Capítulo 16 ''Por favor Larina... Te amo''

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Alejandro

Me bajo la camisa por detrás y me toco el pelo con ansiedad. Echo de menos a Larina más que a nada, estos días los he pasado canutas, estos días he estado pensado en su cuerpo, en su mirada, en su sonrisa, en su cara. Me hacía pajas mal echas, sé que suena bruto y pésimo, pero es que ¿sabén lo que es estar sin ella? estar acostumbrado a ir de flor en flor, pero descubrir estar enamorado de una persona, que por supuesto es una magnífica niña, sé que es pequeña y blablabla pero lo importante no es la edad, ni como sea de cuerpo, en verdad lo que importa, es el contenido. Y ella es la persona más preciosa que había visto nunca por dentro y por fuera, lo digo en serio. Estos días he ido a fiestas, me he emborrachado, me he llevado a una que otra chica, pero cuando le tocaba la cara y no veía esos ojos y sabía que no era ella, o cuando besaba a otra que no olía a vainilla, que no tenía la piel tan suave como el algodón, que no tenía ese lunar justo debajo de la oreja, que no tenía esa sonrisa blanca y delicada, que no tenía esos pechos grandes y firmes, simplemente no era Larina. Me quitaba de su lado y le decía que no podía, le explicaba por qué, algunas lo comprendían, pero otras se lanzaban para intentar que olvidara algo que era absurdo de intentar, incluso una se restregó tanto que me entraron hasta naúseas, eran preciosas... pero no eran Larina. Miro el reloj una, dos y hasta tres veces, no niego que tenga ganas de vomitar, subo la cabeza y entonces la veo, se me seca la boca, respiro con irregularidad, me tenso y me excito de lo, hermosa que va. Tiene un vestido negro tan tan sexy, me muerdo el labio, mmm está tan apetecible, está tan preciosa. Pero... desvío la mirada a su derecha y... ¿ese quién coño es? Es alto, bastante atractivo, ojos azules y muchos tatuajes, la agarra de la cintura, y le mira a los ojos. Me dan ganas de arrancarle los ojos, pero hoy me e jurado que tengo que estar tranquilo, y hacer todo lo que pueda para llevarme a la chica que quiero claramente conmigo. 

Me acerco sin pensarlo dos veces, ella no me presta atención en absoluto hasta que le acaricio el brazo con suavidad, pero como era de obviar se quitó rápidamente y me miró por un segundo después de volver a centrar la vista en ese tío tan gilipollas. Me toco el pelo y doy un paso más, pasa de mi, doy otro, igual. Vuelvo a dar otro paso, y por fin me mira a los ojos con desprecio, asco para ser exactos, me quedo pasmado ¿ella es mi Larina? ¿ella es la niña de la que me enamoré como un completo loco? ¿esa es la chica más dulce del mundo? No lo creía, pero era ella. Estaba demacrada, pero igual de bella, igual de atractiva, igual de sexy. 

-Larina tenemos que hablar, por favor- digo apenas en un susurro, me mira, me mira y cuando se decide hablarme se echa a reír ¿está borracha? ¿la abrá emborrachado para...- vete de aquí, gilipollas-veo como se va pegando a ese tío, me corroe los celos, pero no lo hago notar- no hasta que me valla contigo- le digo más decidido que nunca, ella se vuelve a reír y pone de nuevo esa cara de asco, que tanto odio y se da la media vuelta, se acerca a ese chico.. ¿no hará lo que yo creo no..? ¿no será capaz no..? pero veo que se acerca más y más y...

Ocurre lo que jamás estaba preparado para esto, para que me gritase si, hasta para que me pegara, pero

