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Dedicado a:
@Pia_Hernandez_ 2016
@palomita_86
@Leguizamont
@Jefferson_xoxo

Parpadeó un par de veces antes de que la luz del sol que se colaba por su ventana le lastimara los ojos.

Entonces, un estremecimiento le recorrió entero, apoderándose de lo más profundo de su ser.

Jamás imaginó que fuera de esa forma sentir a tu otra mitad cuando han formado un lazo.

Jamás imaginó siquiera que él llegara a tener uno.

No después de todo lo que le pasó. No después de haber sido un vendido durante cuatro años.

Pensó que jamás iba a ser tomado enserio; y cada humillación le hicieron alguien fuerte destruyendo su integridad.

Louis al fin tenía su marca.

Llevó lento su mano hacia su clavícula dónde esta descansaba. Roja e hinchada, ardía de una manera peculiar.

- Buen día, pequeño Louis.- Un susurro le erizó la piel, sintiendo este en su nuca, para después sentir las lamidas de parte de su alfa en aquella zona sobre marcada.

Tan profunda y abierta.

Sonrió.

- Buen día.- Murmuró con la voz ronca.

Habían pasado tres días completos desde que su celo había empezado y ahora, que ya estaba desapareciendo los síntomas, podía sentir con claridad cada partícula de emoción que Harry tenía.

Cada sensación de felicidad que le brindaba el estar con él, con el pecho hinchándosele de orgullo al tenerlo como su omega.

Todo el amor que el rizado contenía en su ser.

Y todo era para él.

Se miraron detenidamente, respirando cerca del otro, cubiertos por una fina sabana, con las piernas enredadas y empezando el suave movimiento de sus labios acariciandose entre sí.

- Mi omega.... Eres tan precioso.- Harry besó los párpados del castaño con este soltando una risita divertida ante ello.

Si bien, aún no podía expresar todos sus sentimientos por Harry en voz alta, su pecho burbujeaba de ellos.

Pero Louis, seguía siendo ciego. Aún no se daba cuenta, aún no caía del precipicio en el que se tambaleaba.

Amaba a su alfa, pero sus labios aún no podían pronunciarlo con toda la claridad que quisiera.

Aún estaba dañado, pero no se daba cuenta.

Pero Harry si.

Ahora sentía de igual modo el dolor de su pequeño. Le entristecía ver qué tan destruido estaba y le frustraba al querer abarcarlo todo y protegerlo para que nadie pudiera hacerle daño otra vez.

Por qué era suyo.

Por qué siempre lo sería.

- He tomado una decisión respecto a Rebecca.- Expresó él omega. Harry le miró con interés incitándole a que continuase de hablar. El castaño apretó los labios llevando su mano a acariciar su mejilla, deleitándose con aquella belleza natural. - Voy a matarla...-

- Harry!... Ábreme pequeño mocoso!- Ambos respingaron siendo interrumpidos por una voz demasiado escandalosa.

El alfa gruñó aferrando más a su omega hacia su pecho mientras Louis sentía un pequeño pinchazo en el suyo, pues la voz que se oía era femenina.

Vendido. "Larry"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora