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El timbre sonó anunciando que había llegado César con su hijo, fuí a abrir la puerta principal mientras mi mamá sacaba la comida del horno, cuando abrí la puerta ví a César con un ramo de rosas rojas y blancas, a su lado se encontraba su hijo, un chico de 20 años, con barba y una cara seria, no le gustaba la idea de estar acá.

–Hola, usted debe ser César y el es su hijo–Dije con una sonrisa en la cara, me gustaba la idea de conocer quién hace feliz a mi mamá–.

–Por favor, tratame de César, aún soy joven–Bromeó el señor que se encontraba frente a mí–.

–Por favor, adelante–Me hice a un lado dejando entrar a los dos hombres que se encontraban en la puerta, mi vista se dirigió al trasero del hijo de César, tenía un buen trasero y no lo podía negar, cerré la puerta y seguí ayudando a mi mamá con las últimas cosas que faltaban–.

–Hijo, invita a Jaime a la mesa, ya está todo listo y es hora de comer–Dijo mi mamá con una sonrisa tierna, asentí y me dirigí al salón, donde se encontraba Jaime mirando su celular–.

–Oye, vamos a comer, la cena está lista–Dije con una sonrisa, el me miró y solo asintió, suspiré y me acerqué a él–Oye, solo quiero que nos llevemos bien, si no quieres hacerlo por ti hacelo por tu papá, se nota que quiere a mi mamá. Tampoco me gustaba la idea de tener un hermanastro, pero con el tiempo tenemos que convivir, quizás se casen y nos veremos todos los días Jaime, pon de tu parte–Dije suspirando–.

–Mira niñato, no estoy para tú juego, no quiero ser tu amigo ni tu hermanastro, odio a los pendejos que fingen ser buena onda solo para quedar bien frente a su mamá, conmigo no te funcionará–Jaime se paró y se pasó por mi lado chocando hombros, suspiré y lo seguí un poco desanimado–.

Me senté al lado izquierdo de mi mamá y esperé a que terminara de servir, cuando ya estuvimos todos sentados comenzamos a comer.

–Y tú Nicolás, ¿estás estudiando?–Me preguntó César para luego hecharse un bocado de comida a la boca–.

–Si, voy en tercero medio–Dije con una sonrisa–.

–Me alegro, Jaime el siguiente año empezará a trabajar conmigo en mi empresa–Al saber eso solamente asentí, no me gustaba de que Jaime estuviese enojado conmigo–¿cierto Jaime?–Miré al pelirrojo y este asintió seriamente–.

Suspiré y cuando termine de comer levanté mi plato y lo dejé en el lavadero para luego irme a mi habitación, no me gustaba que Jaime estuviese así porque no le gustaba que su padre fuese feliz. Me encerré mi habitación y comencé a escuchar música con audífonos. Escuchando música me desconecto del mundo real y es como si me fuese a otra galacia, no me di cuenta cuando me empecé a quedar dormido.

Sentía que alguien me movia, empecé a abrir los ojos y ví un cabello rojizo, me tallé los ojos y ví a mi nuevo hermanastro frente mío.

–Tú mamá dijo que te viniera a ver, dice que tienen algo importante que decirnos–Dijo con su voz fría, me senté en mi cama y lo miré dirigirse a la puerta–.

–Jaime...–Lo llamé y el me miró–¿Después podemos hablar?–Asintió y salió de la habitación, luego de unos minutos baje y ví a mi mamá con César sentados en un sofá doble y a Jaime en uno solitario, me senté en un puff y me fijé a la pareja mirándonos–¿Que tenían que decirnos?

–Bueno, como ya conociste a César y a su hijo, queríamos darle la noticia que nos casaremos en un mes, y viviremos juntos–Cuando dijo eso mi mamá la boca casi se me cae la boca al piso–Nos iremos a vivir en unas semanas a la casa de César y espero que se acostumbren a están bajo el mismo piso.

–Pero mamá, el no quiere verme ni en pintura, no nos portaremos–Me quejé cruzandome de brazos–.

–Eso lo estuvimos pensando con Lorena, Nicolás–Me empezó a explicar César–pero Jaime tiene una habitación muy espaciosa y los dejaremos compartiendo habitación para que se lleven bien–Eso fue el colmo, miré a Jaime que miraba enojado a su padre y yo solo me sentí mal–.

–Lo siento César, pero no quiero hacer sentir mal a tu hijo, trataré de no molestar, si quieres duermo en el sofá, me hago una tienda en el patio, pero todo menos en la habitación de Jaime–Empecé a rogarle–.

–No Nicolás–Dijo mi madre seria–Hay que adaptarse a lo que hay, y si César dice que dormirás en la habitación de Jaime y punto.

Me dediqué a asentir y me dirigí a mi habitación para hacer mis maletas, quizás nos iríamos en un mes, pero prefiero ordenar hoy.

N/A:

Hola personitas, ¿como están? Espero que bien, espero que les esté gustando la novela, voten y comenten, estaré dedicando capítulos a los que me pidan, intentaré dedicar lo máximo posible. :3.

//Adiós//

STEP BROTHERS-JAINICO- [AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora