La verdad en mis ojos

Su mente se arremolinó como un túnel de gusano y cada imagen, cada pedazo de información que contenía oculto en mi cerebro viajó a través de él como si hubiesen sido succionados por la cabeza de Aro. Me estremecí al mismo instante en que la primera imagen llegó a él. Bella diciendo "Sí acepto" en nuestra boda... dios, se veía tan hermosa, su cabello recogido detrás de su nuca y sus peinetas pequeñas de zafiros a los lados, sus ojos brillantes entregándose a mí para siempre. Ahora era parte de Aro...

"Claro... hermosa, sin embargo ahora más aún..." pensó en un fugaz microsegundo.

Las imágenes continuaron fluyendo, una a una... el viaje en avión a Brasil, yo cargando a mi esposa con las maletas cruzando la playa de arena hasta la casa en la Isla Esme, mis ojos fijos en la luna mientras oía los pasos de mi Bella desnuda detrás de mí, el primer beso antes de nuestra primera noche, su grito ahogado cuando la hice mía, maldición!... ¿por qué todo eso tenía que ser ahora parte de él?...

"Tu intimidad querido Edward, ¿fue en ese momento en que la concebiste?"

Me tensé por completo, claro que fue ese momento... o pudo ser cualquier otro en aquellas primeras veces. Eso no le concernía...

El momento en que Kaure vio a Bella, el momento en que se hicieron evidentes los primeros signos y síntomas se reflejó en mis pensamientos, aro lo vio... vio lo que la lugareña dijo y lo que vio. La primer testigo...

"Interesante... las tribus son sabias, deberías haber escuchado..."

"Lo hice" repliqué.

Luego vino lo peor, mi cuerpo entero se tensó ante el recuerdo. Si hubiese sido humano tal vez hubiese reprimido todos esos malos recuerdos, dejarlos en el fondo del inconsciente... pero era un maldito vampiro y me seguirían hasta el fin de mi existencia. Una a una las imágenes del embarazo de mi esposa se reflejaron en la mente de Aro, su dolor, su cuerpo delgado y castigado por nuestra hija, las ojeras debajo de sus ojos que brillaban de emoción cada vez que acariciaba el vientre, el dolor de mi familia, las conversaciones con Jacob, mi súplica para convencerla de... terminar con el proceso de gestación. Dios... que ciego estaba, tan cegado por el miedo...

"Quisiste matar a tu propia hija querido... si lo hubieses hecho no tendríamos que estar haciéndolo en tu lugar ahora"...

Apreté mi mandíbula, mis puños se cerraron al costado de mi cuerpo. ¿Cómo podía jugar con mi debilidad? ¿Cómo aún en mi culpa, mi gran culpa podía añadir más sal a la herida?... maldito...

Las imágenes siguieron, Bella rodando los ojos del dolor cuando se desprendió la placenta, mi niña ahogándose... oh dios...

Las maniobras en conjunto con Jacob tratando de salvar a la mujer que ambos amábamos, ella tan rota, tal frágil y ya perdida sobre la mesa de operaciones, esperando un milagro. Nessie saliendo de su madre, ella en mis brazos... la primera vez que vi sus ojos, la primera vez que sentí ese inmenso amor. Mi actuar enterrando la aguja en el corazón de mi esposa con mi ponzoña, ella muerta...

"Interesante. Ella realmente nació de tu esposa, ella realmente es tu hija" su pensamiento maravillado por el descubrimiento aplacó un poco el dolor del recuerdo.

Mi frenesí por salvarla, mis manos desesperadas bombeando un corazón muerto... mis plegarias para salvarla... El primer latido de su corazón expandiendo el veneno por todo su cuerpo, ella transformándose en la hermosa vampiresa que era ahora. Nessie tocándome, mi hija en mis brazos creciendo cada vez más día a día. Bella cazando junto a mí... nuestra primera noche juntos. Traté de romper la conexión para que eso quedara solo en mi mente, pero Aro lo ignoró, él continuó viendo...

Amanecer (por Edward Cullen)Where stories live. Discover now