Cuando Conocen A Nuestras Parejas Favoritas

Pelea Callejera

- Me rompes el corazón Bro. Desde ahora dejarás de ser mi Bro.

- Pero... Vamos Bro, lo siento...

- No hay peros que cuenten

- Lo siento, Bro. Vamos dame una sonrisa.

- No.

- ¿Bro?

- ¡Por los dioses! - les interrumpió Rachel - dejen sus momentos homosexuales para después.

Yo solo me aguante la risa, estos dos siempre actuaban así.
Casi siempre paraba con ellos, había entablado un amistad con ellos.
Antes casi siempre era solitaria.

A la salida Rachel me tenia que esperar ya que iba ir a su casa para acabar un proyecto que teníamos, después ella se iba a la casa de Percy para la fiesta. Yo tenía que estudiar todavía para algunos exámenes que tenía al día siguiente.
Ya estaba afuera junto a un chico de aspecto latino con una sonrisa juguetona en los labios.

- Laurel, te presento a Leo. Un amigo de nosotros. Vino para llevarse a Jason a comprar el regalo para Piper.

- Hola - saludé con una sonrisa y quise preguntar a Rachel si ya nos íbamos pero no pude por que de repente tambaleó.

- Eh, rojita - la sujeto Leo - ¿Que pasa?

- ¿Estas bien? - pregunté yo.

- Los chicos... - comenzó a murmurar de repente.

- ¿Que pasa con ellos?

- Pelea, en un parque, Matt tiene a una pandilla, quiere vengarse.

Leo y yo le miramos sorprendidos.

En vez de preguntarme como rayos supo eso. Sólo se me quedó una frase en mi mente: Están muertos.

 - Eso era lo que iba decirles. - Percy habló de repente. No me había dado cuenta que ya habían estado a lado de nosotros - Nos han pasado una nota, diciendo que nos esperaban para una pelea. La firmaba Matt.

Recién me di cuenta. ¿Como rayos se había enterado Rachel más antes que ellos? De repente caí en la cuenta de algo más importante. Matt los había citado, y todos sabíamos que el tenía toda una pandilla de 15 a 20 chicos con los que solia amenazar a otros. Y como ellos lo habían enfrentado defendiendo a los demás era obvio que ahora quería vengarse y claro que no solo, era un cobarde. Por eso había reunido a sus pandillas.

Tenía miedo de lo que fuera a pasar.

Para mi sorpresa Leo se rió.

- ¿En serio? Solo usaremos... lo que tenemos para defendernos.

- Leo - dijo serio Jason - No podemos usarlos frente a los mortales.

¿Mortales? ¿De que hablaban?

- Bueno somos 3 ahora contra unos 5 o 6, supongo.

Yo negué con la cabeza.

- A lo que sé, él siempre reúne como 20 chicos o más, que no siquiera son de los que estudian aquí.
 
- Oh, entonces la cosa está grave si no podemos usar nuestro pod... digo ¿dones?

Jason y Percy lo fulminaron con la mirada mirándome de reojo.

No entendía nada de lo que hablaban, lo que si sabía era que estaba asustada.

- ¿Que van hacer? - les pregunté.

- Pues tenemos que ir - se encogió de hombros Percy.

-¿Están locos? - dije yo. La última vez que había pasado algo así fue el anterior año, eran tres chicos a los que dejaron casi muertos. O sea, se que estaban en buena forma física; pero ellos le sobrepasaban en número. - Esos deben ser más de 20.