No estoy loca

11.5K 605 35
                                    

Dulce
La terapia estaba comenzado a gustarme...bueno no la terapia en si no, si no el loquero con el que papá me estaba obligando a ir y es que ese doctor estaba para comérselo entero, desde el día uno que llegue, que lo vi parado frente a mí disparo mis hormonas al mil con su maravilloso cuerpo que se marcaba a través del pantalón y ni que decir de su tremendo paquete que se marcaba a través de ellos junto con su maravillosa retaguardia; sus ojos maravillosos que tenían cierta profundidad y que cuando se ponía esos lentes para verme a través de ellos me volvía loca me hacía desear ser su alumna que él fuera mi profesor y me reprendiera por ser una mala niña, todo en el me provocaba besarlo, encendía todo mi cuerpo. Desde el día que lo había visto en el consultorio no había podido tener sexo con nadie más me pasaba horas encerrada en mi cuarto masturbandome pensando en el guapo de mi doctor, fantaseado como sus manos recorrían todo mi cuerpo junto con su boca y como la barba que se formaba después de algunos días de no rasurarse esos días ¡dios! me volvía completamente loca. Me había vuelto una completa obsesiva con este hombre lo seguía a todos lados donde hacía su rutina me aparecía "milagrosamente" en donde tomaba su café matutino o donde comía usualmente, me había costado mucho trabajo que no me viera la primera vez que lo espíe. Lo único bueno de todo esto era que mis padres creían que en verdad la terapia estaba funcionando, después de haber acosado a mi sexy doctor está mañana llegue a mi casa subí rápidamente a mi cuarto me encerré para meterme al baño, llene la tina con agua tibia y puse mi olor favorito "rosas", me desnudé lo más rápido que necesita sentir el agua caliente en mi cuerpo para despejar mi mente, no podía seguir solo masturbandome pensando en el tenía que lograr mi objetivo "el sexo" solo una ocasión solo necesitaba sentirlo una vez, cerré los ojos y a mi mente vinieron múltiples imágenes de mi doctor tocandome, penetrandome, haciéndome un maravilloso sexo oral. Abrí los ojos de golpe mis manos estaba vagando ya por mi parte más íntima y jugando con mi clitoris pero me rehusé a seguir con ello, termine de bañarme y salí de la ducha tenía que distraerme iría a la empresa de mi papá, necesitaba mantener mi mente ocupada por lo menos hasta las 5:00 pm que vería a Christopher. Tenía que hacer algo para seducirlo, ya se me ocurriría que hacer, baje me encontré con mi madre que como siempre me miraba como si estuviera enferma
Dulce.- buenos días madre- dije sentándome en la mesa-
Andrea.- buenos días dulce- dijo mirándome-
Como todos los días desayunamos en silencio sin decir una sola palabra, cuando termine salí de la casa, subí a mi automóvil me dirigí a la empresa de mi papá, al llegar me recibió mi padre junto con el contador de la empresa que por cierto ya había pasado por mi cama, cuando me vio llegar pasó por mi lado rozándome mi trasero por un minuto sentí una llama que se encendía dentro de mi, me guiñó el ojo, traté de controlarme y no saltarle encima por mi padre si era algo que necesitaba después de no tener sexo durante una semana necesitaba sentirme yo nuevamente. Traté de ignorarlo y vi a mi padre fijamente
Dulce.- buenos días papá
Manuel.- buenos días dulce, ¿que haces aquí?- dijo caminando a donde yo estaba-
Dulce.- creo que es momento para regresar a mi trabajo- dije mirándolo- he estado mejor, por favor papá me muero estando en casa, apóyame en esto por favor
Manuel.- creo que deberías hablarlo con tu terapeuta, si el lo aprueba mañana mismo podrías regresar
Dulce.- suspire cansanda - está bien al menos déjame quedarme aquí hoy necesito mantener mi mente ocupada
Manuel.- está bien, ahora tengo que ir a una junta- dijo abrochándose los primeros botones de su saco, me dio un beso en mi frente y salió de la oficina-
Me quede un rato sola mirando la pantalla de la computadora pensando en mi sexy doctor y nuevamente era como si mis manos cobrarán vida por sí sola pero el sonido de la puerta interrumpió mis pensamientos lujuriosos aparte mis manos de mi cuerpo.
Dulce.- adelante- dije recomponiéndome en ese instante la puerta se abrió y el contador entro por ella- ¿deseas algo marco?
Marco.- dulce, que bella estas el día de hoy, no necesito nada más que estar contigo, aún recuerdo la última vez que nos vimos
