Capitulo 1

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Despierto con la poca luz que hay en la habitación del hospital, llevo una semana aquí y todo me parece monótono, el doctor dice que me salve de milagro ya que sufrí un paro cardíaco por no alimentarme durante un mes, no pude irme con mi luz, este maldito dolor me consume cada día y solo miro al vacío. Ya no tengo vida desde que ella se fue, volteo hacia la puerta y veo pasar una pequeña de pelo negro llevando mi mente a la primera vez que vi a mi luz.

>>>>> año 2003.
Quince años antes del secuestro.

¿Donde estoy? Lo último que recuerdo es al hombre de la tienda, no me dejaba comer y tenía mucha hambre. Ahora solo escucho hombres hablando y no puedo abrir mis ojos.
- Doctor el pequeño tiene 11 años de edad y fue herido de bala, ha perdido mucha sangre - dice un hombre.
- Tenemos que operarlo inmediatamente -
- Si doctor -
- Llévenlo al quirófano -
Siento como vuelo en una cama y después el sueño me vence......
****

Un dolor en mi estomago hace que habrá los ojos, veo unas luces encima de mi y escucho personas corriendo por todas partes. Estoy en un cuarto pequeño con unas cortinas verdes oscuras que dan miedo.

- No se preocupe señora su hija se pondrá bien, solo fue un golpe en la cabeza -
- ¿Esta seguro? -
- Si señora, ahora acompáñeme tiene que firmar unos papeles -

¿Cuánto tiempo llevo aquí? Quiero irme. Trato de levantarme pero un dolor me lo impide y me recuesto de nuevo. De pronto escucho una voz, una voz muy hermosa.
-¿Mami? ¿Mami donde estas? -
Unos pasos pequeños resuenan en el cuarto. No la veo por las cortinas así que estiro la mano para apartarlas pero no puedo ya que el dolor vuelve mas fuerte.
- ¡Ahhhhhhh! - grito y la maquina que esta a mi lado comienza a pitar.
Mi corazón empieza acelerarse muy deprisa que siento que se va a salir. La maquina deja de pitar en varios sonidos para hacerlo en uno solo fuerte. Cierro los ojos para que esa luz que veo me lleve pero algo en mi mano me detiene, es otra mano pequeña.
- No te vayas, no me dejes - me dice
Abro los ojos y me encuentro con otros pero color negro, un negro hermoso como la noche con un brillo especial, como si tuvieran luz propia.
- ¡Ayúdame! - susurro
Pero ella solo sonríe y solo con ese gesto mi corazón empieza a calmarse, sujeto mas fuerte su mano y veo su luz.........  a mi luz.
Unos hombres entran entre las cortinas y alejan a la pequeña de mi lado, no logro distinguir muy bien por que veo borroso, solo los veo con más maquinas.......

***
- Ha sobrevivido, es un verdadero milagro, con cuidados y medicamento se lo podrá llevar en una semana -
- Gracias doctor -
- ¿Y qué es de usted el muchacho? -
- Es mi sobrino, sus padres acaban de fallecer -
- Bueno entonces eso es todo, me retiro -
- Gracias -
Abro los ojos y veo a un hombre bigotón con sombrero y con unos lentes oscuros, creo que tiene como unos treinta y tantos.
- ¿Quién es usted? - mi voz apenas la reconozco.
- Soy un amigo tuyo Drake de ahora en adelante - su voz es áspera y gruesa.
- Mi nombre no es Drake señor -
- Lo sé pero ahora así te llamaras y vendrás conmigo -
- ¿Y si no quiero? -
- ¿Tienes a alguien mas o a donde ir? - 
- No -
- Entonces vendrás conmigo -
- ¿Y por que hace esto? Si no soy nada suyo -
- Por que me agradas y veo muy buen potencial en ti -
- No veo cual pero gracias ¿ y usted es? -
- Para ti Jefe.... El jefe -.

>>>>>>

Unos años después descubrí cual era el potencial que el jefe había visto en mi y no me había quedado otra opción, lo único bueno que me quedo de ese maldito disparo fue haber conocido a mi luz, a esa pequeña que me salvo de mil maneras por que después de verla ese día la busque por cielo mal y tierra solo para volverla a ver.
- ¿Ya estas mejor? - pregunta mi madre.
La persona que menos pensé que volvería a ver.
- Lo estaría si me dejaras solo - mi voz suena llena de desprecio y vacío.
- Brayden, no tienes por que tratarme así - dice con dolor y tristeza.
Vuelvo a ver por la ventana ya que no quiero seguir hablando con ella, ¿como diablos quiere que la trate si me dejo con el peor maldito que tuvo que ser mi padre?.
La escucho lloriquear pero no me duele ni en lo más mínimo, ella tuvo la culpa, ella me dejo.
- Veo que aun me odias - susurra.
Solo quiero que desaparezca, no me dejo morir, no dejo que me fuera con ella.
- Dijiste que lo intentarías, que intentarías perdonarme... Pero ahora veo que lo hiciste solo por ella -
- Si... Y ahora ya no esta... así que déjame solo - le confirmo sin verla.
- Brayden.. Por favor perdóname mi amor -
Al no ver mi respuesta se va cerrando la puerta detrás de ella. Tiene razón lo hice solo por ella, le mentí. Y la culpa me lleva de nuevo a otro recuerdo.

>>>> Año 2013.
Cinco años antes del secuestro.

