Es tu paciente

7.6K 511 38
                                    

Dulce
Mi voz apenas se podía escuchar, era como un murmullo pero al parecer el me escucho, levanto su vista de la libreta donde estaba tomando nota no sé de qué demonios pero era lo que menos importaba ahora, lo mire fijamente
Dulce.- yo...lo siento- dije suspirando- solo tengo un mal día solo eso
Christopher.- ¿ansiedad por estar con alguien?- dijo mirándome por debajo de sis anteojos-
Dulce.- no, no tiene nada que ver el sexo. ¿Por qué piensas eso?
Christopher.- ¿a que se debe tu mal humor entonces?- dijo anotando algo en su libreta-
Dulce.- ¿por qué me respondes con otra pregunta?
Christopher.- dulce...- dijo mientras escribía-
Dulce.- no me respondas mejor- dije mientras jugaba con un mechón de cabello que había bajado a mi rostro-
Me quede callada otro rato, Christopher parecía que iba a hablar cuando yo lo interrumpí
Dulce.- ¿es normal que una madre no quiera a sus hijos?
Christopher.- ¿sucedió algo con tu madre?
Dulce.- ¿por qué piensas eso?- dije mirándolo por un minuto pero decidí seguir hablando- no contestaras...
Nos volvimos a quedar callados nuevamente, más bien yo me quedé callada mientras que Christopher solo me observaba viendo cada movimiento que hacía, miraba a otro lado intentando evitar su mirada el tiempo pasaba lento mientras yo jugaba con mis manos y veía de vez en cuando a mi alredor, Christopher hacía algunas anotaciones nuevamente hasta que de repente él decidió romper el silencio
Christopher.- las sesiones no pueden ser así, hoy venías alterada y lo deje pasar la próxima vez tendrás que expresar lo que sientes. No puedes estar callada todas las sesiones, para poderte ayudar debo de saber cómo comenzó todo esto, necesito saber por qué tus papás consideran que eres ninfomana
Dulce.- entonces ¿por qué no hablas con ellos?- dije sarcástica- ellos parece que me conocen perfectamente- dije cruzándome de brazos-
Christopher.- porque a mí me interesa saber la verdad de dulce solo eso- dijo mirándome- así que la próxima vez espero que hablemos más sobre el tema- dijo mientras miraba su reloj- por hoy hemos terminado te puedes retirar, nos vemos mañana- dijo levantándose mientras caminaba a la puerta y se retiraba su lentes- hasta luego dulce- dijo mirándome-

Christopher
Me estaba preocupando el comportamiento de dulce, el día de hoy había llegado muy alterada, realice algunas anotaciones de su comportamiento estaba nerviosa, débil, triste y enojada a la vez. Sus hermosos ojos avellana se veían brillantes pero no por Alegria era por las lágrimas que traía acumuladas y por un momento cuando realizó la pregunta de si una madre quería a su hijo me dio la respuesta que necesitaba, solo tendría que darle un empujoncito. Esa hermosa mujer tenía más problemas de los que yo pensaba, dudaba un poco de su ninfomania pero tenía que llegar al fondo para saber que había pasado y que la había orillado a eso.
Continúe con mis siguientes pacientes como todos los días pero mi mente seguía divagando en dulce en todos los momentos que habíamos tenido consulta pero en especial en la pose que había adquirido el día anterior y como se había visto de vulnerable hoy
Paciente.- entonces doctor la mujer trato de morderme en mis sueños y desperté mientras le daba un golpe a mi mujer- dijo preocupado- doctor...doctor...-dijo gritando la última vez-
Christopher.- si, disculpa estaba analizando tu sueño- dije mirándolo-
Mire mi reloj no había prestado atención a nada de lo que me decía este último paciente definitivo necesitaba irme a casa a descansar.
Christopher.- ¿que te parece si continuamos la siguiente sesión? Por ahora trata de mantenerte tranquilo y no dejes los medicamentos, te voy a recetar otro, ya que puede ser que estos sean los causantes de las pesadillas- dije escribiendo el medicamento que le daría-
Me despedí de mi paciente, entre nuevamente a mi consultorio acomode unos archivos de pacientes que estaba afuera sobre mi escritorio, acomode un par de cosas ya que me molestaba ver todo tirado, cuando todo estaba correctamente acomodado salí del consultorio me despedí de mi secretaria y me dirigí a mi departamento, al llegar saque unos ingredientes para prepararme una tortilla española, cocine para después sentarme a comer después frente al balcón donde podía ver caer la noche con todas sus luces manifestándose dándole vida. Cené con tranquilidad mientras a lo lejos escuchaba un poco de música, revise algunos correos de colegas que me invitaban a congresos para dar ponencias las cuales decline inmediatamente. Cuando termine de cenar me di una ducha, me coloqué el bóxer y después me acosté, prendí el clima del cuarto junto con la televisión puse el canal de noticias pero mi mente no estaba concentrado mi mente estaba pensando en cierta castaña de ojos avellana que últimamente no salía de mi mente, en ese momento recordé el pequeño short que llevaba el día que la vi en el súper en automático sentí como me ponía duro por debajo de las sabanas traté de apartar la imagen de dulce de mi mente pero no podía evitarlo sentía como mi excitacion crecía a cada minuto baje mis manos para tocarme pensando en ella, en como sus manos recorrían mi cuerpo y me decía palabras al oído para después mirarme a los ojos, imaginaba cómo se sentiría su piel contra mi piel mientras mi mano subía y bajaba, me imaginaba besando cada parte de su bello cuerpo como besaba y adoraba cada parte de el, me vi besando sus pechos atormentandola  de placer imaginaba cómo se retorcía para mí pidiéndome más mientras que mis besos descendían por su cuerpo hasta su parte más íntima mientras que su boca decía mi nombre una y otra vez implorándome porque me adentrará en ella, volvía a subir mis besos para después penetrarla fuertemente mientras ella se retorcía debajo de mi pidiendo más, mi mente volaba pensando en que tan apretada estaba para mí y como su parte más íntima me hacía saber que quería más, veía como nos movíamos como salvajes buscando nuestro placer, mi mano subía y bajaba estaba apunto de explotar empecé a mover mi mano más rápido hasta lograr mi satisfacción, cerré los ojos tranquilizándome, esa mujer era la culpable de todo con su seducción, esto no podía pasar no podía ver cómo algo más a una paciente, "ella es tu paciente Christopher" me repetía una y otra vez. Definitivo esto no era normal nunca me había pasado algo así con una cliente. Necesitaba desahogarme, ahora yo necesitaba ir al psicólogo....
---------------
Hoy les regalo otro capítulo de esta novela ya que en "Piel a Piel" no lo tengo escrito, pero las recompenso con este. ¿Como ven al psiquiatra? ¿Será que ya está entrando en su mente? 😈😈 dejen muchos comentarios y 🌟🌟🌟. Las quiero millones 💋💋💋

El sabor de tu piel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora