Una apuesta que cambio su vida por completo, esa noche que la hizo caer en el amor verdadero.
Una noche en la que por primera vez abrió su corazón completamente a esa persona pero existe un problema ¿esa chica podrá perdonar que haya sido solo una...
¡Felices Vacaciones! (Sí ya estas felicidad sino, disfruta la tortura escolar).
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Vale ahora si vayamos al capítulo de hoy.
-Hola Camila - saludo Sharon a MI Camila
-Te dije que te alejarás, lo nuestro se termino hace mucho tiempo ahora estoy con Lauren así que no vengas a molestar - esa es mi chica
-Evitame la pena de destrozar tu rostro con mi puño - le digo y tome a Camila del brazo y subimos a mi auto
-Siento mucho eso Lau - me dice con un cietto tono de enojo
-No te preocupes, se como es esa zor... - no termino de decir la palabra que empieza con zo y termina con rra
-No te preocupes, puedes decirla que también opino lo mismo de ella. Por más que sea mi ex-novia, ella es así - dijo mientras pone música en el estéreo
-Prefiero no hacerlo, no me gusta hablar mal de las personas a sus espaldas prefiero decirlo frente a frente, sin cobardía ni hipocresías - recalque
Continúe conduciendo en total silencio después de eso, ella comenzó a cantar una canción que había comenzado a sonar, se trataba de una de mis favoritas y la verdad no pensé que le iba a gustar ese tipo de música a Camila, tal vez... deba de llevarla conmigo la próxima vez. Llegamos al centro comercial, estacione el auto y salí para abrirle la puerta, ella me devolvió el gesto con una sonrisa para después entrelazar su mano con la mía y caminamos hasta el cine.
-¿Sabes? Cuando nos conocimos jamás me imagine llegar a este punto contigo? - le fui sincera
-Lo se, igual yo. Pensé que te terminaría matando por tu actitud - contesto
Yo tan solo reí y nos dirigimos a comprar las entradas para la película, elegimos una de terror... bueno yo la elegí apesar de que a Camila le van bastante miedo, pero ya sabemos que es un pretexto para poder abrazarla. Elegí los asientos de la parte trasera, antes de entrar a la sala compramos un montón de chucherías, teóricamente todas las que pedía Camila solo quería complacerla. Durante toda la película Camila lo único que hacia era abrazarme, hundir su cara en mi cuello para no ver nada mientras lloraba y gritaba de miedo, simplemente le decía que "solo es una película" y en varias ocasiones me reía de ternura ya que nunca la había visto de esa manera.
-Por favor Lauren, salgamos de aquí que no quiero seguir viendo esta película - me dijo mientras me abrazaba muy fuerte y hundía su cabeza en mi cuello para evitar ver a la pantalla
-Ya casi se termina, además no da tanto miedo
-Eso no se vale, tu eres Lauren caga murciélagos Jauregui, nada te da miedo - hablo con voz de una bebé
