Just the Way You Are - [Dramione] PAUSADA

Cap 12. Engañado

Dos días pasaron y Hermione y Draco no habían vuelto a hablar. Después de lo sucedido, ninguno de los dos sabría que decirle al otro si se encontraban cara a cara. Es por eso, que se "daban un tiempo". También existía otro problema.

Su "amistad" no sería bien vista en público, y más por parte de los Gryffindors. Seguro que los amigos de Draco, como son Blaise, Theo, Pansy...entrarían en razón. Bueno, creo que Pansy le costaría un poco, pensó Draco. Pero a él no le importaba. No le importaría lo más mínimo, si tuviese a Hermione cerca.

La mañana del domingo estaba transcurriendo con total normalidad. Después de desayunar; Harry, Ron y Hermione visitaron a Hagrid en su cabaña. Debido a los montones de deberes y redacciones que los profesores les exigían casi no habían sacado tiempo ni para saludarlo.

La visita había ido genial. El trío de oro le contaron al guardabosques todas las cosas que habían hecho después de la guerra y sobre cómo les va a los tres este último curso de Hogwarts.

En un momento de la historia, Ron sacó el tema del castigo de Hermione y le preguntó cómo había ido, pero Hermione solo respondió con evasivas, no creía que fuera un buen momento para hablarles de Draco.

Ahora Hermione se encontraba en su dormitorio leyendo tranquilamente un libro. No era ninguno de la escuela, era un libro que trajo consigo de su casa. Amaba demasiado la literatura muggle.

Estaba tranquilamente leyendo, cuando una lechuza entró por la ventana. Traía una nota para Hermione.

Sin esperar ni un segundo más, la leyó:

Hey Granger, ¿te acuerdas cuando te dije que necesitaba hablar contigo sobre ya sabes quién? Te espero en el aula de Encantamientos a la1 en punto. Nos vemos.

Blaise Zabini ;)

Tan solo quedaban 10 minutos para la hora acordada, por lo que Hermione se dispuso a marchar. Bajó de los dormitorios y salió de la sala común. Caminó apresuradamente por los pasillos. No soportaba llegar tarde. Cuando pudo observar la puerta de Encantamientos al final del pasillo, unos brazos la sacaron del camino y colocaron a Hermione en la pared:

- Hola, Hermione – le saludó Draco sonriendo.

- Hola, Draco – éste sonrió al escuchar su nombre – ¿querías algo? – le preguntó impacientemente

- Sí. Me gustaría saber si querrías salir a los jardines a hablar. Necesito preguntarte algo y allí no nos molestarán.

Hermione lamentó su encuentro con Zabini por lo que se apresuró a decir al chico:

- Lo siento, Draco. Ahora mismo no puedo. ¿Quedamos otro día? – le preguntó Hermione zafándose del agarre de Draco y hablando nerviosamente.

- Claro...ya te diré – le miró el Slytherin a Hermione. Algo estaba ocultando Hermione y averiguaría el qué y el porqué.

Una última mirada a Draco, y volvió a dirigirse hacia el aula. Draco, hizo que se giraba para marcharse, pero cuando Hermione no se dio cuenta, se escondió detrás de una estatua. Observó como Hermione entraba al aula de Encantamientos. Qué extraño, Encantamientos la comparte con Slytherin y hoy no la tenemos, pensó Draco.

Decidió que lo mejor sería esperar a que Hermione saliese.

Cuando Hermione entró, Zabini ya estaba en el aula, estaba sentado en la mesa del profesor Flitwick con los pies encima del escritorio:

- Zabini, alguien te puede ver así – le regañó Hermione.

- 1. Blaise, Granger; 2. No me importa – le sonrió el moreno.