NOBODY ✿ [THE ORIGINALS.]

XI

Y luego de un buen rato, el incómodo silencio seguía en pie, ambos continuaban sentados en la barra, mientras que en la mente de Elijah se arrepentía internamente de haberla invitado y la blonda de haber aceptado.

Y justo vino alguien a "salvar" la situación, el rubio Mikaelson.

—¿Interrumpo algo?—dijo burlón el ojiverde levantando las cejas mientras repartía miradas a ambos, hace rato estaba mirándolos y no evitó una que otra carcajada por el comportamiento tan tonto de parte de su hermano mayor.

—Dime Nicklaus.—habló el castaño seriamente, ya que sabía muy bien lo que su hermanito trataba de hacer.—¿Sucede algo?—preguntó al ver que su hermano no le prestaba atención y este la concentraba en la ojiazul. Por alguna razón sintió ganas de apartarlo.

—Nada importante.—comentó gracioso.—Solo quería buscar compañía.—dijo juguetonamente, dirigiéndose a Emilie.—¿Me acompañas?—.

Emilie se debatía, ninguno de los Mikaelson le agradaba pero no sabia como huir de la situación, si se quedaba con Elijah le resultaría demasiado molesto e incómodo, y si se iba con Klaus este estaría toda la velada jugueteando con ella, solamente quería ser irse y apartarse de ellos pero no sabía cómo lamentablemente en eso coincidía con el castaño, era demasiado educada.

—No gracias, ya es tarde y estoy demasiado agotada.—dijo la rubia, tratándose de pararse pero el rubio ágilmente la acorraló entre la barra y él.

—Oh vamos amor, ¿Desde cuándo los vampiros se agotan?—preguntó el ojiverde acercándose al rostro de la
rubia incomodandola aún más.

—Desde que tienen muchos enemigos y trabaja con algunos de ellos.—habló fuerte Emilie, tratando de alejar el cuerpo de Klaus de su anatomía.

Lamentablemente Klaus siempre consigue lo que quiere y tomó la muñeca de Emilie, la levantó de su asiento y le dió una vuelta dejándola mucho más cerca.

—¿Segura de que no quieres bailar?—La blonda estaba aturdida por la increíble cercanía entre ellos, torpemente asintió.

El rubio alejó a Emilie de la barra, y la música del jazz era lenta, por lo que Klaus tomó a la blonda de la cintura y la acercó más a él.

Luego del incómodo momento que pasó la blonda, tomó rumbo a su hogar, mientras que por el lado del ojiverde en su rostro se había impregnado una sonrisa.

—¿Te divertiste hermano?—preguntó con recelo el mayor, él había estado presenciando en todo momento las cosas que hacía su hermanito con su "ex" y no pudo negar que sintió algo de envidia de no ser él quien tomara por la cintura a la chica.

—¿Por qué?¿Celoso hermano?—dijo Klaus, por parte del castaño se quedó callado y solamente atinó a irse dejando a el rubio con una mueca complacida.

***

Freya con un hechizo se había reunido con su hermana, estaban conversando plácidamente sobre qué la rubia pronto estaría por New Orlands para controlar a sus hermanos, también Rebekah le comentó que Emilie y ella eran grandes amigas, pero cuando se enteró de que esta engañaba a su hermano, trató de hacerle la vida imposible, y que se arrepentía de no haberle dicho la verdad al castaño antes de su boda, dejándolo humillado frente a todos.

Ambas se despidieron, y el telegrama de Freya desapareció, pero algo andaba mal, vampiros enviados por Tristan aparecieron y atacaron a la rubia.

***

Emilie se había levantado y miles de recuerdos de la noche anterior vinieron a su mente de golpe. Estaba muy avergonzada.

Pero un mensaje llamó su atención. Era Marcel.

—Este hombre me atacó.—dijo Hayley viendo al hombre que se encontraba amarrado a una silla, Emilie lo miraba fijamente recordando quién era.

—Tienes que matarlo de una vez.—se escuchó a travez del teléfono la voz de Elijah.—

Emilie sabía que el vampiro era peligroso, pero quería un poco de diversión y dejaría que este, "accidentalmente", acabara con el vampiro y la híbrida.

El vampiro empezó a despertar y amenazó a Hayley ya que esta no se callaba.

Rápidamente, el vampiro rompió la silla y empezó a pelear con Marcel y Hayley.

En un ágil movimiento, el vampiro, pese a que se encontraba débil, logró tener ambos corazones a puntos de ser sacados de los pechos de Marcel y Hayley. Y Emilie seguía contemplando el espectáculo esperando la parte final. Pero no sucedió, Elijah había llegado e impedido aquella "desgracia", pero antes había enviado una mirada de «Ya hablaremos.» pues el original se había molestado con la blonda por no hacer nada. Cosa que a la rubia le erizó la piel.

Finalmente resultó que el vampiro había sido llamado a acabar con la híbrida, para llegar a su objetivo, Davina Claire.

Pues la híbrida tenía un trato con la bruja, y eso había complicado un poco el plan de Tristan.

Él quería a la bruja para activar una arma que acabaría con los originales y con ella. Y el hipnotizado había recalcado su nombre, la blonda los acabaría sea como sea.