Lloro, para limpiar mi alma de remordimientos, que aún agonizan en el limbo del perdón.
Lloro para refrescar mis arrugadas ilusiones y renovar mis sueños cada noche.
Lloro para aquietar el vuelo de mis deseos, para pausar el grito de mis melodías llamándote cada noche.
Lloro porque luego mi corazón respira con cierto alivio, con cierto sosiego con cierto deleite apacible.
Lloro para dibujar una sonrisa al ritmo de la esperanza que aún me mira con cierta compasión
Lloro porque a veces, todavía mis manos extrañan ese baile pendiente con tu cintura
Lloro porque es la única forma de liberarlos al vuelo a los besos acumulados en mis canciones.
Lloro como la lluvia, cuando besa a la tierra y yo persigo ese aroma, porque me lleva hacia ti, siempre.
Lloro y mis lágrimas siguen el cauce de mis heridas acurrucadas que aún esperan el otoño primaveral de nuestra historia.
Lloro para silenciar mis miedos que acechan mis pasos cada vez que tropiezo con alguna añoranza tuya.
No lloro por ti, lloro por mí, porque cada uno tiene una y mil razones por las cuales llorar ; hoy lloro y sonrío porque se siente bien que llueva algunos días especiales como hoy.
YOU ARE READING
Mil y un poemas en silencio #TDA2017
KöltészetUna historia en base a prosas libres y versos de amor entre recuerdos, sueños, cantos, susurros y gritos desde un corazón enamorado ; algunas veces con tintes de melancolía , pasión, ternura y alegría.