Not Chat Noir [Chat Noir y tú]

[14]

Color de ojos: (c/o)
Color de pelo: (c/p)

Ella vio el mundo consumirse en su propia visión, y una necesidad por quererlo todo llenó su cuerpo.

— Yo puedo encargarme de eso — habló la voz, profunda y maligna—. Pero, debes darme algo a cambio...

Ella negó, intentando borrar de su cabeza lo que pasaba, estaba confundida, ¿cómo podría salvarse?

— ¿Q-Qué es...? — su cuerpo se movió solo, al notar que ella no iba a cooperar, corriendo lejos de su primo rápidamente, mientras una luz entre morada y negra subió desde sus pies, hasta su cabeza, terminando por cambiarla físicamente por completo.

Sus ojos resplandecían un color rojo neón , y la bufanda al rededor de su cuello cambio de color al negro, su cabello tornándose azul, y su ropa cambiando a un traje blanco, cubriendo sus manos, y sus pies.

Ella estaba completamente consciente de lo que pasaba, pero no se podía detener.

Hawk Moth la había atrapado, y ella nunca se le pasó por la mente que llegaría a tal nivel, solo por dejarse sufrir por el bien de alguien más.

Dentro de ella, admitió que sentía cierta envidia.

___ dio un salto al aire, terminando por flotar a la distancia.

— Dame los Miraculous, y yo te quitaré el peso del amor de encima — escuchó.

— No voy a-- ¡Hng! — al intentar negarse, su cuerpo dejó de tener su control, moviéndose por una fuerza extraña.

Iba a tener que pelear, contra Ladybug...

Y contra Adrien, que probablemente, pedirá una explicación.

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— Elliot realmente sabe lo que dice — habló Alya animadamente.

— ¿Una boda? Demasiado rápido... Bueno un poquito — se negó la pelinegra a disfrutar de los comentarios del primo de ___.

// Nuevo peligro en París, cerca de la Torre Eiffel //

Ambas miraron al televisor, y Marinnette se sintió preocupada de tener que irse mientras su amiga estaba ahí.

— Sabes lo que haré, Marinnette — sonrió la de lentes—. Tengo un blog del que cuidar.

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Mientras que ___ se encargaba de hacer desastre para que los héroes aparezcan, algo en ella se arrepentía demasiado de todo, recordando que, después de ser akumizado, terminas olvidándolo todo.

— ¡Mala hora para pelear! — una chica vestida de catarina llegó repentinamente.

Nadie más, ni menos que Ladybug.

— ¡Si si si! — ___ se sintió más aliviada, pero su cuerpo volvió a perder el control de su mente.

— ¡Ladybug! ¡Aquí estoy! — ___ se volteó, para ver a Chat Noir del otro lado, quien sonreía hasta ver el de quién se trataba—. A-Ah... — perdió su pose segura de sí mismo, y el bastón en su mano cayó al suelo, mirándola atónito, completamente preocupado.

— ¡C-Chat! — ___ sonrió débilmente, desesperada por saber cómo se encargaría de poder detenerse.

— ¡Chat! ¡Vamos! — Ladybug estuvo por correr hacia ella, para atacarla, pero el chico gatuno la detuvo antes de alcanzarla, antes de siquiera empezar a moverse.

— ¡L-Ladybug! ¡No, espere! — él sonaba asustado—. No le haga nada — él no podía aceptar ver a ___ en ese estado.

— ¡Gato tonto! ¡Tenemos que salvarla! — la pelinegra se oía irritada—. Te he dicho que no es tiempo para jugar.