No Me Dejes © - Carl Grimes [TERMINADA].

Capítulo 52: "Jesús".

Ya no había tanta comida en la comunidad y entonces Rick decidió ir a buscar provisiones junto a Daryl y obviamente les pregunté si podía ir y obviamente me dijeron que no, pero logré convencerlos y ahora mismo nos encontramos en el auto llendonos a no se donde.

– ¿Falta mucho?. – Pregunté como sexta vez, se que les molesta y por eso estoy haciendo eso.

– Daryl, calla a tu hija. – Rick rió.

– Calla a tu nuera. — Le contestó.

– Mmmn... Tengo una pregunta, ______.

– Habla. — Conteste tranquila y cerré los ojos.

– Es entre Carl y tú. – Abrí los ojos.

– ¿Ah?. – Coloque mi cabeza entre el asiento de Daryl y Rick.

— ¡Callate, Rick!. — Gruñó Dixon, solté un carcajada y me acosté en el asiento donde estaba. — No quiero saber si mi hija sigue siendo casta. – Fulmine a mi padre con la mirada y Rick carcajeo.

– Ai, Dios.

(...)

Después de unos minutos, paramos en una gasolinera, saque mi arma y el seguro por seguridad, quien sabe si hay alguien allí, Daryl y Rick se habían ido en un lugar, ellos pensaban que yo estaba tras de ellos, pero me escapé.

Quería entrar adentro pero estaba infestado de camiantes así que ahora mismo estoy rodeado la gasolinera, Rick ya se encargó de vaciar la gasolina que quedaba en los tanques de afuera. Por la parte trasera ví un camión enorme blanco, rodeé el camión y abrí la parte trasera. Oh. Por. Dios. Esto es el paraíso.

– ¡Si!. – Chille y rápidamente volví a cerrar la puerta. Había un montón de comida, pero era un montón.

Sentí pisadas y rápidamente me gire apuntando, y ví a un hombre con un gorro en la cabeza tenía el cabello largo y usaba una bandana negra cubriéndole la nariz y boca.

– No dispares. – Levantó sus manos en señal de “Paz”. – Por favor no dispares.

– Cállate. – ¿Qué hago?. – ¿Estas solo?.

– Si. – Respondió. – ¿Puedes dejar de apuntarme? No te haré daño.

– ¿Quién lo asegura?.

– ¡______!. – Sentí el grito de mi padre pero no volteé.

– ¡Aquí!. – Le respondí. Segundos después Rick y Daryl aparecieron y Daryl agarró los brazos del hombre y Rick empezó a revisarlo. – Encontré mucha, mucha comida. – Golpeé el camión.

– ¿Quién eres?. – Vaya que cambia el tono de voz de Rick cuando habla con extraños. Le saqué la bandana que cubría la mitad de su cara.

– Soy Paul Rovia, pero mis amigos me dicen Jesús.

– ¿Por qué será?. – Bromeé. Daryl y Rick me miraron serios y “Jesús” me sonrió. – ¿Tienes grupo?.

– Sí. Y ese camión es mío.

– No tiene tú nombre. – Me acerqué un poco a él.

– Ni el tuyo. – Sonrió más. Agarré mi cuchillo y en el camión escribí “Dixon”.

– Ahora sí. – Sonreí divertida y a Jesús se le borró la sonrisa.

– De acuerdo, no te llevaremos con nosotros, pero tampoco dejaremos que nos sigas.

– ¿Qué piensas hacer?. – Jesús entre cerro sus ojos y miró a Rick. Esté saco una cuerda de atrás suyo y ató a Jesús en las manos tras su espalda y sus pies.

Le tiré mi cuchillo. – Suerte. – Le giñe un ojo y subi a la camioneta junto a mi padre y suegro.

Tiempo después de salir a la carretera nos encontrábamos en un lugar donde sólo había pasto y segundos después escuchamos un sonido de pisadas en el techo de la camioneta.

– El hijo de perra nos siguió. – Hablé. – Rick. Frena. – Esté me hizo caso y luego Jesús calló de la camioneta y soltó un gemido de dolor. Me baje del camión y metire arriba de Jesús, lo golpeé en la mejilla. – ¡¿Por qué nos sigues?!. – Otro golpe, sentí a Dixon agarrarme de la cintura y levantarme del idiota este.

– ¡Basta, _______!.

Rick agarró a Jesús de su camisetas y este en un acto rápido se soltó y empezó a correr, Daryl me soltó y corrió tras de Jesús, yo junto a Rick nos quedamos viendo como ellos jugaban a mancha y mancha.

– ¿Son idiotas?. – Le pregunté a Rick.

– Si. – Me Respondió y reí.

Me moví junto a Rick para atrapar a Jesús pero fue un error, Jesús se subió a la camioneta y empezó a andar, pero rápidamente mi padre lo alcanzó. Abrió la puerta del piloto y le propinó un puñetazo a Jesús, los dos cayeron y empezaron a pelearse, Rick fue a ayudarlos, en un descuido... La camioneta cayó a una laguna que había allí.

– ¡NO!. – Grité y me llevé las manos a la cabeza. – ¡Hijo de perra! ¡Pagaras por esto!. – Alcance a darle un puñetazo a Jesús pero después Rick me atajo de los hombros.

– Irás con nosotros. – Afirmó mi padre.

– Te mataré. – Lo mire con tanto odio pero el se mantenía sin ninguna expresión en el rostro.

(...)

Llegamos a la comunidad en un auto que encontramos en el camino y todos los alexandrianos veían como Rick y mi padre llevaban a rastras a Jesús. Mi cara ahora mismo irradiaba ira.

– Wow, wow, wow. ¿Qué te pasó?.

– Ahora no, Carl. – Pero no me hizo caso tomo mi mano derecha con la que había golpeado a Jesús y vio que tenía sangre.

– ¿Qué te ocurrió?. – Me Preguntó preocupado.

– Golpeé al hijo de perra. – Suspiró y rodeó mis hombros con su brazo.

– Vamos con ellos.

Cuando llegamos a la sala de la casa, estaban todo el grupo reunido alrededor de Jesús. Lo Fulmine con la mirada.

– Habla. – Le ordenó Rick.

– Primero dile a la chica que deje de mirarme así. – Respondió viéndome, todos voltearon a verme.

– De todas formas te mataré. – Hable.

– ______. – Gruñó Dixon. Suspire y me senté al lado de Zack.

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¿Por que siempre me olvido de Zack? 😂😂😂 Pobrecito.

Okay voten.

xXDamn_GirlXx