Estuve dos años y medio escribiendo ésta historia, que realmente se ha vuelto parte de mi ser. Me rompe el corazón que haya terminado, pero todo lo bueno tiene su fin, ¿no?
Primero que nada, quiero agradecerle a Sofía alias Penny Rigby, quien gracias a esta historia se convirtió en mi fan número uno y en una de las mejores personas que conocí en la vida. Ella siempre estuvo ahí, leyendo mis crudos y aconsejándome cosas. Además de haber sido y de ser una amiga excepcional, en el tramo de esta historia se convirtió en mi mano derecha, y estaría muy mal no darle las gracias por simplemente estar ahí para mí.
En segundo lugar, quiero agradecerle a mi mejor amiga, mi hermana del alma, Carolina Albiñana. Ella me apoyó en todo, estuvo ahí para mí detrás de bastidores. Sin su moral y amor hacia mi, yo no hubiera podido terminar esta parte de mi vida. Ella me ayudó a soltar determinadas cosas, y me abrió lo ojos como nadie.
Estoy en deuda con ella, y es por eso que le agradezco de corazón todo esto.
En tercer lugar, quiero agradecerle a la persona que me inspiró para hacer esta historia. Sin esta persona, yo nunca hubiera escrito cada uno de todos estos 16 capítulos.
Me enseñó a querer, a llorar; me enseñó a obsesionarme y a darme cuenta de cómo son en verdad las cosas. Y todo esto, sin siquiera ayudarme en sí.
Simplemente, gracias.
Y por último, pero nunca menos importante, quiero agradecerle a la gente que leyó la historia. Ustedes me animaban a seguirla, aunque saben muy bien que tuve problemas en el medio. Sin sus votos, views o comentarios yo no hubiera podido seguirla. Todo tiene que ver con todo, y que gente desconocida para mí lea mis creaciones, simplemente no puedo explicar cómo me hace sentir aquello.
Estoy agradecida de corazón con todos ustedes, ¡gracias totales!
