Errores [Harry Styles]

Capitulo 6

Narra Avril:

No he pegado el ojo en toda la noche, me encuentro en mi cama con las piernas dobladas, mirando por la ventana. El sol está a punto de salir. Es imposible no pensar en las peores cosas que puedan ocurrirle a Harry, ya que no ha llegado.

Me quedo de esa forma por un largo rato, pierdo la noción del tiempo, al sol lo han cubierto las nubes cargadas de agua. Harry no llega. Me paso una mano por el rostro y me limpio las lágrimas de la cara. Seguro está bien y yo estoy dramatizando mucho. Esos pensamientos no me calman.

Por fin me levanto de la cama y camino fuera de la habitación. Cruzo el pasillo para ir a la habitación de Harry, tal vez no escuché cuando llegó, pero su cama está vacía. Siento como se me forma un nudo en el estomago. No sé qué hacer, no quiero quedarme ahí de brazos cruzados, necesito hacer algo. Tengo que ir a buscarlo.

Me visto rápidamente, los primeros jeans y la primera camisa que encuentro en el armario. No me preocupo por mi pelo ni mi maquillaje, tomo un abrigo y salgo por la puerta principal del departamento.

No sé a dónde ir a buscarlo, no es que vaya todos los días al mismo club. Además si fuera siempre al mismo lugar ni me enteraría porque entre menos me involucre en esas fiestas salvajes mejor para mí. Ahora me doy cuenta que debí de preguntarle alguna vez algo, solo para saber qué hacer en estas situaciones. Me estoy comportando como una mamá asustada pero ahora comprendo a las madres. Camino pero sin rumbo fijo. Tal vez se quedó tirado a mitad de la banqueta, o en un callejón no muy lejos de ahí… Entonces recuerdo algo:

“No voy lejos, no quiero perderme” me dice con una sonrisa burlona.

“¿Y si sí te pierdes?” lo miro y me cruzo de brazos.

“Ya te lo dije no voy lejos, seguro estoy por ahí pero… cerca”

Doy un respingo, seguro que está cerca y debo encontrarlo. La lluvia comienza a hacerse más fuerte hasta lograr empapar mi cabello y yo corro. No sé qué haré pero voy a encontrarlo.

Narra Harry:

Está volviendo a llover, bueno en esta ciudad nunca para de llover. Sigo acostado y siento que debajo de mí está algo acolchado, pero huele asquerosamente. Aun así no me levanto y me quedo en la misma posición. No me preocupa la lluvia, de todas formas estoy empapado y sucio. Agradezco que Avril no esté aquí, no me gustaría que me viera en esas condiciones.

Tomo una bocanada de aire pero huele asqueroso y comienzo a toser enseguida. ¿Dónde chingados estoy? Trato de levantarme pero no puedo. La cabeza me está matando. Entonces escucho su voz, es Avril. Dios, no.

-¿Harry? ¡Harry! – grita a lo lejos.

Entorno los ojos, se suponía que no debía encontrarme. Bien Harry, prepárate para el regaño.

-¿Qué haces aquí? – pregunta sin aire, como si hubiera corrido. Su tono de voz es de preocupación. Diablos, otra preocupación más que le doy.

-Eee… - es lo único que sale de mi boca cuando la abro.

No sé cómo pero ella empieza a moverme, me pega en la cara y me sacude la cabeza. Quiero decirle que no lo haga pero las palabras no me salen, estoy bastante aturdido. Sus manos están heladas y mojadas. Había olvidado que llovía. Por fin logra sentarme, no sé como lo ha hecho.

-¿Estás bien? – me pregunta acunando mi rostro en sus manos.

Asiento débilmente y ella suelta un suspiro de alivio.

-Vete a casa, Avril. No quiero que me veas así - le digo, no quiero que este ahí, sufriendo conmigo – Estoy bien.

-No te voy a dejar aquí en medio de la basura – dice sacudiéndome los hombros.