Fourfold trouble - Los Cuatrillizos Tomlinson.

Daisy's

CAPITULO.

Dallas.

Perrie rió de algo que Louis y Niall decían, giré a mirarla con una sonrisa, ella me caía bastante bien. Me sonrió de vuelta. 

Harry estaba picando mi cabeza como si estuviera muerta y Romeo veía algo en su teléfono, estabamos sentados en una banca afuera, no nos habían dejado entrar a la última clase por llegar tarde.

- ¿Vamos a comer algo?- preguntó Harry- Yo invito.

- ¿Qué quieren comer?- Romeo puso su atención en la platica.

- ¡Vamos a Daisy's!- dijo sonriente Louis y todos asintieron contentos. Yo me limite a fruncir el ceño.

- ¿Daisy's?

- Si es un restaurante de hamburguesas y cosas así cerca de casa.

- Entonces vamos...

- ¿Vienes conmigo Dalls?- dijo Romeo sonriente, asentí encantada, aun no me acostumbraba a lo guapo que era. - ¿Vienes Perrie?

- Claro.

- ¡Ven eso chicos!- exclamó Louis.- ¿Por qué no nos preguntas a nosotros que si queremos ir contigo?

- Por que no son mujeres- les guiño el ojo y todos reímos.

- Bueno, entonces yo tendré que irme solo.- Niall hizo un puchero y saco las llaves del auto de la pequeña mochila negra.

- ¿A donde van?- Kendall iba saliendo con Liam.

- ¿Qué hacen aquí?

- Nos sacaron por platicar- bufó Liam.

- Íbamos a comer ¿vienen?

- ¿A dónde?

- Daisy's.- Dijo Louis e inmediatamente ellos sonrieron.

- Vamos.

- Ya no te irás solo Niall, Liam te acompañara, Kendall, amor ¿vienes con nosotros?- Romeo puso sus brazos en los hombros míos y los de Perrie haciendo a todos reír. Me moví un poco.

- Vamos Ken, te dejo mi lugar en sus brazos.

El lugar era juvenil y grandisisímo, tenía una gran pista de patinaje en el frente y el restaurante estaba un poco arriba de eso en una clase de terraza. Se veía bastante costoso por alguna extraña razón. 

- Buenas tardes chicos ¿Cuántos son?- preguntó un hombre de unos 30 años alto con una barba de candado y encantadores ojos de un color parecido al aqua.

- Somos...- Louis se puso en las puntillas para mirarnos.- 1...2...3...4...5...6...7 y yo somos 8.

- Pasen por aquí.- el pequeño cuerpo de Kendall se hizo paso entre dos chicos y justo por ahí todos seguimos al hombre hasta una mesa que nos dejaba ver la bonita pista de patinaje debajo de nosotros.

- ¡Yo quiero en la orilla!- grité empujando a Harry y me senté en la última silla para poder observar a la gente patinando.

- Yo quiero la otra esquina- dijo uno de los chicos y así todos nos fuimos sentando. El hombre nos dejo 8 enormes menús y se marcho diciendo que venía en seguida para tomar nuestras ordenes. 

- ¿Qué pedirás Dallas?- preguntó Harry un lado de mi. Me encogí de hombros.

- Te recomiendo estos hot-dogs con chilli beans y queso o Dios mio- dijo pasando su lengua por sus labios.