El Ruido de tus Zapatos (Larry Stylinson)

Capitulo 15

“Entre él  y ella: existe un gran abismo, él se entrega todo… ella lo preciso” J.O

VIERNES

7:10 AM

Amaneció: con una erección mañanera que tenía: nombre, apellido y un ÁngeloF24.

Entre la teoría de Kant y Ford, él adquiría la propia: él abogado Tomlinson besaba como los dioses. Si tan solo cerraba sus ojos aún podía gozar su sabor y recordar mordida a mordida aquellos buenos besos que se habían atrevido a darse. Los suspiros pausados, hablaban más que cualquier palabra. Se veía tan ridículo tarareando canciones de amor cuando salió de casa.

Si su memoria no fallaba, nunca había probado unos labios como los suyos, delgados y hambrientos. Ese hombre sabía usar la lengua y como tocarlo, sabía cuándo morderlo y como chuparlo, aunque se resistía bien que le gustaba acariciarle al punto de hacerle perder los estribos.

Si era sincero con él mismo: se trataba de la primera vez que salía con un hombre adulto y casado, por no mencionar padre de familia: que de solo imaginárselo  en esa  faceta le agarraban tremendos retorcijones de estómago a tal grado de no poder concentrarse en la clase, ni a agarrar con  calma el puto lápiz.

Para finalizar la clase, el profesor recito una cita gastada de un novelista que no alcanzo a  escuchar por no prestar atención. A su alrededor toda la clase comenzó a salir del aula.  Miro a Ed preocupado y este le sonrió amablemente guardando sus libros.

 –¿Se puede saber que tienes?... Estás raro – le pregunto mientras colocaba en el libro de pasta dura las notas de la clase.

 –No dormí muy bien–

Se las arregló para que su amigo le creyera, no era fácil mentirle pero se vio obligado por las circunstancias, además no sabría que decirle.

 –He… harry   quería preguntarte algo…  pero tienes que prometerme que no se te vas a enojar –

 –A ver –

 –Bueno… aquí voy… eh… quiero invitar a salir a tu prima –

 –Ni lo pienses – le aseguro harry con una expresión molesta.

 –¿Por qué? – pregunto, con una sonrisa silenciosa.

 –Porque no… Ed ¡por favor! Es… es… Perrie, es como si fuera… tu hermana menor –

Harry no quería que Ed saliera lastimado, conocía a su prima mejor que nadie: Perrie no sentía lo mismo. Sin embargo, Ed no le digirió la palabra, estaba molesto para el pelirrojo solo era egoísmo por parte de harry y  necesitaba contar con su apoyo.

–Sabes que te apoyo pero sal con alguien más – Le explico harry amablemente y ofreciéndose a invitar el desayuno esa mañana – ¿Qué pasara cuando terminen? ¿De qué lado me pondré?¿del tuyo o del de ella? Porque los quiero a los dos por igual –

Buscaron una mesa al aire libre, varios alumnos les miraban curiosos y murmurando bromas, ignoraron aquello para volver a la conversación: una vez que cada uno busco un asiento y estuvieron frente a frente Ed pudo sincerarse.

–¿Sabes? – Se aclaró la garganta mirándole a los ojos –  En verdad me gustaría que me dijeras, ¡claro amigo! ¡Te apoyo!… ¡porque eres un buen tipo!, ¡te conozco desde hace tiempo!, ¡serás alguien bueno para mi prima! y ¡estaré muy feliz por ustedes! – Harry abrió los ojos y comprobó que Ed realmente hablaba enserio.

–Estaré muy feliz por ustedes – Repitió harry aquellas últimas palabras con el tono de un niño regañado. Ed le sonrió satisfecho antes de beber de la lata el refresco después tentado  harry le pateo con el tennis jugando, volviendo a ser los de antes.