn me tomó del mentón y juntó sus labios contra los míos moviendolos con delicadeza.

—No habría mejor manera de despertar—dije entre sus labios.

—Lo sé, por eso quise venir—me abrazó—tengo que demostrarle a mi chica que de verdad estoy comprometido con esta relación.

—Wow—dije riendo—¿qué te picó?

—Absolutamente nada—dijo riendo.
Tomó un cojín que estaba detrás de mi.

Lo miré confundida, pero el solo me sonreía. Así que supuse que estaba bien, hasta que de pronto sin que me lo esperara, Shawn me pegó con el cojín en la cara haciendo que mi cabello se alborotara. Lo miré sorprendida y me acomodé el cabello detrás de la oreja.

Shawn comenzó a reírse.

—Shhh... Shawn mis papás nos oirán—dije susurrando pero él seguía riendo—muy chistoso ¿eh?

Tomé la almohada que estaba a mi lado y rápidamente la hice estrellar en la cara de Shawn antes de que él pudiera impedirlo. Su cabello se alborotó igual que el mío. Con tan solo ver su cara bastó para que yo también comenzara a reír muy fuerte.

—¿Así vamos a jugar?—susurró Shawn mientras se ponía de pie.

—Si, así vamos a jugar—me paré en la cama—vamos, que empiece la pelea.

Shawn me miraba desde abajo con una gran sonrisa en el rostro, tomó de nuevo el cojín y entonces yo tiré el primer golpe con la almohada, me miró sorprendido pero después el se subió en la cama y se quedó en la orilla junto a mi. Dio otro golpe con el cojín y este alcanzó a pegarme en la espalda y, mientras él estaba distraído, le di justo en la cara haciéndole perder el equilibrio y se tambaleó en la orilla de la cama pero antes caer me rodeo con sus brazos la cintura y los dos caímos. Quedé sobre él y comenzamos a reírnos. Sus ojos brillaban y me tenía abrazada de la cintura, no me resistí a besarlo, sus labios se movían al par conmigo haciendo que me sintiera tan feliz de tenerlo justo ahí a mi lado.

Escuché pasos en el pasillo.

—¿Alaska?—mi madre preguntó detrás de la puerta mientras la golpeaba—¿Estás bien?, escuché un ruido.

Shawn me miró con esa sonrisa perversa que tiene, yo sólo le hice una seña para que no hablara.

—Si mamá—me levanté del suelo y le tendí la mano a Shawn—todo está bien... lo que escuchaste fue mi lap.

—Está bien hija, el desayuno y está listo, baja por favor.—dijo mi madre y se escuchó como se alejaba.

Por suerte no había tratado de abrir la puerta.