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Ocurre lo que jamás estaba preparado para esto, para que me gritase si, hasta para que me pegara, pero... para esto no. Estoy cabreadísimo, me acerco a ese tío y le pego un puñetazo después que se separara de ella- ¡no! ¡como puedes ser tan hijo de puta! ¡vete de aquí! te odio, te lo juro te odio como jamás e odiado a nadie, te odio como nunca e sentido en mi interior, ¿como pudiste traicionarme? yo nunca te mentí pero tu incluso, a pesar de todo lo que te dí, de todo lo que te entregué lo que nunca le e entregado. Aléjate de mi, de mi nuevo hogar, de mi vida. Aléjate de mis pensamientos, de mi alma, de mis lágrimas, aléjate de nuestros momentos, de nuestros momentos, de nuestras tonterías, ya que ahora para mí, lo son ¿sabés Alejandro? me das mucho asco, te lo digo sinceramente, no vales una mierda, pero tampoco tienes toda la culpa, también la tengo yo ¡por ser tan estúpida, por ejemplo! me dan ganas de matarme... ¡Claro! salías mucho por ahí y según tú a trabajar y era quedar con esa zorra ¡¿no?! ya no te quiero, bueno lo que te quiero no es nada parecido a lo que te quise hace poco tiempo, me vine aquí para olvidarme de tí, para ser feliz con otro que no seas tú. Con alguien que me ame ¡de verdad! no como tu, gilipollas. No tengo mas nada que decirte ¿sabés? la próxima vez que vuelvas a joder a una tía, te echarás para atrás por que no todas son tontas ¿sabés? desde el principio me suponía que ibas hacer ¡así! si te puedes ir ya y largarte de mi vida de una puta vez, mejor- con eso se giró hacía él y le sonrío delicadamente, no me dí cuenta de que los pies me flaqueaban, demasiado creo, tenía que intentarlo una vez más y si no decía nada me iría...- por favor Larina, quédate conmigo. Nunca me acosté con ella mientras estaba contigo, solo la ayudaba ¡por que ella me llamaba! pero te juro que nunca antes había sentido el vacío que siento ahora mismo, el vacío que jamás había experimentado, es tan intenso-me toco el pecho ya que me cuesta respirar-yo nunca te haría daño, te lo juro... Por favor Larina, te amo. Te amo como no e amada hace ya tanto, tanto tiempo. Por no decir nunca, ven conmigo y te lo demostraré, te enseñaré evidencias para que veas que jamás te e engañado, por favor..- por un instante percibo a mi Larina, pero rápidamente desvaneció- no te creo, lo siento. Adiós hasta nunca ¡vete! o les diré que te echen- ahí entendí la maldita realidad, entendí que ya no me amaba, me rendí. Nunca lo habría echo, lo prometo, pero más bien lo hago por ella, la amo y no quería hacerle más daño.

La miro por última vez y noto como me cae una lágrima, una lágrima que jamás me gustaría que nadie la viera y mírame llorando como un crío gilipollas, soy un puto gilipollas, que solo pensaba en si mismo... me giro y desaparezco de esa gran movida, al salir noto una mano a mi espalda, me giro y no es quien espera que fuese. 

-¿No verdad?- dice Montse con los ojos rallados, niego con la cabeza y se echa para atrás, saca un cigarrillo y se lo mete en la boca- la entiendo ¿sabés?- le digo mientras miro al suelo, noté que me iba rompiendo en mil pedazos y antes de que ella me contestara la miro y le digo con toda la sinceridad del mundo- ella se merece a alguien que de verdad la ame aunque yo la ame como jamás e amado, que la adore aunque yo me muera por estar con ella, que la cuide siempre a pesar de todo aunque si fuera por mi le haría realmente feliz, mientras lo sería yo y que tenga su misma edad yo soy mucho más grande que ella, ella tiene que vivir con gente de su edad- se me vuelven a rallar los ojos ¿como puedo estar tan débil? nunca lo e sido pero desde que la conocí, todo con ella cambió cuando la conocí, hasta yo mismo- me abraza y apenas en un susurro me dice- te la mereces no digas bobadas, tranquilo, tranquilo. 

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EEY SEÑORES, QUERÍA DARLES MILES DE GRACIAS, POR LAS VISITAS, POR LOS VOTOS E INCLUSO POR LOS COMENTARIOS. NO ME LO ESPERABA DE VERDAD... BUENO CON ESTO QUERÍA DECIRLES QUE NO SUBIRÉ MÁAS CAPÍTULOS HASTA QUE LLEGUE A 7.5K NECESITO MÁS VISITAS PARA SEGUIR CON ESTA MAGNÍFICA HISTORIA... ME GUSTA VER QUE OS GUSTA DE VERDAD, OS QUIERO GENTE, OS QUIERO DE VERDAD.

Simplemente Tú, Mi ProfesorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora