NOBODY ✿ [THE ORIGINALS.]

XIII

Emilie bajó las escaleras lentamente, usando un vestido negro de encaje, recibiendo las miradas masculinas presentes.

No le incomodaba el hecho de ser la atención masculina, pero sí de sus enemigos.

Una vez bajó, las miradas puestas en ella cambiaron de dirección por la voz de Aurora.

—Hola Emilie.—dijo con voz cansada e irritada.—Veo que no haz cambiado.—

La rubia trató de protestar pero una voz la interrumpió.

—¿Nos sentamos?—preguntó Elijah. Dicho esto todos los presentes como Freya, Nicklaus, Lucien, Tristan, Aurora, Emilie y Elijah se sentaron en el respectivo orden.

Se podría decir que la ojiazul no estaba del todo contenta de su compañero.

Trató de ignorar la mirada de Elijah durante toda la cena, cosa que era casi imposible ya que cada 5 minutos la miraba de reojo.

—Bien Nicklaus... Vé al punto, ¿A qué se debe esta cena?—preguntó Tristan.

Una sonrisa macabra y oscura se instaló en el rostro del rubio Mikaelson, alertando así a las invitadas femeninas.

Lucien y Tristan se dirigieron una mirada rápida. Mientras que Aurora seguía mandando miradas de reojo a Klaus, quien no apartaba una sonrisa sin humor.

Y fue ahí cuando todo explotó.

Klaus y Elijah noquearon a Tristan amenazando a Aurora.

Toda la atención a la discusión entre ambos fue dirigida al castaño que tenía que hablar de más.—Y ya se fue la paz.—murmuró con sorna Lucien.—¡Qué buen anfitrión Klaus!

—Tu cállate.—amenazó el rubio.

—Tranquilízate... No querrás que algo le pase a tu querida Camille.—habló burlón. Eso enfureció al rubio ya que tenía sentimientos encontrados por la psicóloga.

—¡Es la segunda vez que escucho ese nombre!—reclamó Aurora.

Nicklaus ignoró a la pelirroja mientras se acercaba a Lucien amenazantemente.—Si algo le pasa a Camille...—fue interrumpido.

—Si algo le pasa a Camille será tu culpa, solo debo regresar con vida y no le sucederá nada.—

Aurora estaba siendo ignorada, cosa que ella odiaba, refunfuñaba y maldecía por lo bajo miraba a todos lados desesperada, dándose su huida, pero se vengaría.

Los presentes miraron en dirección a donde se largo, seguido de Lucien y Klaus que iban en busca de Camille.

El silencio en la mansión se hizo incomodo, Hayley que había aparecido poco antes del problema y estaba ahí parada mirando directamente a Elijah.

Esas miradas fueron notadas por la ojiazul, que sentía cierta repugna hacia la loba Larbonair ya que para ella era una chica creída y con aires de superioridad.

Las miradas no acababan, y a Emilie se le hervía la sangre cada vez más, por el simple hecho que a Elijah se le impregnaba una sonrisa cada vez que la loba aleteaba sus pestañas.

Es una cualquiera. Pensó la rubia, sin apartar la mirada examinadora de ambos.

Un poco más lejos estaba Freya, viendo la escena de celos que se reconocía a quilómetros de parte de Emilie. Era muy poco disimulada, refunfuñaba por lo bajo y maldecía, tal y como lo había hecho Aurora antes de irse.

Pero ella hizo algo más destacable.

Emilie sujetó un extremo de la mesa y la tiró hacia el frente.

Haciendo que copas de vino y platos servidos cayeran al suelo dejando un desastre.

El trance en el que se encontraba la pareja se esfumó y miró en dirección a la rubia, Hayley frunció el ceño y empezó a reprocharle de lo loca que estaba, ella simplemente dio su más falsa sonrisa y sin más se retiró del lugar.

Elijah en todo momento se quedó callado, y el único gesto que hizo fue cuando salió la rubia, una pequeña sonrisa de lado.