Ya han pasado diez años y no la encuentro, en el hospital nunca nos dieron información, ¡maldita sea! Tengo que encontrarla. Me encuentro en mi árbol de siempre admirando el largo campo que esta frente a mi.
- ¡Drake el jefe quiere hablar contigo! - me grita Rick
Me levanto de mala gana ay que siempre se quiere comportar como un padre, ya le dije hasta el cansancio que no lo haga pero no me hace caso y me da mucho coraje. Toco la puerta para entrar.
- Adelante - dice del otro lado.
- Me dijeron que querías hablar conmigo -
- Si, bueno no yo precisamente... Sino ella -
Miro hacia quien esta señalando y veo a la mujer que me trajo al mundo. Toda la sangre de mi cuerpo se esfuma en cuanto veo su rostro y me tambaleo un poco.
- Drake ustedes tiene que hablar - dice el jefe con intención de irse.
- ¡NO! -
- Drake por favor -
- ¿Que. hace. esta. mujer. aquí jefe? - digo por lo bajo con coraje.
- Ya te lo dije tienen que hablar, yo me retiro -
- ¡YA TE DIJE QUE NO! - grito. - ¡YO NO QUIERO HABLAR CON ELLA! -
- Brayden por favor - dice con algo de miedo.
- Yo no soy su hijo señora... Su hijo murió hace diez años peleando por algo de comida por que su madre lo abandono... Ahora lárguese - digo con todo mi odio.
Se cubre la boca y comienza a llorar desconsoladamente, todo su dolor se refleja en su cara pero no me arrepiento de mis palabras.
- Por favor hijo... escúchame -
- ¡NO ME VUELVA A DECIR ASÍ! - le grito y me largo de ese maldito cuarto.

Corro hacia mi recamara y golpeo el maldito costal con el que entrenamos hasta que duelen las manos y caigo en un llanto lleno de dolor. No puedo, no puedo con esto, ¿por qué regreso? ¿Por qué? No quiero nada que recuerde a mi pasado, a los azotes de aquel maldito hombre.

***

Han pasado semanas y acabamos de llegar del último robo del mes, así que decido emborracharme hasta perder el sentido pero cuando me dirijo hacia la cocina me encuentro con ella de nuevo. No deja de venir e insistir.
- ¿ Y ahora qué demonios quiere? - digo con desdén.
- Vine por que... el jefe me dijo que llevas mucho tiempo buscando a alguien muy especial para ti pero que no das con ella - dice sin mas.
- ¿Y a usted que le importa? -
- Me importa Bray... -
- ¡Shh! No me vuelva a decir así - le interrumpo antes de que diga mi nombre.
- Esta bien.. Drake -
- Solo váyase -
Me doy la vuelta para irme a celebrar.
- ¡La eh encontrado Drake! - me grita.
Me paro en seco al escuchar esas palabras y me apresuro a llegar a ella.
- ¿ A qué rayos se refiere? -
- A la niña.. La eh encontrado, se donde esta, donde vive - susurra.
- ¿Como sabes que es ella? -
- Tengo contactos en el hospital en el que ingresaste y por las señales que me dio el jefe la encontré de inmediato -
- ¿Donde esta? ¡Dígame! -
- Antes tienes que prometerme que me perdonaras - dice con preocupación.
- Olvídelo, si esa es su condición la encontrare yo mismo -
- Bueno al menos dime que lo intentaras -
Dudo un segundo pero el dolor en su cara hace que mi tonto corazón se ablande un poco y no se si es por la desesperación de ver a mi luz o por su dolor pero acepto.
- Esta bien.... lo intentare -
Una gran sonrisa aparece en su rostro y algo en mi se enciende pero lo desecho, no quiero sentir nada por ella, no ese sentimiento de hijo que me negó.
- Su nombre es Dira Hudson Cooley y vive en un pueblo cerca de aquí -
Todo el aire en mis pulmones se esfuma al escuchar ese nombre.

***

Días después acuerdo con ella para ir a Piedras, el pueblo que queda cerca. No se por que ha insistido tanto en que la acompañe. Me he puesto mis pantalones negros y un suéter del mismo color con una gorra por que hace algo de frío. Se acerca Navidad y todo el mundo corre de un lugar a otro por regalos. Cuando llega se sienta a un lado de la banca en la que estoy.
- Que bueno que decidiste venir - dice con algo de emoción.
- Si pues fue gracias a tu insistencia. ¿Que hacemos aquí señora? -
- Estamos aquí por que te daré mi regalo de Navidad -
Me levanto inmediatamente.
- No quiero nada de usted -
Estoy a punto de irme pero me detiene con su brazo.
- Drake este te gustara... Mira - señala al frente.
No veo a que se refiere hasta que veo a una muchachita soltar una fuerte risa que hace que mi corazón se detenga con solo escuchar ese sonido. La veo de pies a cabeza, es delgada con un cuerpo exquisito, con una estatura pequeña como de 1.65, tiene pelo negro azulado que le llega poco abajo de los hombros y sus ojos son lo único que me rebelan que es ella, la niña que eh buscado por todas partes. Esta acompañada por una mujer similar a ella que es su madre al parecer.
- Feliz Navidad Drake - susurra la señora detrás de mi.
Y tuvo razón por que es el mejor regalo que me pudo haber dado.

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Ecos del destinoМесто, где живут истории. Откройте их для себя