Malfoy. || D.M

Capitulo 030.

LARA.

El resto del día paso lento, y tedioso para mejorar todo.

Cedric se fue después de 30 minutos de encontrar mi dichosa cicatriz, bueno, eso no es relevante.

Eran apenas las 14:00, todavía faltaban 10 horas más para poder ir de vuelta a Hogwarts, y Seamus, a saber dónde estaba.

No tenía nada interesante que hacer.

Salvo bajar y buscar a Viktor, así que decidí bajar y tratar de encontrarlo sin toparme a ningún puto mortifago.

Baje las escaleras hacia la planta baja, busque es todas las partes del interior de la casa pero no tuve suerte.

Salí al patio y empecé a recorrer, cuando llegue a la parte de atrás lo vi parado a lo lejos cerca de una pequeña laguna.

Camine con paso tranquilo hasta llegar a su lado.

-Buenos días Larrra.- me dijo sin apenas volverse a verme, y con su acento.

-Buenos días Viktor.- conteste por educación.

Me quede observando el reflejo que reposaba en la tranquila laguna.

-Debes estarr confundida.- dijo después de un rato.

-Es lo más confuso que he vivido a decir verdad...- dije mientras soltaba una risa sarcástica.

-Debe serrlo... Bueno, pasando del tema, he notado que el rrrubio que llegó porrr la mañana no te quita el ojo de encima... ¿Son algo?- preguntó con su acento de marcadas Rs.

-Ehhh... Éramos mejores amigos... Por desgracia me gustaba, se lo dije... Y para ser teñido es listo el condenado.- dije mientras me reía de lo estupida que era.

-Entonces, no son nada... Y ¿El otrro chico? Se nota que ustedes dos se llevan algo entrrre manos.- me dijo mientras me miraba divertido.

-Uhhh... Me has descubierto.- dije mientras me reía con ganas.

-Tan pequeña y sin inocencia.- aún así no hubiese ni una sola R en la oración entera se le notaba el acento.

-Soy perfectamente inocente eh.- le dije mientras lo miraba alzando las cejas de manera divertida.

-Clarrro, y yo no tengo acento búlgarrro.- me dijo sarcástico.

-Touche.- le dije levantando los brazos.-Y tu, ¿Qué me dices? ¿Alguna chica?- le pregunte curiosa.

¿Qué sería la vida de Viktor Krum?

-No, la verrrdad nadie.- me dijo alegre de cierta manera.- Supongo que me casarre con mi escoba.- se rió con ganas.

-Por Salazar, eres un exagerado... Debes tener un millar de chicas atrás tuyo.- le dije.

-No te lo voy a negarr.- me dijo pícaro.

-Pero mira que pillo has sido.- le dije mientras me reía.

-Tu no te quedas atrrras pequeña niña.- me dijo mientras me daba un leve golpe en el hombro.

-¿Tú crees?- le dije mientras le devolvía el golpe.

Así pasamos una hora, una divertida hora de charla.

Más otra más en la que él me enseño cómo golpear a alguien.

Y otra de reposar en silencio.

Llegaba la hora de arreglarnos para la dichosa cena.

Entramos juntos a casa, si, Viktor también estaría en la mesa, para mí suerte... Y la de Seamus, que ahora que lo recuerdo ama el Quidditch más que a su propia madre... Tal vez no tanto pero bueno.