Septimo Latido

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Salto

Mi nuevo amigo alado frunció el ceño, y miro a todas partes, llevo la mano a su pecho y vi como apretó la zona, arrugando la camisa que llevaba.

Estábamos dentro de la acogedora sala, y por primera vez en días me sentía realmente relajado, sin mencionar que Giles mantenía un ojo sobre Mia y su esposa, Cinthia, al principio asocié su comportamiento a la paranoia, pero luego entendí que eran seres muy celosos.

Eran todo lo puro que quisieran, pero posesivos al fin y al cabo. Su mujer esperaba un hijo y eso, según me comentó, lo tenia más alterado que de costumbre.

— ¿Dónde esta? —Él miro hacia el patio trasero, dónde habíamos dejado a Mia y a Cinthia, jugando con los infantes de la manada.

Alce una ceja en su dirección y mire hacia donde él lo hacia. Ni Cinthia o Mia estaban ahí.

— ¿Qué? —Balbuceé

Giles se levantó deprisa, sus pies lo llevaron en poco tiempo al jardín, yo iba a su lado mirando a los niños dispersos y murmurando. Nos acercamos a uno de ellos, Obelix, hijo de Marcus.

— ¿Dondé estan las mujeres? — Obelix tenia alrededor de 7 años, pero era el niño mas serio y respetuoso que hubiera visto. Tan distinta de su madre, Lyris, una mujer efervescente.

Digno, sin embargo, de un futuro Mano derecha, un Beta, como lo sería él. Un buen ejemplo para el hijo que pienso tener... Tan pronto como se recupere Mia.

— Cuando estaba aquí se aparto un poco, parecía ida, se fue por allá — Señalo el sendero que entraba al bosque, marcado unicamente por pisadas acostumbradas a pasar por ahí.

Asumimos con Giles qué Cinthia la habia seguido, no queriamos perder mas tiempo. Era cuestion de mirar y ya sabia si a Giles le pasaba algo. Su ceño estaba fruncido y apretada cada tanto su camisa. Era algo muy sospechoso.

Decidí ser yo quien pensaría en frio, relajado, con un ángel-hombre alterado, era mas que  suficiente.

— Tal vez solo dieron un paseo, no hay porqué alarmarnos.

Giles apenas y me miro.

— Un ángel protector siente cuando otro esta en peligro, no solo salvamos humanos — Me detuve por inercia cuando él lo hizo, sus alas aperecieron en su espalda, dejandome maravillado, nunca habia visto alas. — Tardaremos demasiado a pie, sigueme.

Un ángel protector siente cuando otro esta en peligro...

¿Estaba ella en peligro?

Si le pasara algo bajo mis cuidados... no sé lo que sucedería conmigo.

Giles emprendio vuelo, dejandome un poco anonadado. Los escalosfrios recorrieron mi cuerpo antes de tener una visión perfecta del bosque. Estaba listo.

Seguí a Giles por tierra, levantando mi hocico de vez en cuando y viendo a dondé se dirigía.

Llegamos al acantilado de mis tierras, el cual daba paso a corrientes fuertes por debajo, estaba prohibido el paso de los niños, quizas, y por eso no las siguieron.

Tristan solía decir que no habia un mayor sentido intuitivo que el de los niños. Cuanta razón tenia.

Allí estaban, ambas, Mia estaba mas cerca de la orilla que Cinthia, Giles descendio al lado de su esposa, sus puños estaban apretados al igual que los mios, apenas di unos pasos en su direccion y Mia cayó de rodillas al suelo. Tan cerca de caer al abismo.

— ¿Giles? —Temia acercarme más, agradecía mentalmente a Cinthia por interrumpir el ruidoso silencio.

Giles giro hacia mi, yo mantenia mi forma lobuna, pude notar como sus ojos claros parecian oscurecerse.

No me parecía algo bueno

— ¿Recuerdas que te hable sobre sus familiares?

Asentí, él seguía entrando en la mente de Mia, apesar del milagroso progreso en el que la escuche hablando, ella no habia vuelto a pronunciar palabra.

Giles me contó sobre sus familiares, su historia, la de su especie, incluso sus poderes.

Él se encargo de instruirme acerca de su raza como si fuera la mia.

— Me parece que intentan saber dondé está. Y eso, la esta dañando. —Él hablo, metido de repente, en mi cabeza.

Trate de recordar en que momento de la semana él me habia hablado sobre eso.

— En nuestro mundo no existen creaciones mundanas. Por lo que, la telepatia es lo que mayormente ultilizamos para la comunicarnos, es necesario una gran concentracion para llevarla a cabo. Cuando la familia de Mia decida qué es necesario, contactaran con ella, y en un estado tan debil como en el que se encuentra no será capaz de centrarse lo suficiente y se quebrara la poca estabilidad mental qué le queda, cuando eso pase, nada le impedirá liberar su alma.

-Pensé... pensé que yo -baje la cabeza, con mis pensamientos hechos un revoltijo.

Yo no le era suficiente

Estamos hablando de alas Eryx, a pesar de que lo intentes con todas tus fuerzas no podras eliminar el sufrimiento de almas salvadas durante años en apenas unos cuantos minutos.

— ¿No podemos hacer nada para evitarlo? —Pensé, esperando qué pudiera, al igual como solia hacerlo mi manada, escucharme.

— No —Habia funcionado efectivamente, a pesar de no tener ningun lazo de union.

Suspire con pesar y desvie mi mirada hacia ella de nuevo, su cuerpo temblaba sutilmente, frunci mi cejas con el terror invadiendome, en cualquier momento ella podria moverse y caer.

— Giles —Pensé de nuevo desesperado, si tan solo pudiera hacer algo, lo que sea.

Él nego, la angustia reflejada en su rostro.

—Si intervenimos sera peor —Sus palabras retumbaron en mi cabeza, aturdiendome.

La impotencia hacia mi sangre hervir, con odio hacia mi mismo.

Sin aviso previo Mia se levanto tambaleante, sus rodillas temblaban y cada pequeño paso hacia atras era un gran salto de esperanza para mi.

Sin embargo, mis pensamientos sobre que ella sabiamente trataba de alejarse de la orilla fueron erroneos. Tomo impulso y se lanzó a correr, terminando del otro lado con un gran salto.

Mis esperanzas caian junto con ella.

Mis patas traseras chocaban con las delanteras segun la rapidez con la que corria, al llegar borden salte cambiando a mi forma humana.

Coloque ambas manos extendidas por encima de mi cabeza, tratando de alcanzar su lánguido cuerpo, su piel se deslizo entre mis dedos y al fin pude atraparla.

Una sonrisa surco mi rostro, orgulloso, pero no tuve tiempo de reaccionar cuando ya estaba estrellandome contra el oleaje.

Legendary Lovers PAUSADAWhere stories live. Discover now