Capitulo 14

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 “Sabemos lo que somos pero no lo que podemos llegar a ser” William Shakespeare





-¿CÓMO SE TE OCURRE hablar así en delante de él MALIK?- expulso Louis aventando su portafolio a uno de los asientos, mirándole enojado. Zayn dejo el tabaco en el cenicero para poder utilizar sus manos, no entendía el cambio de actitud en Louis. 


-¿Qué tiene? Es un consejo… no seas exagerado, ¿crees que a él le importa lo que hagas? Por supuesto que  no, te recuerdo que está aquí para aprender de nosotros no para preocuparse por  tu vida personal – lo dijo con simpleza. 


-Porque es personal es privado ¡yo no quería que nadie se enterara! ¡Ni si quiera tú! ¿Por qué no puedes tomarte nada enserio? – reprocho Louis bastante resentido. 
- ¿Y tú porque no te relajas? – 
-¡No puedo creerlo! ¡Te juro que no puedo! – 
-Ya… cálmate, si quieres mañana le digo que haga como si no escucho esto – 
-¡Nooo! ¡Ya no le digas nada! ¡Ni siquiera le menciones el tema! – 
-AMIGO, debes de tranquilizar tus emociones, dios… si no tienes sexo pronto, vas a explotar un día de estos  – 
-¿SABES QUE? No quiero discutir contigo, mejor me voy… llego tarde – 


Zayn giro tres veces la silla en el escritorio, confundido y  para este tipo de situación solo existía una cosa por hacer beber y rentar una película antes de llegar a casa porque era martes  y no tenía ganas de dormir con ninguna mujer. 


XXX
-Siento interrumpir, disculpe… disculpe  - 


Perrie tomo el autobús para ir a verlo, apenas le contaron lo que había sucedido en los vestuarios podía imaginarse las cosas malas, y no importaba si harry se enojara con ella por venir  necesitaba saber que estaba bien, al saberlo se iba y punto. 


-¿En qué puedo ayudarte? –una voz amable le contesto.
-Estoy buscando a Harry es un chico alto, ojos verdes… viene aquí a hacer prácticas – 
-¡Oh! ¡Ya! ¡sí! ¿Puedes esperar un momento? – menciono. 


Harry salió del elevador buscando con la mirada quien lo estaba buscando y apenas la vio le puso una mano en el hombro y la llevo a otro lugar ante la mirada curiosa de la recepcionista, solamente le sonrió y camino con su prima más rápido. 


-Me entere de lo que paso en los vestuarios, entre Ben y tu… quería que me dijeras que estas bien   - le explico  ella mirándolo a los ojos, falsa alarma. 
-Lo estoy –
-Me dijeron que entro a los vestuarios para buscar… a su novio, todos dicen que trataste de seducirlo, Y…  – ella trato de explicarle lo más calmada posible pero simplemente harry no la dejo. 
-¡ES QUE ES MENTIRA! Él entro por voluntad propia, todos estaban afuera ¿Yo tratar de seducirlo? ¿Qué les sucede a todos?  – Harry pasaba sus manos desesperado ¡sabía que se venía peor! ¡Estúpido Winston! 
-¿No has podido olvidare verdad? – Perrie mostrando una faceta más tranquila, pregunto temerosa y es que no era para menos la mirada fría que su primo le dedico era para estarlo.
-Perrie… ¿Cuántas veces te lo tengo que decir? Lo he olvidado, no me molesto su novio, me molesta que este cerca de mí y en todo lo que hago, lo acompañara a los entrenamientos, posiblemente a todos los partidos… ya quiero escuchar todo lo que dirá el instituto “oh pobre harry su ex con ese nuevo chico, debe sentirse horrible” –
-A la mierda el instituto ¡No dejes que te afecte eso! Solo debe importante lo que las personas que te quieren dicen de ti, no otros – 
-Muy bonitas palabras de superación personal, enserio…  perrie estoy bien – 
-¿Te vas a casa? ¿Por qué tienes tus cosas? – pregunto ella.
-Estoy esperando a… -corrigió a tiempo - unos papeles, vete sola ¿si? te llamare cuando llegue a mi departamento - 


Después de un silencio por parte de harry; ella asintió con la cabeza mientras se  acercaba para abrazarlo en forma de apoyo, apenas se separaron del calor fraternal.  Harry le sonrió para que ella se tranquilizara, después se fue despidiéndose con la mano derecha antes de salir del edificio. Y Harry inclino la mirada procurando dar una media vuelta. 


-Pensé que Niall te había explicado sobre las visitas en horas de trabajo – dijo una voz familiar para harry obligando a voltear a verlo, caminaba para recepción con porte y con el maletín color carbón sobre el brazo. 
-Yo no trabajo aquí, así que… - le dijo cuándo paso por su lado.


El abogado se detuvo para observarlo a los ojos, la estatua del logotipo de la corporación los cubría de recepción y  a un par de pasos más chocaban con las puertas del elevador sugestionando ideas para el menor.


A Louis no le gusto verlo con una chica, tan joven y tan… bonita. Mientras los miro abrazados sostuvo el portafolio lastimándose los nudillos, la boca se le enderezo y su mirada congelo la escena. Pero eso… por supuesto que jamás se lo diría. 


