NOBODY ✿ [THE ORIGINALS.]

VII

Emilie estaba cometiendo una tontería, pero ya era tarde para arrepentirse.

Abrió una de las rejas negras, adentrándose como si estuviera en su casa.

Nicklaus, Elijah, Freya y Hayley que se encontraban conversando sobre su nuevo problema los Strix. Todos se quedaron mudos ante la presencia de la blonda, y el asombro cruzó por la cara de los hermanos Mikaelson presentes.

—¿Quién es ella?—susurró entre molesta y confundida la híbrida, viendo que Elijah y Nicklaus no apartaban su mirada.

—Emilie, Emilie Lambert.—se presentó la blonda.

—¿Qué haces aquí?—preguntó cortarte el honorable.

—Yo también te extrañé.—comentó hipócritamente.—¿Qué te hiciste Elijah? Te vez más guapo.—dijo cínica, dicho esto el nombrado la agarró y sujetó fuertemente a la blonda por detrás junto con un pedazo de trozo de madera.

—Oh cariño... Eso no sirve.—era ágil pero el honorable más y sin perder el tiempo clavó la estaca. Dejándola en el suelo "muerta".

—¿Quién era ella, Elijah?—volvió a repetir Hayley mirando a el Mikaelson mayor.

—Una carga que debí eliminar hace tiempo.—dijo cortante, gesto que Hayley confundió aún más.

—¡Hay!¡Hermanito que duro!—habló gracioso Klaus al ver las caras de los presentes y continuó.—Que pasó con el amor,¿eh?—río, Hayley lo miró mal, después de todo seguía amando al honorable. Mientras este quería ahorcar a su hermano por hacerle acordar todo lo que había ocurrido con Emilie y lo que su madre hace meses le había hecho recordar.

—Cállate Nicklaus.—dejó las palabras al aire cuando sintió un nuevo corazón latente. Miró hacia dónde debería estar el cuerpo inerte de Emilie; pero no había nada.

—Te dije que no serviría.—dijo graciosa detrás de todos, quienes rápidamente voltearon a ver a la blonda con su blusa manchada de sangre.—¿Y bien?—continuó sin quitar la mueca cínica de su rostro. Quería una alianza pero no significaba que tarde o temprano los traicionaría, claro que lo haría.

—Ve al punto ¿Qué quieres?—dijo ahora la hermana Mikaelson.

—Hola Freya,—miró a la bruja.—Bueno sé que tienen una enemistad con Tristan y dije ¿Porqué no?—miró a los presentes.—Quiero unirme a su guerra. Ser parte de su equipo.—dijo sin chistar, Nicklaus quedó asombrado pues eso era lo menos que podía esperar de Emilie, la que alguna vez fue su amante y que su hermano había matado. Al parecer la blonda logró entender la mueca del rubio y prosiguió.—Y no es que quiero besos y abrazos solamente quiero venganza.—dicho esto se fue y a todos dejó con la palabra en la boca.

Emilie era así, directa y no tuvo que hacer ningún teatro como su ex-amiga Aurora, que ahora tenía mucho odio al solo recordarla. Pero luego de la escena de antes se sentía orgullosa de su increíble presentación.