Ecos del destino

Capitulo 15

Lo que daría por no hacerle daño a ninguna de las dos, pero la decisión la tengo que hacer.
Los ojos de Dira saltan sorprendidos al escuchar mis palabras pero antes de que se forme ideas en la cabeza continuó.
- Lo siento pero la elijo a ella......... Sasha - me giro hacia ella para hacerle ver mi decisión.
La sonrisa de victoria que tenía se esfuma en cuanto se da cuenta de mis palabras.
- ¿Qué? - murmura.
Me pongo al lado de Dira y la abrazo por los hombros.
- Lo que escuchaste....... Lamento todo esto pero a quien amo es a ella -
Sus lagrimas caen sin parar. Se que trató de ayudarme y el que siga vivo se lo debo en parte a ella. Me pongo frente a Dira y la miro a los ojos.
- ¿Me puedes dar unos minutos a solas con ella, por favor? - murmuro.
Se queda pensativa unos segundos pero al final asiente. Le doy un beso casto en los labios antes de que se marche. Cuando sale de la oficina arrastro a Sasha hacia el sofá para hablar con ella. Al menos merece una buena despedida.
- Se que te he hecho daño Sasha pero no me dejaste otra opción - susurro.
- ¿Por qué? - solloza mirándome a los ojos.
La miro desconcertado, no se si haré bien en explicárselo pero no puedo mentirle.
- Por que es ella. Siempre será ella -
Su mirada se vuelve mas triste y al segundo lo comprende. Cierra sus ojos dejando caer mas lagrimas de dolor. Su cuerpo empieza a temblar por el llanto. La abrazo.
- Lo siento Sasha - le digo con todo mi dolor.
Llora y llora  durante unos minutos mas, hasta que logra calmarse.
- Supongo que tenía la guerra perdida desde el principio - murmura.
- Lo siento. Y gracias por haberme amado como lo hiciste. Se que encontraras a alguien más que te haga de verdad feliz como te mereces - la miro.
Sus ojos rojos e hinchados me miran con melancolía. Y una tímida sonrisa se asoma en sus labios gruesos.
- Gracias a ti también por quererme, aunque haya sido por poco tiempo. Espero que seas feliz Carter, lo mereces -
Se acerca dejando un tierno beso de despedida en mis labios. Después se levanta y respirando tan hondo como puede sale de la oficina.
Nunca quise hacerle daño. De verdad quería enamorarme de ella pero la aparición de mi luz lo cambio todo. Tal vez si hubiera sido feliz con ella pero el hubiera no existe. Y estoy feliz por ello, por que ahora tengo al amor de mi vida. Apoyo la cabeza entre mis manos tratando de no sentirme tan culpable como me siento.
Unos segundos después siento unas manos en mis hombros. Levanto la cabeza y sus ojos negros me miran.
- Lamento el mal rato que te hice pasar - mi voz suena algo triste.
- Descuida. Pero si tengo que ser franca contigo, por un momento pensé que mi mundo se venia abajo - sonríe tristemente.
- Si me di cuenta. Te juro que no era mi intención, lo lamento -
Me acerco a ella y la abrazo acomodándome en el sillón. Su cabeza queda apoyada en mi pecho.
- ¿La amabas? - pregunta tímidamente.
Suspiro y su cuerpo se tensa.
- No Dira. En cierto modo, la quise, pero amarla, jamás lo hice - murmuro.
- ¿Y a tu esposa? - se levanta mirándome a los ojos.
- A mi esposa si, la ame -
- ¿Que pasó con ella? ¿Dónde está? - frunce el ceño.
- Ella murió hace poco tiempo -
Procesa la información y luego baja la mirada.
- Y a ti te amo mas que a ninguna otra mujer en este mundo - sentencio.
Levanta la mirada algo asombrada.
- ¿Como sabes que me amas? Si llevamos poco tiempo de conocernos -
- Créeme, tiene justificación -
La noto tensarse un poco y frunce el ceño.
- ¿Que pasa? - preguntó preocupado.
Niega con la cabeza y suspira.
- Nada. Creo que he tenido un recuerdo pero no se de donde -
Me tenso rápidamente al escucharla, yo también recuerdo que una vez le dije algo parecido, tal vez eso es lo que recordó. Me mira y luego hace una mueca.
- Ah, lo siento, aun no te he dicho que hace tiempo tuve un accidente -
- ¿Que fue lo que paso? -
Trato de no sonar algo intrigado pero no lo logro. Si tengo esta oportunidad de averiguar que fue lo que paso, no pienso desaprovecharla.
Se encoge de hombros y suspira.
- Es el punto. No lo recuerdo. Hasta donde yo recuerdo, regresaba con mis tíos de visitar a mis abuelos y tenía 18 años, luego desperté en el hospital con 23 años y..... -
- ¿Y? -
- Y nada. Por mas que trato de recordar eso últimos 5 años de mi vida, no lo logro -
Se ve afligida así que la abrazo para reconfortarla. 5 años, 5 años que no recuerda. ¿Cómo demonios sucedió eso?.
- ¿Qué te dijeron los doctores? - preguntó algo inquieto.
- Que tal vez algún día volverían así sin más o tal vez no - susurra.
Mi corazón se encoge al escuchar eso. ¿Y si nunca me recuerda? ¿Si nunca recuerda el dolor que le cause? Tal vez sea esta nuestra oportunidad de ser felices desde el principio, sin ninguna barrera, sin ningún secreto de por medio. La abrazo mas fuerte para que sienta que estoy aquí con ella. Una esperanza se abre camino en mi pecho. Esta vez haré las cosas bien. Esta vez la amare de la forma correcta y sin ningún obstáculo.
- ¿Carter? - me llama.
- ¿Si? - contesto.
Se levanta y me mira a los ojos.
- Tengo algo más que contarte -
- Dime -
Duda unos segundos y cuando por fin se dispone hablar tocan la puerta.
- Adelante - anuncio.
Silvia aparece con más carpetas.
- Lo siento. ¿Interrumpo algo? - pregunta.
- No Silvia. ¿Que pasa? -
- Te traigo los balances del mes -
- ¡Ah! Esta bien déjalos en el escritorio -
Cuando termina se marcha.
- ¿Y bien? ¿Qué me querías contar? - la miro.
- Nada. Ay que trabajar -
Se levanta y comienza a escoger los documentos del escritorio. Me acerco a ella y rodeándola de la cintura me acerco a su oído.
- No se me olvida lo que tenemos pendiente señorita Hudson - murmuro.
- No lo daba por hecho señor Carter -
Sonrío por su respuesta. La giro para besarla.
Tiene que ser hoy mismo. Y tengo el plan perfecto......

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