-No importa que no trabajes aquí, te apegas a lo que está en el protocoló – Louis lo miro orgulloso y un poco desafiante. 


-¿Esto es por el protocoló de la empresa o por su protocolo? – le pregunto harry con una sonrisa satisfecho con él mismo, y también como diciendo: “¿esta celoso o algo parecido?” 
-Tengo prisa – menciono para despedirse pero harry se preparó para tomarlo del brazo antes de que se fuera, dejándole el claro que no lo dejaría ir tan fácil. Louis no hizo nada para que lo soltara, estaba curioso por el futuro. 


Tenía curiosidad por sus labios, su sabor y su lengua. Tenía en su mente imágenes del ritmo con el que lo besaba y se aprovechaba de la situación mordiéndolo, era simple curiosidad porque no era una mujer y le despertaba acariciarlo, no era su esposa y le despertaba estrecharlo contra su cuerpo concibiendo  una ráfaga de impulsos en sus pantalones. 


Era ridículo, pensaba. 


Tener casi treinta años y no poder descubrir lo que te sucedía, es como si te despertaras de la noche a la mañana y dijeras: bueno… hoy quiero intentar con los hombres. ¿Pues a que estábamos jugando? O eres o no eres: no se puede estar en medio.


-No juegues conmigo ¡por favor! – El abogado optaba por irse y abandonar el pasillo pero en lugar de eso fue metido al elevador atraído a un dulce aroma y una mano obligándolo. 
-Pero no es un juego ¡ENSERIO! me gusta – Con un fuerte agarre el joven le detuvo con el brazo, impidiéndole que huyera de nuevo, intentando presionar el botón a equis piso.
-¡No me toques! ¡Suéltame! – Harry de mala gana lo soltó. 
-LOUIS… - le hablo en alto y claro. 
-¡ESTOY CASADO! – Harry ignoro el anillo que le mostraba: más caro que sus tennis o cualquier objetivo que posiblemente él tendría bajo sus pertenencias para agachar la mirada avergonzado. 
-Eso no le importo la primera vez – Levanto la mirada, sin dejarse intimidar: Quiso explicarle que él no tenía como hábito meterlo en problemas y mucho menos la infidelidad un deporte extremo. 
-¿Y esa chica? – Quiso saber Louis de inmediato - ¡¿Quién es?! - 
Desesperado, en una serie  de guantazos, empujones e intentos de Louis de zafarse pero todo fue inútil: lo metió a la fuerza al elevador, quedo sujeto por sus brazos rodeándole  y obligándole a mirar a los ojos, sin salidas de emergencia. 
-¿Quién Perrie? ¿Ella? – Harry camino un paso hacia adelante. ¡Oh por dios era su prima! No existía ninguna mujer en sus intereses; ni hombre; ni nadie importante;  ¿estaba mal decir a esas alturas que solo le importaba  él? Pero se lo guardo para sí mismo. 
-Ni idea como se llame pero de una vez te advierto algo, SI VAS a jugar  – comenzó a decir con un tono de voz autoritario y demandante. Harry se acercó hasta sentir su piel, para fundirse en la mirada océano que casi lo ahogaba. 
-Usted… jamás sería un juego – Harry espero que le mirara a los ojos para seguir hablando. 
-No me digas eso – Louis aparto su mano bruscamente -  nada más te aviso… que en lo que tú vas, yo ya fui… di tres vueltas y regrese…  solo… contéstame una cosa harry no soy el único ¿verdad? – sus pupilas brillaron de curiosidad; harry protesto con la mirada en su defensa “En la cama no; pero en mis pensamientos si” Louis golpeo con una mano la pared desesperado “eres un juego para él louis” “que esperas que te diga ¿Qué eres el único?”. Harry contesto a eso  sonriendo con los labios apretados y una mirada cautelosa. 
-¿Era yo de quien hablaba el abogado Malik? ¿Le preocupa mi edad, es eso? – le cuestiono en ese entonces por simple curiosidad. 
-Yo pregunte primero – le advirtió. 
-No he conocido a nadie quien me importe de verdad – le confeso pero Louis no le creyó. 
-¿Y qué si eres tú esa persona? ¿Qué piensas hacer si eres tú? – Louis no atrevía a hacer nada más que hablar claro. Inmediatamente harry sonrió por esa respuesta -¿Por qué sonríes harry? Me… Pone nervioso –
-¡Dígalo! – Insistió -  Diga que soy yo ¿sí o no?-  animándolo un poco. 


Louis no hablaba replanteándose todo hasta ese momento y las consecuencias de cómo le afectaría, sin embargo entre tantas malas noticias se coló las ganas que tenia de volver acariciarlo y sentir su tibia piel de nuevo. Sus ojos le miraban esperando una respuesta mientras que los de él lucían cansados con  inseguridad a su respuesta. 
 
-Si en díez segundos no se ha ido voy a tomar eso como un sí – dijo deliberadamente, tirando su mochila de sus hombros. 

El Ruido de tus Zapatos (Larry Stylinson)Where stories live. Discover now