Capítulo 29

3.3K 283 49
                                    


Este olor... me resulta tan familiar que es inquietante. Y lo peor es que no recuerdo porque me suena tanto. Miro atrás, y las sirenas siguen seduciendo a unos estúpidos piratas que tienen pinta de no tener ni idea de dónde se han metido.

No puedo describir el olor. Lo único que puedo decir es que huele extraordinariamente bien. Demasiado. Lo inhalo. 

- Buenos días.

Es la voz de una chica. Giro un poco la cabeza, para mirarla mejor. Hago todo lo posible para pasar desapercibido. Ella no se da cuenta de que la estoy mirando. Tiene el cabello muy largo, y sus ojos verdes brillan con la luz que entra desde la ventana. Se sienta a mi lado, y espera a que venga la camarera.

Ella la mira con desprecio. Parece celosa. No me extraña, la chica ha captado la atención de los piratas. Eso significa que puede que pierda clientela. 

- Un poco de sake, por favor.

Entonces recuerdo quién es.

***

Después de una larga ruta y varios inconvenientes con monstruos marinos, llegamos a la isla Gyojin. Cuando apoyo un pie sobre la tierra, todavía no me puedo creer que un lugar como éste exista. Es maravilloso, irreal. ¿Cómo podemos estar debajo del mar? Miles de preguntas recorren en mi cabeza. Todos estamos contemplando el lugar, y Luffy ríe. 

Algunos peces pasan por nuestro lado, y más allá logro ver unas cuatro sirenas. Nunca antes había visto a alguna, ni siquiera pensaba que existían de verdad. La nariz de Sanji no tarda en empezar a sangrar. 

Dejamos el barco atrás, y empezamos a andar hacia el centro de la isla. 

No sé cómo logramos separarnos, pero siempre pasa lo mismo. Me he quedado a solas con Sanji. Luffy salió corriendo como siempre, y uno a uno todos han desaparecido. No creo que nos pase nada malo, esta isla parece pacífica, aunque algún que otro nos mira con desprecio.

- Sanji, intenta no alejarte demasiado...

Cada vez que ve una sirena le empieza a sangrar la nariz, y creo que ya vamos en la enésima vez. Le agarro de la camisa y lo empujo hacia mí. No quiero quedarme sola. Aunque parezca que aquí no puede pasar nada, me espero cualquier cosa. Seguro que Luffy ya se ha metido en un buen lío.

Me quedo mirando un escaparate, es una tienda de katanas, pero es única. Hay un cartel en el que pone que están echas con piedra de no sé qué de la isla... 

Y cuando me giro para decírselo a Sanji, no está. Miro en todas las direcciones, pero no hay ni rastro de él. No me lo puedo creer. No sé cómo lo hago, pero siempre acabo sola, y lo odio.

Después de dar mil vueltas en la misma calle, me rindo. No veo a ningún compañero mío. Peor aún, Sanji tiene mi Den Den Mushi, así que no puedo contactar con nadie. Entro en un bar, por si Sanji está dentro. La verdad es que no me extrañaría, dado que en muchos bares de esta isla hay sirenas, y él estaba loco por conocer a alguna.

- Buenos días. - digo, y me siento frente a la barra.

Hay un montón de piratas. Algunas sirenas sirven comida y bebidas a sus clientes, y eso me recuerda a mi pasado. Pienso en mirar en otros bares, pero me quedo. No me vendría mal un poco de sake...

La camarera me mira un poco raro, y le pido un poco de sake. Me lo tomo a toda prisa. Dejo algo de dinero, y vuelvo a salir. No tengo ni idea de qué debería de hacer.

- Un momento.

Es una voz un tanto familiar, y me giro para ver quién es. Tiene la cara medio tapada, así que no logro ver su rostro. Me agarra fuertemente de la muñeca, pero yo me suelto.

La inútil del grupo [One Piece fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora