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Las feromonas del omega en disgusto se esparcían a propósito y voraces por todo el despacho, ahogando a Harry, sometiéndole a la culpabilidad.

"Lou..."

"Maldita sea."

"Louis..." El castaño negó dándole la espalda al rizado y relamiéndose los labios tratando de mantenerse sereno.

"Esa mujer... Inteligente. Se ha salido con la suya." Masculló.

Harry suspiro acercándose a él y abrazándole por detrás, tratando de tranquilizarle.

"No es mío." Aseguró. Un corta carcajada del omega le hizo ver el cero enojo que este tenía hacia el.

"Lo sé." Dijo, de cierto modo seguro. "Pero entonces..." Se volteó hacia el. "De quién es?" Preguntó. Sus azules afilados con una seguridad propia.

"No lo sé." Harry subió sus manos hacia sus mejillas acariciandolas leve, queriendo que el más bajo se calmase de una vez por todas. "No se, pero voy a averiguarlo, Lou..."

"Maldita mujer." Gruñó. "Ahora que va a pasar?" Quizo saber.

"Hey... Mírame." Le pidió. Louis mantenía la mirada desviada ante el poco autocontrol que poseía.

En cualquier momento echaría a llorar de furia acumulada, pues Rebecca se la había jugado.

"Fitzgerald ahora sabe de su aparente embarazo. Todos en el cartel igual, incluso mi madre, aunque aún no haya hablado con ella, pues no sé si sabrá que aquello es mentira. El caso es que... Ha organizado una fiesta de celebración. Mañana en la noche." Dijo en desgana. "Ahora no puedo hacer nada, Lou..." Le dijo sincero. Sus azules se abrieron en demasía fulminándolo.

"Cómo?"

"Si la ataco, nuestros carteles se podrán en guerra. Apenas me hago con el mando, no puedo meterme en una grande aún. Si me divorcio y la repudio como omega, igual habrá una guerra. El respeto a mi familia se perderá. Nadie me apoyará."

"Pero ese niño no es tuyo!!, su celo... Esa mujer debió haberse acostado con alguien más para quedar preñada!. Te ha engañado!" Harry rió suave besando su nariz, notando como esta se arrugaba. "No es momento de besitos, Harry." Regañó. El alfa asintió embobado ante lo hermoso que ese omega era. Vaya que si.

"Si lo ponemos de ese modo, yo igual la he engañado, pequeño Louis." Él omega rodó los ojos cruzándose de brazos.

"Lo sé!, pero... Ash."

"No hay pero que valga, Lou." Le susurró. Louis hizo un puchero pronunciado mirándole triste.

"Qué pasará conmigo?" Preguntó con miedo.

Todo aquello le sobrepasaba. Si Harry no tenía el poder de sacar a Rebecca del camino para que pudieran estar juntos, el tampoco tenía poder alguno.

Si bien, se interesaba por lo que pudiera pasarle al rizado. Una guerra cuando aún estaba tomando el mando... Conocía bien el tema respecto a lo que en carteles trataba.

Había estado •trabajando• en uno durante cuatro años.

Una guerra no era una opción.

"Absolutamente nada." Aseguró el rizado. "Tú eres mi omega, recuerdas?" Louis asintió. "Ese hijo no es mío. No puedo probarlo ahora, si no hasta que nazca. Entonces ahí la repudiare y todos estarán de mi lado. Mientras, tengo que actuar como si me creyera aquello. Pero tú seguirás a mi lado, Lou. Que Rebecca este embarazada, no cambia nada."

"Por supuesto que sí!... Seguirás con ella!"

"Tú confía en mí." Le pidió.

"Yo no... Es que..." El castaño quizo decirle que no. Que no lo aceptaría nunca. Quizo mandar todo al carajo y decirle a Harry que le diera su libertad.

Vendido. "Larry"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora