En Los Brazos Del Asesino/2daTem #SagaLBYEN

23.-Teenage Dirtybang

Me gustaría saber cuál a sido su capítulo favorito de La Bella Y El Nerd y ¿Zayn ó Zack? Y por que.  Quisiera que lo publicarán en el grupo en Facebook. Lick en la descripción de mi perfil por si aún no estás dentro. Todos son bienvenidos.

[...]

Estaba sentada en el pasto mientras veía a Vitany sentada... creo, quizá hechada durmiendo. Me daba la espalda. Sentada en posición de meditación de yoga, sentía como los rayos del sol quemaban tan fuerte mi piel trigueña clara. Sentía en mi piel que empezaba a tornarse roja. Aún con la chamarra blanca deportiva al igual que mis shorts de ya tres días, podía sentir como los rayos traspasaban la tela.

-El desayuno perfecto que merece una princesa como tú.

La voz de Zayn... Zack me sacó de mis pensamientos ante dicha frase que como flash recordé la vez, que hace dos años atrás Zayn había dicho la misma frase en mi antigua casa. El mismo día que me pidió ser su novia, el mismo en la que Zayn y Damián se agarraron a golpes, el mismo día en la que pensé que Zayn dejaría de hablarme por lo problemas en los que lo metía, el mismo día que descubrí un secreto de el; más bien una habilidad de el: cocinar como todo un profesional.

Levante la vista a él, donde su enorme silueta cubría los rayos que tanto me lastimaban. Su enorme sonrisa de oreja a oreja, esos ojos que me miraban con tanta ternura.

Visualice que en las manos traía una bandeja con comida. Se dejó caer despacio en el pasto para quedar a mi altura.

-Que generoso de tu parte. -musité sinceramente viendo el contenido de la bandeja.

Pay de queso con zarzamoras, café capuchino, pan tostado, margarina, jugo de naranja y por supuesto una roja en un florero blanco. También destingí que el desayuno no era sólo para mí. Aquel desayuno era para los dos.

-No es nada comparado de lo que mereces. -su acento cambio al mío: británico.

-¿Hablas de langosta y todos esos platillos costosos? -dije con una sonrisa.

-Sí, creo que mereces algo mejor que esto. -poso su mano en mi muslo.

-De hecho, una vez... en varías ocasiones, con Zayn tuve la oportunidad de aquellos platillos a los cuales te refieres. Pero para mi estómago no fueron bienvenidos que digamos.

Zayn cuando notaba un ligero tono verde o pálido en mi rostro de inmediato me llevaba a tomar aire fresco. Para después comer algo más "normal".

-Quizá las especias no son lo mío.

-O lo tuyo sea la humanidad. -inclinó su cabeza de lado.

-Posiblemente sea eso. -comencé a reír, en el plena risa el rugido de mi estómago hizo compañía a mí risa.

Zack abrió los ojos con una sonrisa con la boca abierta dejándome ver la mayoría de sus dientes. De la vergüenza que tenía en ese momento, comencé a reírme más fuerte sintiendo mi estómago doler. ¿Qué otra cosa me quedaba? Fue mejor reírme de ese vergonzoso momento. Caí al pasto por toda la risa que tenía. Los rayos del sol me dieron a los ojos de inmediato, los cerré con fuerza sintiendo lágrimas querer brotar de mis ojos.

-Tranquila risueña -su silueta volvió a protegerme del sol- te pusiste demasiado roja -sentí su dedo sumergirse en mi mejilla- incluso creo que ya te duele el estómago.  -y si que tenía razón, el estómago me dolía, pero no podía parar de reír.

-Es que no puedo. -logre decir entre risas.

-Entonces tenemos que recurrir a esto.

Su brazo se puso como base al otro extremo de mi hombro en dirección opuesta al que estaba. Y de repente sus labios se unieron a los míos. Poco a poco la risa se fue apagando para ahora concentrarse en el beso. En cuestión de segundos Zack estaba prácticamente sobre mí. Volví a sentir los rayos del sol en mi ojo izquierdo y parte de la frente. A pesar de tener los ojos cerrados, la luz parecía traspasar a mi ojo.