- Era tu amigo. Es normal que estés así.

- Era malo.

- Todas las personas somos malas a veces. Era tu amigo, Hobi. Puedes estar triste. –me separé y acerqué mi manga a su rostro, limpiándoselo con suavidad. Era extraño verle de esa forma, tan vulnerable y frágil. Realmente sentía como se me encogía el corazón. – Puedes estar triste, Hobi, no pasa nada...

- Te quiero mucho, Taehyung.

Y de improviso volvió a abrazarme, atrapando mi mano entre medias. Fue un abrazo muy raro, simplemente me acercó a él con fuerza. Yo no podía moverme, pero tampoco lo vi necesario. Me ajunté más a él, todo lo posible, y sonreí débilmente.

- Yo también.

- Siento haber sido tan malo. Siento haber sido una persona tan asquerosa cuando me conociste. Siento haberte tratado tan mal, haber tratado tan mal a tanta gente. Re-realmente lo siento... y-yo... no sé, quisiera cambiar las cosas... qu-quizás todo podría haber sido distinto para él... para ti...

- No pienses en eso. Ahora estás conmigo.

- No siempre he estado así contigo.

- Pero ahora lo estás –me soltó y aproveché para incorporarme y dejar un leve beso en sus labios. También sabían salados. – Y por eso yo estoy muy feliz.

- ¿De veras lo crees? –asentí sin lugar a dudas. Era algo de lo que podía estar completamente seguro. Si la felicidad existía, la mía estaba en esos momentos a su lado. Me sentía feliz, simplemente eso. – Creo que he cambiado mucho en este tiempo...

- Ahora eres más llorón.

- Tú lloras más incluso.

- ¡Cállate! –fruncí el ceño y él rió entre las lágrimas, sacándome inmediatamente una sonrisa al verle de esa forma. Volví a limpiar su rostro con cariño, disfrutando enormemente de ese simple acto, de tenerle tan cerca. – Desde que empezaste a ser el Hobi que me gusta, no has vuelto a cambiar.

- ¿El Hobi que te gusta?

- Sí. Cuando te conocí eras dos Hobis. Uno me gustaba y otro me daba miedo. –ahora fue él quien puso una mueca, la cual me hizo gracia. Siempre solía ponerla cuando hablábamos de esa época, de cuando nos conocimos. – Poco a poco el Hobi que me daba miedo iba desapareciendo.

- ¿Iba?

- Claro. Ya no está, hace mucho que se fue.

- Supongo que debería agradecerte por ello.

- ¿A mí? –asintió – ¿A mí por qué?

- Tú me hiciste cambiar. Si estoy feliz ahora, es gracias a ti.

- ¿En serio? –volvió a asentir y yo me acomodé sobre él, colocándome sentado sobre su abdomen con una pierna a cada lado y dando pequeños saltitos de emoción. – ¡Eso es genial, porque yo también estoy ahora feliz gracias a ti!

- Creo que no me he explicado bi-

Le callé con un beso. Y luego con otro. Y otro y muchos más que fui repartiendo por su rostro mientras cubría su boca con una de mis manos para que no siguiera hablando. No quería escucharle decir que yo era el bueno y él el malo. No me gustaba oír eso porque a pesar de que yo no estaba de acuerdo, era algo sobre lo que él no dejaba opinar. En ocasiones podía ser muy cabezota.

- Mañana iremos a saludarle.

- Tendremos que comprar flores de camino –propuso un poco más calmado. Sonreí y asentí. – Podríamos comprar unas verdes.

- ¿Verde esperanza?

- Verde descanso. Y juventud.

- ¿Significa también esas cosas? –asintió sonriente. Con el paso del tiempo me di cuenta que le gustaba mucho cuando yo le preguntaba cosas sencillas. Era bonito ver la forma en la que me respondía. – ¿Y qué más significa?

- ¿Qué crees tú?

- Mmmm... ¿Verde labios de Hobi?

- ¿Eh?

- Ya sabes. El verde es mi color favorito y tus labios tambi-

Esta vez fue él quien me calló con un beso, destrozando mi frase antes de que terminara y estampándola contra sus labios. Pero no me importó. Pocas cosas me importaban sacrificar por besarle.

- Taehyung

- ¿Mmmh?

- Gracias por haberte preocupado por saber mi nombre aquel día.

Sonreí y me acerqué a darle otro beso, deteniéndome en el camino para agregar otro detalle que me estaba pasando por la mente.

- Verde Hoseok.

- ¿Eh?

- Eso. Verde Hoseok. También eres lo más preferido de las cosas preferidas que tengo en el mundo.

Y de nuevo todo lo que sonaba quedó en un segundo, incluso tercer plano. Solo podía escuchar su sonrisa aunque no esbozara ningún sonido. Y era el más bonito que podía existir.

p

Mírate [Vhope]Where stories live. Discover now