Welcome To Hell- Jainico-Ednaiko-Beshoh

Capítulo 13

Todos se juntaron abajo, extrañados porque la mayoría del grupo se encontrara. Un guardia los dirigió al sector D, la mayoría estaba sorprendido porque ni siquiera sabían que existía un sector D, el único que sabía era Bestia y no sabía casi nada de aquel sector. Los cuatro jóvenes llegaron al sector D, era un lugar amplio y bastante silencioso, se veía completamente desolado. El guardia les indicó a cada uno cual sería su habitación y les entregó un uniforme azul marino. La habitación número 3 fue para Nicolás, la número 4 para Edgar, la 5 para Bestia y la 6 para el Jaime. Los primeros tres se juntaron en la habitación del moreno para conversar. Por otro lado Jaime no sabía que hacer, era la primera vez que personas pudieran importarle tanto en tan poco tiempo, no sabía como disculparse, maldición, el enojón nunca se había disculpado con alguien y no estaba preparado para hacerlo ahora.

Para sorpresa de Jaime tocaron la puerta, tenía miedo ¿Si era Nicolás que le diría? Aún no se sentía preparado, rogaba que fuese Edgar o hasta que Bestia hubiese venido a pegarle un puñetazo. Se dirigió lentamente para abrir la puerta y grande fue su sorpresa al tener a una persona completamente desconocida frente a él.

Por otro lado se encontraba Naiko, el estaba feliz por sus amigos ya que estos estarían más seguros ahora; fue al baño a tomar algo de agua -evitando mirarse al espejo-  y volvió a su habitación para acostarse, no había ido al desayuno y si tenía algo de suerte desde ahora en adelante nadie lo obligaría a comer.

Aunque en la habitación de Nicolás hubiesen tres personas cada uno estaba en su propio mundo. Edgar pensaba en Naiko ¿Podrían verlo desde ahora? Porque el área D a diferencia de las otras áreas estaba bastante alejada y no era tan fácil acceder a ella pasando inadvertido. Y sin contar que Edgar se preocupaba ya que nadie le avisó a el menor que ellos serían transferidos, con lo desagradable que era el personal quizás no le dirían; para suerte de Edgar el pequeño si sabía donde estaban y no se preocuparía por ellos.

Bestia se preguntaba si las piezas uno y dos serían ocupadas por los pacientes que Keke le había mencionado, ¿por qué los tendrían tan alejados del resto? Era una buena incógnita y aún mayor era la incógnita de porque ellos estaban aquí, intentó despejar su mente pero al ver a sus otros dos acompañantes sumergidos en sus pensamientos decidió seguir pensando y sacando conclusiones, debía estar preparado ante todo -y quien sabe si algún paciente de este sector era un psicópata o algo así-

Nicolás pensaba en Jaime, no sentía rencor pero si desilusión; es que ni el ni nadie esperaba tal actitud de Jaime; no dudó en golpearle y podría hasta haber golpeado a Naiko solo porque el menor trató de ayudarlo a él. Por lo poco que había conocido de Jaime sabía que era de carácter fuerte pero no conocía ese lado conflictivo y agresivo del barbón... pero tarde o temprano tendrá que conocerlo a fondo, sea para bien o para mal.

La puerta de la habitación trajo a los tres de vuelta a la realidad, Bestia se acercó y al abrir la puerta quedó petrificado ¿Era él? ¿En serio era él? Después de tanto tiempo no podía creer quien estaba al frente de sus ojos, no sabía si no podía o no quería creerlo pero estaba adelante suyo parado. Aquella persona de la cual no había sabido nada en años y años... aquella persona que dejó una huella importante en su vida