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Ashton Irwin, el hombre que había sido mi amigo con derechos por casi un año. Nadie podría haber imaginado que ambos teníamos una cosa que nos diferenciaba de otros. Él era un chico completamente malo y había crecido en una familia rica. Los tatuajes tiñeron sus brazos y piernas, su cabello era largo y lanudo.
Yo casualmente le había mencionado un par de veces a mis padres que estaba saliendo con alguien. Todo estaba bien hasta que decidieron que querían cenar con él.
–Absolutamente no. No empecé a salir contigo para luego llevarme a casa de mamá y papá– dijo Ashton mientras tiraba de su camisa por la cabeza.
Yo le había mencionado que mis padres querían reunirse con el y ya había hecho las reservas para este fin de semana.
–Diles que estoy fuera de la ciudad– se quejó
–Por favor Ashton. Voy a usar ese vestido que te gusta–sonreí, comenzando a envolver mis brazos alrededor de él.
–Está bien, siempre y cuando lleguemos a pasar tiempo juntos después de eso– suspiró, recogiendo sus cosas para irse.
Me puse un poco nerviosa, ¿y si todo va terriblemente mal? Si mis padres saben lo que Ashton es realmente para mi, nos van a repudiar. Con el fin de conseguir un buen representante comenzando con Ashton, he realizado un par de mentiras. Nada grande, solo que él estaba estudiando para ser médico y que había pasado unos meses ayudando a los niños en Africa.
La noche había llegado y me puse el vestido que prometí que usaría, junto a los tacones que Ashton había visto cuando no estaba usando ropa. Mi estómago se revolvió cuando estaba esperando a Ashton para que llegase.
¿Sería incluso llegar cuando estemos todos?
Mis padres y yo nos habíamos sentado y esperamos con ansiedad. Muy pronto un chico alto llega. En un primer momento cuando lo vi dos veces, apenas lo reconocí.
Su cabello, que normalmente veía empapado de sudor, estaba fuertemente agarrado en un moño en la parte posterior de su cabeza. Estaba vestido con un traje negro, con ninguno de sus tatuajes visibles. Se acercó a la mesa.
–Encantado señora (tu apellido), señor (tu apellido). Soy Ashton– sonrió, sentándose a mi lado
–Es un placer conocerte también. Hemos escuchado mucho de ti– mi madre sonrió.
–Vienes de la escuela entonces, ¿como te va?– mi padre le preguntó a Ashton
–Oh... uh–me miró– es muy bueno. He estado estudiando mucho– sonrió. Le devolví la sonrisa.
–hay que mantener la concentración en los estudios ¿verdad?
–Por supuesto, no podemos dejar que mis calificaciones disminuyan ahora– dijo, mi padre parecía contento.
El resto de la tarde transcurrió sin problemas, Ashton se encargó de decir todo lo que pudo para impresionar a mis padres. Después de la cena teníamos que irnos, por lo que Ashton decidió avisarle a mis padres.
–¿Está bien si ____ viene a casa conmigo solo para ver algunas películas?, la traeré de vuelta antes de la medianoche– mis padres estuvieron de acuerdo con alegría, pero ambos sabíamos que la noche no sería tan inocente. Tan pronto como nos retiramos a la zona de aparcamiento la mano Ashton ya estaba en mi muslo.
–Dios, no puedo esperar hasta estar encima de ese vestido
–No te preocupes, vas a ser recompensado por ser un niño muy bueno– sonreí
