_Espero que le guste_ murmuró indiferente.

Ella ocultaba algo... maldición!

_Claro que si_ respondí a mi propia confirmación y a su anhelo al mismo tiempo. ¿En qué momento ella había dejado de confiar en mí? ¿por qué no solo me decía con quién se había topado? ¿Había sostenido la mano de un extraño? ¿en qué circunstancias?... oh Bella. _Vamos a llevarla a casa_ murmuré señalando a mi hija, me puse de pié y pasé mi brazo por sus hombros. La sentí vacilar ligeramente con mi acto y la miré con el ceño fruncido, el monstruo en mi interior rugió y deseaba tanto como yo salir a buscar el rastro de ese efluvio, encontrarlo y tomarlo del cuello para obligarlo a confesar que había tratado de hacer con Bella, ¿por qué diablos la había tocado?... ¿por qué ella se había dejado tocar cuando era consciente de lo que significaba la piel de un vampiro para un humano... mierda! Ella era más inteligente que eso...

_¿Qué?_ murmuré al ver la duda en sus ojos,

_Quería practicar un poco con Emmett..._ murmuró ella mirando a mi hermano que estaba en el sofá con Rosalie mirando la televisión,

"Jah! Te lo dije iluso, ella quiere practicar con papá!" pensó él dando vuelta su cabeza para sonreír como un idiota.

_ Excelente, el bosque necesita una buena tala_ dijo en voz alta.

Miré a Emmett trasmitiéndole toda mi aberración y luego volteé a Bella, de ninguna manera iba a dejar que sucediera eso hoy... no cuando mi mujer apestaba a otra persona, debía hacer un cambio con eso.

_Habrá tiempo de sobra mañana_ dije con firmeza. Ella frunció el ceño... terca como siempre,

_No seas ridículo_ se quejó _precisamente lo que no tenemos es tiempo. Ese concepto ya no existe. Tengo un montón que aprender y...-

_Mañana_ corté radicalmente. Apreté los dientes y fruncí el ceño, consciente de la cantidad de presión que estaba haciendo con mis dedos clavados literalmente en su hombro, ella iba a venir conmigo a la cabaña porque bien sabía que era capaz de dejar a la niña con Rose y tirar a mí mujer sobre mis hombros para dedicarme a barrer ese olor de ella. Necesitaba hacerlo con urgencia y eso me desesperaba...

"No te exasperes ¿qué sucede contigo?" pensó Emmett en algún lugar de la casa, ni siquiera me molesté de dirigirle una mirada. Mis ojos fijos en los desafiantes de Bella, iría o iría... no había una tercera opción.

_Bien_ dijo simplemente antes de apartarse de mí y voltear hacia la salida con la niña en brazos. Ella sabía... ella sabía que a mí no podía mentirme, ni aún con los privilegios que obtenía siendo vampiro. Ella siempre fue y será para mí un libro abierto.

Sin decir una palabra más caminamos una a lado del otro a través de la puerta de la casa Cullen, ella sosteniendo a nuestra niña en brazos y yo sosteniendo su cintura posesivamente... oh cielos...

Posesión...

Que tan grande y oscuro sentimiento que había nacido en mi interior con tan solo haber olido una pizca de el olor de otro hombre en la mano de mi mujer, mía!... solo una pizca, casi imperceptible que había despertado lo peor de mí.

Corrimos antes de llegar a la orilla del río para tomar el impulso y saltar, siempre acordes uno con el otro. Con la punta de nuestros pies caímos con un suave susurro en la orilla contraria, Nessie no tenía ni un cabello fuera de lugar y el rostro de Bella era críptico.

Me maldije a mí mismo a medida que nos acercábamos a nuestra casa, justo cuando más necesitaba utilizar mis poderes con ella, no podía... no podía saber qué era lo que tanto guardaba con recelo en su cabeza, lo que había hecho que vacilara ante mí y lo más importante, a quién había conocido recientemente. Pero un destello... una imagen cruzo por la mente de mi niña dormida y decidí prestarle atención a ella.

Amanecer (por Edward Cullen)Where stories live. Discover now