PEDIDOS: ROCK + METAL

#19 Steven Adler

Pedido de  pandigunner:  "Con steven adler y yo meli n.n"; "Pues que estámos viendo una película o algo así y que el se ponga todo romántico, no se pone tu toque ;) "; "Un poco de smut 7u7"

   🐾🐾🐾

—¡Los pochoclos!

Steven volteo la cabeza y sonrió al ver a Meli llegar a él con un pote de lo dicho.

—Ya era hora, la película esta por comenzar —estiro una mano agarrando de lo que trajo para comer mientras ella se sentaba a su lado con cierta separación al ser un sillón grande.

—¡Shh! —lo cayo viendo la televisión en la oscura sala de estar.

Se mantuvieron callados viendo la película con la participación de alguno de sus pugs, pero cuando estos dejaron de descansar y comenzaron a insistir para jugar, Steven se puso de pie y se los llevo de forma rápida para no perder parte de la película y después ver tranquilo.

—Adoro tus perros —comento la chica, cuando él se tiro a su lado, poniendo una de sus piernas sobre las de él para mas comodidad.

—Yo también —respondió con una leve sonrisa viendo la tele.

Así se quedaron por una media hora mas, Meli ignorando las miradas ocasionales que el rubio le daba y como pasaba nerviosamente su mano por su boca como si quisiera cambiar su atención a otra cosa, lo cual debería ser la película, pero le costaba. Levanto nuevamente un brazo y puso parte de su cabello detrás de la oreja, movimiento que hizo que la chica lo mirara para ver que sucedía, pero el rubio solo le sonrió y ella le devolvió el gesto volviendo la cabeza acomodando un poco mejor su pierna sobre él creyendo que eso le molestaba, pero al pensar que era eso mejor la quito sintiendo que había chocado algo que tenía en el bolsillo de su pantalón, pero no le dio importancia hasta que se dio cuenta lo que sucedía al bajar la mirada para tomar un poco de pochoclo.

Steven tenía una erección.

Un sonrojo involuntario cubrió sus mejillas y giro la cabeza rápido a la televisión impactada, con los nervios a flor de piel. ¿¡Por que eso le estaba pasando!? La película no era romántica y no tenía ninguna escena para que se pusiera duro, ¿acaso se acordó de alguna chica con la que estuvo?, ¿o acaso pensaba que quería estar con una?

¿Con ella tal vez?

Obligándose a sacar esos pensamientos de su mente, se levanto diciendo que iba al baño, lo cual hizo y uso para aclarar sus pensamientos. Si iba a seguir así era obvio que Steven la iba a pasar mal, y dudaba que en ese corto momento en donde ella estaba en el baño él pudiera encargarse, así que no solo iba a ser duro para él, sino incomodo para ella. Repentinamente la idea de... su persona haciéndose cargo del problema de Steven le parecio una locura, pero al mismo tiempo estaba bien con ello, así que con esa idea salio del baño y entro en la sala con un nudo en el estomago ubicándose al lado de él, pero mas cerca que antes. Una vez ahí ya no se pudo concentrar en las imagines de la pantalla, estaba tomando el valor de hacerlo, y cuando lo hizo volteo a verlo pronunciando su nombre, pero no llego a terminar cuando él le gano.

—Meli... —empezó a decir algo nervioso mirando sus ojos dejando de pegarse en el respaldo para verla mas de cerca pero sin invadir demasiado su espacio—. Yo... um...

—Lo sé, lo sé —asintio bajando apenas la vista algo avergonzada antes de volverlo a ver.

—Perdón si es incomodo, yo no quería que pasara frente a ti —se disculpo con las mejillas levemente sonrojadas antes de colocar una mano en una de las de Meli—. Pero algo en ti me atrae y...

—No te preocupes, Steven —apoyo su palma sobre la de él con una leve sonrisa—. Todo esta bien.

—Entonces... Meli, por favor, necesito que lo hagas —pidió casi como un cachorro herido inclinándose a besar su mejilla de forma suave, casi tentativa, mientras sacaba despacio el almohadón que lo cubría.

Un estremecimiento la recorrió al ver el brillo de sus ojos aumentado, pero sin esperarlo tenía su permiso al que había sido su loca idea, así que algo mas confiada estiro sus manos viendo el prominente bulto y aflojo el elástico por los cordones antes de darse cuenta que no había vuelta atrás ya que su cuerpo se movía por inercia. Steven también tenía la vista baja y ayudo un poco levantándose del sillón para que pudiera bajar bien la tela e introducir su mano tomando la carne caliente y necesitada del chico, el cual se sacudió apenas ante el roce de algo que finalmente le daría atención.

Meli se mordió apenas su labio inferior empezando sus movimientos con algo de timidez hasta que él dejo de ver y se recostó tirando la cabeza hacia atrás cerrando sus ojos. Sintiendo que había menos presión en su persona, puso una mano en su boca y lamió un poco antes de tomar su miembro mejorando el resbalar, lo cual se noto en un bajo gemido del rubio que puso una mano en su frente sacando sus cabellos. Una leve sonrisa invadió su rostro enfocándose unos largos segundos en la cabeza ligeramente sonrosada antes de continuar en toda su extensión.

No iba a negar que era raro, pero tampoco desagradable, un sentimiento de satisfacción estaba presente en su persona al hacerlo sentirse bien, liberándolo de a poco con la música de sus suspiros mientras una mano se cerraba y relajaba sobre su muslo.

—¿Todo bien? —se atrevió preguntar y él levanto la cabeza mirándola con los ojos entrecerrados asintiendo.

—Excelente, sigue así —animo volviendo a su antigua posición, saltando apenas y moviendo sus caderas cuando ella aumento el ritmo—. Mierda, ¡si! —gimió metiendo apenas el estomago.

De a poco Meli pudo observar sus piernas ponerse mas rígidas, su mano rozar ligeramente su muslo mientras algunos espasmos surcaban su vientre bajo al inspirar profundo.

—E-estoy cerca —aviso, algo que no espero que hiciera, así que presto mas atención a sus reacciones hasta ver una pequeña gota blanca salir.

Esa fue su señal mas clara, así que cerro una mano en su cabeza haciendo todo el otro trabajo con su mano libre hasta que el agarre repentino que Steven le había dado a su brazo aflojo cuando los chorros dejaron de salir contra su palma, la cual evito que se mancharan los muebles, ropas y demás.

—Eres grandiosa, Meli —jadeo mirándola aún nublado de placer, a lo que ella sonrió guiñándole un ojo.

—Lo sé.