Y es que por culpa del estupido de marco mi mamá nos había descubierto por él es que ahora estaba en terapia aún recordaba ese día como si fuera ayer...
Flashback
Marco y yo estábamos en la mesa del comedor, estaba yo desnuda mientras marco estaba con los pantalones abajo y su camisa abierta completamente. Estaba besando mis senos mientras me penetraba fuertemente mis jadeos se escuchaban por todo el lugar, me excitaba el sentir esa adrenalina de ser descubiertos por alguien más, estaba tan mojada mientras él tomaba una de mis piernas y las subía a su pecho mientras seguía arremetiendo en mi interior provocando jadeos más fuertes de mi parte, la puerta del comedor se abrió
Andrea.- ¡dulce maria!- dijo mirándome-
Gire mi cara para verla, marco paro por un instante
Dulce.-¿no sabes tocar? ¿podrías dejarnos terminar?- dije de manera cínica y es que con el alcohol corriendo por mis venas no sabía lo que hacía-
Andrea.- eres una descarada pero esto lo sabrá tu padre- dijo mirándome con reprobación-
Salió furiosa del comedor dando un portazo, marco me miró algo asustado, pero lo bese y seguimos nuevamente con lo que estábamos hasta alcanzar el climax y quedar satisfechos completamente.
Fin del flashback
Marco me saco de mis pensamientos
Marco.- dulce ¿estás bien? ¿Que dices quieres repetir lo de la última vez?
Dulce.- me encantaría- dije mirándolo- pero estoy en terapia y debo de abstenerme del sexo es lo mejor dice mi psiquiatra
Marco.- pero nadie dirá nada ¿que dices si lo intentamos? Tu padre demorará un rato
Se acercó a mí empezó a pasar sus manos por mi cuello como sabía que me gustaba, cerré mis ojos disfrutando del placentero toque pero en mi mente imaginaba Christopher tocándome cuando abrí los ojos y vi los labios de marco sobre los míos me separé bruscamente no era lo mismo que Christopher iba a tener sexo con alguien más pensando en mi psiquiatra en verdad ese hombre me estaba llevando a la locura.
Dulce.- no, no puedo, por favor vete- dije empujándolo- déjame sola
Salió de la oficina rápidamente algo molesto porque lo rechace, traté de tranquilizarme un poco pensando en cosas completamente diferentes. Dieron las 4:30 de la tarde era hora de salir a mi consulta me había ido horas después de la oficina de mi padre me estaba aburriendo ahí sola, en el camino al consultorio los recuerdo de la primera vez que había visto a Christopher venía a mi mente
Flashback
Christopher.- mi edad no importa, necesito llenar tu expediente
Dulce.- suspire pesadamente- si me dices la tuya te digo la mía- dije coquetamente-
Christopher.- no se trata de mi te lo he dicho ya- dijo mirándome por debajo de sus gafas-
Llevábamos más de 20 minutos en este juego de querer saber mi edad y mi nombre
Dulce.- no estoy loca y no necesito estar aquí- dije mirándolo- aunque por verte a ti soportaría esta pesadilla
Christopher.- nunca dije que estuvieras loca, ¿que es lo que te trajo aquí?
Dulce.- mis padres creen que soy ninfomana
Christopher.- ¿por qué creen eso?
Dulce.- en varios lugares me han prohibido la entrada por tener sexo en lugares indebidos, mi madre me encontró teniendo sexo en el comedor y pues cuando era más chica me descubrió mi madre varías veces "autoexplorandome" pero eso no tiene nada de malo
Christopher.- muy bien, algo más que quieras platicarme, aquí todo lo que digas será confidencial nadie lo sabrá.
Dulce.- ¿hasta si tenemos sexo?- dije sonriendo mientras ponía mi mano sobre mi mentón-
Christopher.- tú y yo no podemos tener nada, somos paciente y doctor.
El teléfono de su oficina sonó, indicándole que el siguiente paciente había llegado
Christopher.- por el día de hoy terminamos, te espero mañana, margarita te dará consulta
Dulce.- muy bien, pero no quiere saber mi nombre doctor- dije caminando a la puerta donde estaba el recargado-
Christopher.- se lo preguntaré a tu padre
Dulce.- no es necesario doctor, mi nombre es dulce tengo 26 años y seré su perdición...
Fin del flashback
----------------
Esta mujer le acaba de declarar la guerra...¿lograra ser su perdición? Jejeje. Háganme saber sus opiniones, veo muy poquitos comentarios me desmotivan, por fa dejen aunque sea un sigue. Dejen muchos comentarios y 🌟🌟🌟 por lo menos 10 para que les regale hoy otro capítulo jejeje. Besos las quiero millones

El sabor de tu piel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora