Sassy omega ; joshler [omegaverse]

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—No le digas lo del casi beso a Chriz—dice su tío sonriendo—Se que el quiere que salgas con su hijo, pero sigue siendo su padre y es celoso.

Josh asiente—Sí, creo que entiendo. Además no quiero que sepa que Tyler esta enojado conmigo.

—Deberías ir pensando que hacer para conseguir su perdón ahora—murmura Max—Pregúntale a Chriz que le gusta.

—No soy muy bueno para las citas, evidentemente—murmura Josh, suspirando.

—Mira el lado bueno, le gustas a su omega—responde Max, obvio—Tu mamá se enamoró primero de tu padre, su omega interior tardó en reconocerlo.

—Tyler es difícil, somos tan diferentes. Aún así el me gusta y creo que eso me facilita mucho a la hora de estar con el—acota Josh, mirando a su tío.

Este asiente—Y mejor, ¿no?. Si fuese una persona igual a ti, te aburrirías de el y el de ti.

Chriz Joseph llega unos diez minutos después, abrazando a su viejo amigo y estrechando la mano de Josh.

—¿Cómo te va con mi hijo?—pregunta el hombre, cruzándose de hombros.

Es la primera vez que Josh se siente intimidado bajo la mirada del alfa mayor. Max ríe ante eso y su sobrino lo  mira mal.

—Bien, eh, ayer tuvimos nuestra primera cita—contesta Josh, midiendo sus palabras.

Chriz asiente levemente—Espero que no hayas intentado sobrepasarte con el, puedes hacerlo recién en la sexta cita.

Josh ríe, pensando que eso había sido una broma. Pero el señor Joseph ni si quiera le sonrió e incluso se veía aún más serio. Max rápidamente llama la atención a su amigo.

—Josh es medio tonto, no te preocupes Chriz—dice Max, sonriendo con confianza.

—Sí, de hecho me gustaría saber más sobre Tyler—dice Josh, asintiendo aún que rápidamente se dio cuenta que concordo con que el mismo era medio tonto—¿Qué le gusta?.

—Creo que es mas fácil decir lo que no le gusta—ríe Chriz esta vez, en broma.

Josh ríe ante eso aún que no le haya causado gracia y su tío se ríe de el por eso.

—Le gusta el básquet, el era muy bueno en eso—prosigue Chriz, recordándolo—Hasta en el edificio donde vive tiene una cancha de básquet. Puedes invitarlo a algún partido o no se, Ohio State viene a jugar la semana que viene.

Josh parece pensativo, pero la verdad era que no quería que Tyler siga molesto con el mañana.

—¿Cuál es la dirección de su edificio?—pregunta el tintado, aún pensativo.

***

Tyler suspira aburrido, ninguna película en Netflix le llama la atención para ver. Hoy era su día libre, por eso amaba los martes. Planeaba pasar toda la tarde en la cama, aún presentía que su celo estaba cerca aún que el era irregular, así que no le sorprendía tener su celo incluso en un mes.

El timbre suena y el frunce el ceño. Sabía que no podía tratarse de nadie de su familia, porque ellos sabían que los martes eran sagrados para el y nunca iban a molestarlo.

Pero entonces un aroma a lo lejos llamó su atención, una aroma conocido.

Josh.

Se levanta de su cama, totalmente nervioso mientras el timbre sonaba por segunda vez. ¿Qué hacia el alfa acá? Y sobretodo, ¿cómo sabía donde vivía?. Aún estaba  enojado, su omega estaba ofendido y el estaba avergonzado. Sentía que Josh había jugado con el, que había coqueteado con el solo para burlarse.

Camina hacia la puerta, pensando en que ni si quiera va a intentar ser educado con el alfa.

—¿Qué haces aquí?—fue lo primero que dijo Tyler, al abrir la puerta—¿Qué quieres? ¿Cómo mierda sabes donde vivo?.

—Yo... te seguí el otro día—miente Josh, nervioso.

—Podría denunciarte por acoso—responde Tyler ante eso—¿Qué haces aquí?.

Josh mira hacia el interior del departamento, notando la pelota de básquet tirada al lado se un mueble.

—¿Juegas al básquet?—dice Josh, pensando rápidamente.

La verdad era que ni bien Chriz le había dicho la dirección, subió a su auto. No había pensado mucho en un plan, solo quería arreglar las cosas con Tyler, aún que sabía que iba a ser muy difícil.

—No, juego al hockey—responde Tyler, irónico—No se cuántas veces debo preguntarte qué mierda haces aquí.

—Mira Tyler, perdón por lo de anoche, ¿sí?. No creas que no quería besarte, porque si lo quiero y lo deseo mucho. Pero no quería que fuera así, quiero que sea porque tu quieres y porque tu sientas algo por mí, no solamente tu omega—dice Josh, sonrojándose al final.

Tyler se sorprende y cierra su boca, sin saber que decir porque de verdad no se esperaba eso. Siente sus mejillas arder, se había sonrojado. No sabe que decir, ni que pensar. No había muchos alfas que pongan las necesidades de un omega primero que las suyas. Y Josh quería que Tyler se sintiera listo.

—De verdad quiero salir contigo, me gustas—murmura Josh, queriendo que Tyler lo mirara a las ojos—Dame una oportunidad.

Ya era mucha información que Tyler debía procesar. Ahora era el turno de Josh de sentirse avergonzado, más no había mentido, Tyler le gustaba y pensaba que ya era muy obvio.

—Está bien, Josh—responde Tyler, en un susurro.

De verdad no sabía qué decir, se había quedado sin palabras pero sentía que sí, quería darle una oportunidad a aquel alfa.

—Vi una cancha de básquet por una de las ventanas del pasillo—dice Josh, totalmente incómodo queriendo cambiar de tema entre ellos—¿Te gustaría enseñarme a jugar un poco al básquet?.

Tyler ríe—No se si puedas jugar mucho, creo que a veces te olvidas que tienes un esguince.

—Claro que no lo olvido, gracias a que me lastime te conocí, no podría olvidarme de eso—sonríe Josh de lado, logrando que Tyler haga una mueca pero sin dejar de sonreír—Vamos, enséñame a encestar.

El castaño se aleja para tomar la pelota y saca la llave de la puerta. Lleva su mano al pecho de Josh, empujándolo para salir de su departamento.

—Sigo ofendido, pero quiero ganarte encestando. Vamos—sonríe Tyler, egocéntrico.

Josh ríe y sigue al omega por el pasillo, lo mas rápido que su pie lastimado se lo permitía.