Malfoy. || D.M

Capitulo 009.

DRACO.

-¿Qué crees que haces?- santísima mierda, ¡¿porque ahora?! La bese, y ahora esto...

Maldito Potter.

¿Potter? ¿Qué rayos hace Potter aquí? Y más importante ¿Qué cree que hace preguntándome que creo que hago? Lo mataría ahora sí...

-¿San Potter?- Lara lo miro con los ojos abiertos como platos, no sé qué era peor, si Zabini quien venía detrás de él y yo todavía la tenía agarrada de la cintura y se notara que la bese o que aparte venía Finnegan por ahí.

-¿No te enseñaron a respetar a las novias de otros chicos Malfoy?- Potter volvió a abrir su boca.

-¿Y de quién se supone que soy novia Potter?- Lara hablo y me tomo de la mano para enfrentar a Potter.

-De Seamus.- uy... Lara apretó más mi mano.

-¿Ah si? Porque si mal no recuerdo me invitó a salir el otro día y solo fue una cita nunca me pidió que fuera su novia, y si les ha dicho eso, qué pena... Y aparte no te metas en los asuntos que no te importan...- señaló a Potter notablemente enojada.

-Draco, Lara, vamos mejor... No será y los leones se ponen enojaditos.- Zabini intervino en la pelea de Potter y Lara.

Finnegan tomó a Blaise por el cuello de la camiseta y lo empujó a la pared.

-No te metas tu zabini.- amenazo y alzó el puño, lo estrelló contra el pómulo de Blaise.

Maldito seas Finnegan.

Empuje a Potter cuando llegue empuje también a Finnegan, él me golpeó en la cara también, lo detuve cuando lo tome de la camiseta a él como hizo con Blaise y esta vez yo golpeé a Finnegan, uno, dos, tres.

-Draco, déjalo, no lo vale.- Lara toco mi hombro, automáticamente deje a Finnegan con su nariz rota y un creciente cardenal morado en su ojo.

Así nos fuimos, cuando llegamos Lara fue directamente a la habitación de las chicas.

-Draco, la besaste ¿no?- Zabini está parado en frente mío.

-Si...- lo mire, y en ese preciso instante Lara volvió a la sala, con una pomada muggle en las manos, no hizo sentarnos a ambos en el sillón frente a la chimenea, tomó el rostro de Blaise y curo el golpe en su pómulo.

-Vete, no te toques la cara y descansa algo Blaise.- hablo tranquila, la sala estaba vacía, todos estaban en sus habitaciones y ahora solo quedábamos Lara y yo.

-Yo... Lo siento Lara... Si no me quieres volver a hablar lo entiendo...- me miró y antes de que pudiera continuar me abrazo, me quede quieto, no sabía qué hacer.

-No es nada...- me soltó y me sonrió, no se veía afectada por lo que pasó.- Ahora déjame ver tu mano...- extendí mi mano hacia ella, la tomo y del bolsillo de su pantalón saco un trapo con algo de agua, limpio la sangre de mis nudillos, puso algo de pomada en ellos y después tomo mi rostro.- Se ve fatal... Tardará en borrarse...- lo examinó por un momento con cara de preocupación, lo toco levemente y el dolor que me causo fue leve pero agudo.

-Auch.- me queje por segunda vez, ella alejo el dedo del moretón que salió de un momento a otro en mi mejilla y se extendía a mi mandíbula.

-Maldito sea el idiota de Finnegan...- estaba enojada con Finnegan, no conmigo, eso me hacía sentir mejor.

-¿No estás enojada por qué te bese?- le pregunte algo nervioso, temía que reaccionara y me dejara ahí botado y no me volviera a hablar.

Me miró y me sonrió, a veces era algo extraña, pero de que me quejo... Se puso algo de pomada en el dedo y antes de pasarlo por el golpe dio un pequeño y rápido beso en la unión de mi mandíbula con el cuello, di un respingo sorprendido por lo que acababa de hacer, supongo que esa era su respuesta, se rió de nuevo por mi reacción y era un no, volvió a su tarea auto-asignada de curar el golpe de mi cara aún con una sonrisa en el rostro...

Cuando se levanto me dio la espalda, me levante y camine hacia ella...

-¿Aún quieres saber que es lo que me tiene preocupada?- me di cuenta de que miraba hacia una de las ventanas, el calamar gigante se encontraba ahí, como muy pocas veces, sonreía de manera extraña, supe que no estaba lista aún para contarme lo que sea que la tuviera preocupada.

-Se que no estás lista aún para contármelo, puedo esperar...- me pare a su lado, justo como ella hizo cuando estábamos en la torre astronómica, me giré hacia ella y tome su mano.- Lara, vamos a sentarnos, no tengo sueño...- ella se gire y me sonrió de acuerdo con mi idea.

Nos quedamos sentados por un rato en silencio, ella en uno de los lados y yo en otro, la mire y me eche en el sillón con mi cabeza en su regazo.

-¿Qué te sucede Lucius?- ahí estaba de nuevo, mi segundo nombre, el nombre de mi padre, un hombre frío y sin sentimientos, un hombre que era un monstruo... Uno en el cual me convertiré tarde o temprano...

-No me llames Lucius...- me queje en voz alta dejando de lado mis pensamientos.- No me gusta...- la mire desde donde estaba y contemple su rostro.

-Deja de mirarme...- se rió, a veces no parecía hija de Snape, ese hombre era más frío que un enorme bloque de hielo... Pero ella era divertida, infantil y daba la impresión de que nunca cambiaría su actitud.- ¿me vas a decir que te pasa?- me miró esta vez algo preocupada, la verdad es que no me pasaba nada, simplemente estaba pensando... En ella claro...

-No me pasa nada... Estoy pensando...- le conteste y sentí sus manos jugando con mi cabello.- No me toques el cabello Lara...- ella no me hizo caso y siguió despeinando mechón por mechón mi cabello.

Me levante y ella dio un respingo cuando lo hice, la mire y me lancé sobre ella a hacerle cosquillas.

-DRACO LUCIUS MALFOY TE ORDENO QUE ME DEJES- gritaba mientras trataba de librarse, yo estaba sobre ella haciéndole cosquillas mientras ella me golpeaba el pecho para salir, me detuve y la mire fijamente, de nuevo vinieron a mí las ganas de besarla, ella también se detuvo, respiraba agitadamente por las cosquillas, yo me mantenía tranquilo, levantó un poco su cabeza y yo pasé mi mano hasta su espalda, la acerqué más a mi, ella enrollo sus brazos alrededor de mi cuello, uní nuestros labios mientras aún estábamos tirados en el sillón central de la sala común de Slytherin, me levante pasando mis manos por sus piernas para sentarnos mientras seguía besándola despacio.

-Vaya escena, qué fuerte...- Zabini nos interrumpió, y vaya oportuno, Lara se bajó enseguida de encima mío, estaba tan roja como su color de piel lo permitía.

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Segundo capítulo del día.
Segundo beso del día de estos dos
Posiblemente la veo luego.
Las amo.
Quiero agradecerle especialmente a JeSuiAmateur la única que vota y mi muggle favorita, más te vale votar ahora eh...