Capitulo 18

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Tuve que grabar otro video, y en este yo tenía que darle una dirección para que mi padre dejara el dinero, creo que no me van a dejar salir a si por así. No sé cuánto tiempo he estado aquí, pero creo que han sido semanas. Tengo muchas cosas encontradas y por pensar, y una de esa era como podía salir de aquel lugar, cuando era pequeña siempre sabia como escaparme, me acuerdo cuando me castigaban y me dejaban todo cerrado, yo igual realizaba mi escape e iba donde mi amigo Simón para poder jugar con él.

Creo que mi padre no está haciendo nada tan rápido, porque sabe de mis habilidades, ahora que tengo la cabeza más fría, y estoy pensando con claridad, tengo que buscar la forma de salir de aquí. Ellos vienen cada dos horas, una es para venir a verme o para tráeme el desayuno o el almuerzo, así que tengo cada dos horas para salir de aquí. Coloque mi mente tranquila para no pensar en nada, busque algunos puntos en la habitación, y me doy cuenta que en la esquina arriba del techo, hay un tapa donde sale el aire acondicionado. Me pare de la cama y fui a mirar, busque y tome la silla que estaba ahí, la puse y me subí en ella, la tapa se podía mover, pero necesitaba algo para poder sacar los pernos que tenía, busque y vi el tenedor que estaba en la mesa, me habían dejado el almuerzo anteriormente hace más de quince minutos, lo tome y luego otra vez subí. Coloque la parte de atrás del tenedor y lo puse en los pernos, comencé a darlo vuelta y me tomo, saque perno por perno, hasta que la tapa salió, me baje de la silla y deje la tapada debajo de la cama.

Me subí otra vez a la silla, pero no alcanzaba a subir bien, no sabía qué hacer, mire para todo lados para encontrar algo, y hay había una mueble algo viejo, fui y cuando la iba a mover el mueble no lo moví ningún centímetro. Empecé a buscar, y encontré otro mueble, me acerque y este si lo podía mover, lo coloque y luego arriba del mueble coloque la silla, me subí y ahora alcanzaba, tome impulso y comencé a posicionarme bien y poder salir de ahí. Estaba pasando por él tuvo, me movía en silencio ya que no quería que ellos escucharan y se percataran que algo estaba pasando arriba, no sabía para dónde ir, ya que había muchos caminos y no sabía cuál tomar, pero intente lo que podía hacer, cuando veo una luz y me acerco para mirar y escucho algunas voces de hombres.

-papá que vas hacer con ella.

-voy hacer lo que tú no hiciste desde un principio. -no podía ver las caras de aquellas personas.

-papá yo......

-me conto tu hermana que la estuviste en tu casa, espero que no te hayas enamorada de ella.

La otra persona no dije nada, alguien abrió la puerta y salió de aquel lugar, yo mire por la luz ya que quería saber quiénes eran las personas que estaba en aquel lugar. Pero solo vi la cabeza por la parte de arriba de la persona que estaba todavía en el salón. Espere un momento para ver si aquella persona salí de ahí, esta que lo hizo y yo le pegue a la tapa con fuerza, baje despacio y cuando solo tenía mis manos afirmada me tire, me golpe en el pie y caí luego de rodilla, aunque la altura no eran tanta me golpe fuerte.

Parecía igual que las películas de acción que uno ve, pero gracias a mi amigo Simón que tuve en la infancia, me acorde de como me escapaba de mi casa y él siempre me ayudaba hacerlo.

Fui directamente a la puerta, no se veía nadie que estuviera cerca de aquí, no sabía a donde ir, miro para ver algo y me encuentro con una capucha, me la coloco y salgo de la habitación, camino despacio por los pasillos de aquel lugar, hasta que me encuentro con un hombre, este me quedo mirando y se acercó a mi lado.

-no sabía que estaba aquí señorita Amelia. -yo asiste con la cabeza. -le diré a su padre que esta por aquí. -yo otra vez asiste con la cabeza.

El hombre siguió su camino, yo camine por donde venía aquel hombre y veo que había una puerta, cuando estaba saliendo de aquel lugar alguien me toma del brazo, yo me pase muchas cosas en la cabeza, me asuste y comencé a tiritar, ahora sí que estaba perdida, yo me doy vuelta y antes mis ojos veo que estaba Gastón. No podía creer lo que estaba viendo mis ojos, él también estaba muy sorprendido.

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