¿¡Encerrados!?/Mundo Naruto Shippuden

"Gracias"

Naruto

Esto de verdad estaba pasando. No era ningún sueño. No puedo creer la suerte que tengo, si Hina me correspondio los besos, quiere decir que al menos le gusto y con eso me conformo por ahora. Por algo siempre se empieza, y no pienso rendirme, asi me lleve toda la vida me esforzare para que Hinata se enamore de mi.

- Hinata...- pero no pude continuar, ya que Hina me interrumpió.

- Naruto, no digas nada. Sólo disfrutemos el momento.

Quería hablar, dejar en claro mis sentimientos hacia ella, aunque no sintiera lo mismo. Quería que supiera lo dispuesto que estaba a todo por ella. Aunque por otra parte tambien deseaba disfrutar el momento. Sentirla junto a mi y no abrumarla con mis sentimientos. Aún teníamos dos largos días juntos, ya vendría la hora de hablar.

Hinata

Siendo sincera conmigo misma, no queria escuchar o hablar con Naruto. He soñado tanto tiempo con un momento como este entre nosostros que no quiero que las palabras lo arruinen. Por que sí, en ese último beso había sentido que Naruto la quería de la misma manera que ella a él, pero y ¿sí por deasearlo tanto, su cuerpo y mente habían jugado en su contra? Era muy distinto lo que ella creía haber sentido a lo que de verda siente su "amigo".

Sin darme cuenta Naruto había comezado unas lentas caricias en mi cabeza, entre más estaba metida en mis pensamientos y con ayuda a las caricias que estab recibiendo caí en los brazos de Morfeo.

Naruto

Estaba acariciando el cabello de Hinata, era suave y tan largo, pero mas me fascinaba la fragancia que desprendía. Era una mezcla entre lavanda y vainilla, lograba relajarme tanto que no me di cuenta cuando su cuerpo ya no estaba tenso y las de respiraciones se habían vuelto acompasadas y tranquilas, ya se había quedado dormida. En mis labios se formó una sonrisa sin poder evitarlo. Queria estar seguro de lo que ambos sentíamos, pero ya tendriamos tiempo para eso. Asi que mejor dejar esos pensamientos de lado, necesito dormir para estar al cien por cien mañana.

"Gracias Sakura y Sasuke sin ustedes esto no estaría pasando"- ese es mi último pensamiento antes de cerrar mis ojos y acompañar a Hinata al mundo de los sueños.

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Mientras un poco lejos de ahí en una habitación de un lujoso Hotel se encontraba un pelinegro recostado en la cama completamente desnudo, el sonido de la ducha era lo único que se podía oír en la habitación. El pelinegro estaba tan metido en sus pensamientos que no notó cuando su futura esposa con solo una toalla envuelta en su cuerpo se había parado justo a su lado.

- ¿Sasuke, amor está todo bien?

El pelinegro se sobresaltó al escuchar repentinamente la voz de la pelirosa. Inmediantamente dirigió su mirada a ella. Estaba con una pequeña toalla, con su cabello mojado y pequeñas gotas de agua resbalaban por su cuerpo, una sonrisa traviesa se asomó por su rostro, la cual no pasó desapercibida para la pelirosa.

-Sasuke no...- pero toda queja quedó a medias, ya que cierto azabache sin hacer el mínimo caso la había tomado por la cintura y se arrojó con ella a la cama, él quedando encima de ella.

-Todo está bien y más con esa vista que me has ofrecido.-Sasuke le susurraba a su pelirosa mientras poco a poco le retiraba la toalla del cuerpo y repartía unos cuantos besos por su cuello, Sakura prestando atención a sus palabras y caricias no puso protesta.- Sólo pensaba en como les estará yendo a Hinata y Naruto. Ya sabes toda esa tensión tanto física como de sentimientos.

-No creo que mal, Naruto no es tan tonto para no aprovechar esta oportunidad y Hina...-pero fue interrumpida por un leve gemido que salió de sus labios, ya que mientras ella hablaba su pareja se había dirigido a sus senos y en estos momentos los estaba atendiendo con unos exquisitos mordiscos, lamidas y chupetones.- Sa-sasuke, acabámos de hacerlo por segunda vez, ¿no estas ni un poco cansado?- solo escucho una risita.

-La verdad no, ¿cómo podría? Eres una droga para mi y ahora nada me impide ser más adicto a ti. Ya eras completamente mía, pero ahora que nos casaremos lo eres mucho más y no podrás escapar.- no hubo ningún momento en el que el pelinegro titubeara mientras le decía todo eso, en el proceso había tomado su mano y la acariciaba en el lugar donde se encontraba el anillo que simbolizaba su futura unión. Con una sonrisa la pelirosa se acercó y lo beso.

- Tampoco tengo la intención de hacerlo, nada me hace más ilusión que vivir mi vida contigo Sasuke,-el chico sonrió y volvió a besarla.-pero me siento algo mal por no decirle aún a los chicos.

-No te preocupes por eso Cerezo, cuando este fin de semana termine y regresemo se lo diremos.

-Lo se, fui yo la de la idea de encerrarlos, sabes que siempre he querido que esos dos por una vez sean felices y esa felicidad solo la encontrarán juntos, pero ¿si regresamos y todo cambió para peor?¿si nuestra amistad se arruina? Debí pensarlo mejor.

-Sakura no pienses así. Verás que todo saldrá bien y para nuestra boda estarán juntos y nos acompañaran en ese hermoso día como pareja. Como tanto lo deseas.

-Lo espero, de verdad que sí. Por eso te amo, siempre sabes que decir y eso que eres de pocas palabras.- la pelirosa soltó una carcajada.

-Graciosa pero así también te amo, y bueno ahora que estas tranquila. ¿Podemos continuar lo que empezamos?- como respuesta la pelirosa lanzó la toalla fuera de la cama mientras lo atraía hacia ella para fundirse en un beso profundo, lleno de amor, pasión y muchas promesas.

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Lamento la tardanza, pero he aquí la actualización.

Quiero agradecer al apoyo de todos y a la paciencia que han tenido esperando un nuevo capitulo. Estoy de vacaciones así que podre dedicarle más tiempo a la historia.

Espero sus opiniones y votos.

Att. Piedra