Mi Decisión (1° PA)

7. Mi punto debil.

Hace un mes que no volví a cruzarme con Christopher no se si sentirme bien o mal porque por una extraña razón tengo ganas de verlo aunque se escuchar como pronuncia mi nombre también hace un mes que evitó a Fede nisiquiera se como mirarlo después de lo sucedido, si ya lo se muy maduro de mi parte, pero había encontrado la forma de esquivarlo aunque tarde o temprano tendríamos que hablar ya que papá algo raro notaba.

- Meg - dice Evan mirándome preocupado. - ¿Está todo bien? -

- Si, estoy un poco cansada - miento no quiero contarle todos mis problemas. - Quiero vacaciones para poder tener un poco más de tiempo -

- Todos queremos lo mismo ¿Por qué no salimos hoy? -

- Para que después me dejen sola y termine en una comisaría, olvidalo Evan - respondí con sarcasmo.

- Lo siento ya no se como disculparme sabes que lo de esa noche con Emma fue un error - eso es lo que me vienen repitiendo para que les creer culpando al alcohol por sus actos yo no creo nada y lo peor de todo es que hay demasiada tensión cuando ambos están juntos.

- Si lo repitieron mil veces - ruedo los ojos. - Sólo sería bueno que ambos sean sinceros con sus sentimientos-

- No se a que te refieres Meg - claro Evan hacete el tonto que te conviene,sabe muy bien a lo que hago referencia.

- No te hagas el tonto y levame a casa -

- Claro amiga!! - el pone su espalda para que me cuelgue y así salimos de la Universidad riéndonos pero los cuchicheos de algunas chicas hacen sobre un hombre nos tenía intrigado, ahí vimos a Emma en la entrada con otras chicas mirando para afuera.

- Emma - la llamo para que me mire no se que esta observando porque al ver tanta gente me tapa - Emma??

- ¿Qué Meg? - no me mira.
- Por Dios nunca vi un hombre tan guapo - suspira y noto como Evan se tensa.

- ¿ A quién mierda están mirando ? - digo molesta tanto por un simple hombre, nos abrimos paso con Evan para ver pero mi boca se abre al ver de quien era, sin dudas me quedé sin palabras al verlo apoyado en su coche, tan guapo, vestía uno de sus trajes negros que lo hacen ver demasiado atractivo, sus ojos estaban oculto bajo una gafas de sol, su pelo rubio peinado hacia atrás y una pose, quizás muy arrogante.

- Que lo parió! - dije al ver su sonrisa cuando me vió -

- ¿Todo bien Meg ? - consulta mi amigo preocupado al ver lo nerviosa que estoy, baje de su espalda sin perderme ningún movimiento de Christopher viniendo a mi encuentro.

- Buenas tardes Srta. Mouskouri - dice enfrente mío aunque tenía puesto anteojos podía sentir su mirada intimidante.

- Sr. Meitzner - digo tratando de no sonar nerviosa por su presencia, miro alrededor y todos miran la escena sorprendidos.

- ¿Qué le parece si tomamos un café? Necesito hablar con usted -

- Hablar conmigo - asiente.
- Bueno ahora estoy desocupada -

- Perfecto. - sonríe - Entonces vamos - tiende su mano para llevarme al auto, la acepto y otra vez siento toda esa corriente por todo mi cuerpo.

- Adiós Evan - saludo a mi amigo que mira con desconfianza a Christopher.

- Me alegra que haya aceptado - comenta abriendo la puerta del auto, antes de subir vuelvo a mirar y toda la Universidad nos observa, Emma tiene la boca tan abierta que tengo miedo a que le entre una mosca.
- Abroche su cinturón - ordena volviendo a la realidad.
El camino a la cafetería es interminable, el silencio más incómodo que he vivido.
- Bajemos - dice saliendo de su lujoso auto, él abre la puerta para que yo salga y lo sigo hasta el lugar, nos sentamos en un rincón cerca de la ventana.