XXV

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Hecho Pedazos

-25-
"¿Volver?"

Ambos amantes, ya desayunados se sentaron sobre el césped a las afueras de la pequeña cabaña que ahora era ocupada por ellos.

Naruto observaba el vasto cielo azul y las aves que lo cruzaban, sus pensamientos volaban y giraban en torno a una sola idea...

—Quiero volver a Konoha— murmuró para sí mismo, aunque Kurama pudo oirlo. El pelirrojo fruncio el ceño y sus ojos brillaron levemente, pero Naruto no se percató de aquello.

¿Estas seguro?— su voz estaba calmada, muy al contrarió de sus pensamientos. —El Uchiha estará ahí ¿estaras bien?

Naruto volteó, tomo las mejillas del mayor, unió sus frentes y se miraron fijamente.

—Estaré bien, lo sé, porque tu estarás conmigo.— sonrió —Ademas, sabes que Konoha es mi hogar, no quiero estar lejos tanto tiempo.

Kurama soltó un suspiro de fingida derrota.

Bien, será como tu quieres Naruto acarició las manos del contrarió —decidiras cuándo partiremos.como agradecimiento, el blondo le besó la punta de la nariz y se puso de pié sacudiendo el inexistente polvo que cubría sus pantalones.

—Entonces será en una hora, iré a arreglar algunas cosas. Gracias Kura!— se dirigió a la cabaña pero se detuvo a medio camino y volteó a ver al mayor —Pero antes, quiero que me prometas una cosa...

El zorro simplemente alzó una ceja.

—No quiero que pelees con Sasuke— Kurama se puso de pie rápidamente al escuchar aquello y se acercó al blondo.

Debes estar bromeando...— mascullo —¿COMO QUIERES QUE EVITE GOLPEARLE LA CARA APENAS LE VEA? ¿¡ACASO NO RECUERDAS TODO LO QUE TE HIZO ESE BASTARDO?!

Naruto se mordió el labio y desvío la mirada. —Lo recuerdo, lo recuerdo perfectamente pero... Ya quedó en el pasado, ahora lo único que debe importarnos es esto, nosotros, nuestro amor— se acercó mas al mayor y besó la comisura de sus labios. —por favor Kurama, tienes que prometerlo.

El zorro soltó un bufido enfadado.

Bien, pero si ese bastardo me provoca no me contendre y le destrozare por completo— dijo y Naruto no pudo decir nada en contra.

—Gracias— le dio el último beso y retomó su camino hacía la cabaña.

Kurama quedo ahí de pie y al encontrarse ahora solo no escondió su rostro de enfado y sus ojos carmesí que centelleaban, aclamando por sangre.

Inhaló y exhaló continuamente, intentando calmarse, luego sonrío cínicamente... Bueno ¿que importa si Naruto deseaba volver antes de lo planeado? Nada, aquello solamente adelantaría sus planes.

Hecho PedazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora