17. Capitulo

29 3 0
                                    

El dia no podia ir peor.

iba corriendo de un lado al otro con el fin de no mojarme. A pesar de que ya estaba calada de arriba a abajo.

Si esque, casualidad que se pusiese a llover. Si hacia bueno...

Cruce de nuevo la calle corriendo, cuando un coche se cruco por mi camino casi atropellandome.

¿Pero que he echo hoy? ¿Me quereis matar? ¿ Os quereis desacer de mi?

El auto freno, bajando la ventanilla. Mi corazon en estos momentos estaba a mil. La adrenalina del momento me estaba superando. Mire al cielo, intentando tranquilizarme y viendo la lluvia caer en mi cara. Respire unas cuantas veces y segui andando.

-Summer.- me llamo de repente una voz.- Sube, que te llevo. Que vas a cojer una pulmonia.

Mi vista se centro en el coche, del cual probenia la voz. El chico con el mercedes tenia la ventanilla bajada, mirandome desde ella y señalandome el asiento de copiloto vacio.

Cruce por en frente del coche para abrir la puerta y sentarme en mi querida salvacion.

- Gracias de verdad, Hunter.- antes de arrancar, escurri mi pelo por la ventana y me quite la chaqueta dejandomela en mi regazo.

- No hay de que. No me cuesta hacerte el favor. Encima, no quiero que te enfermes.- me sonrio con su tipica perfecta sonrisa y arranco el coche.

El silencio era lo unico que se oia en el coche, un silencio un tanto incomodo.

-Por lo de mi hermana, si no quieres ser su amiga no pasa nada.- solto.

-No, si lo que pasa es que me estraño.- acepte. - No es por dar pena, pero nunca he tenido una amiga. -Agache la cabeza avergonzada.

El silencio volvio a apoderarse, dejandome una sensacion rara en el cuerpo.

Cuando era pequeña, era una chica abierta y con alguna que otra amiga. Pero a medida que el tiempo pasaba, me fui encerrando en mis propios pensamientos y inseguridades y deje de confiar en la gente. Preferia un libro, a una conversacion absurda sobre un tema absurdo.

- Zendaya nunca es de tener amigas. Le debiste de dar buena impresion.

Me rei al ver que su cara cambio a una de felicidad.

- ¿ Te preocupar mucho por tu hermana, no?- le pregunte tiernamente.

En los momentos que el me hablaba de su hermana, su mirada cambiaba. Sus ojos demostraban ternura, cariño y un sinfin de emociones. Era realmente encantador.

- Es mi unica hermana. La mujercita de la familia.- de un momento a otro su sonrisa fue disminuyendo a medida que sus palabras salian.

Estupida, la has cagado. Encima que te hace un favor llevandote y vas y la cagas.

Totalmente avergonzada y sin saber que decir lo unico que se me ocurrio fue un lo siento.

Estaba nerviosa y se reflejaba en mis manos que no dejaban de juguetear entre ellas. Me daba miedo abrir la boca por si la fastidiaba de nuevo.

- ¿Antes de vi andando rapido un poco enfadada, que te paso?- me pregunto desviando el tema anterior, lo que fue un gran alivio para mi.

- Odio a Connor.- solte haciendo que una estruendosa carcajada saliese de su garganta.

- Comparto el mismo sentimiento. ¿Cual es tu causa?-

- Simplemente el es mi causa.- dije y juntos nos unimos en una melodiosa carcajada.

- Me empiezas ha caer bien.- solto al finalizar su risa.

Sonriendo, mire hacia la ventana. El tambien me estaba empezando a caer bien. Ultimamente, estaba comportandose diferente, mas gentil. Estaba dejando su faceta de chico rebelde y mujeriego, lo que me estaba encantando. No te enamores de el. Los populares no suelen ser trigo limpio y lo sabes.

Y lo sabia.

Aunque yo no tenia la mente para chicos, por lo que no me preocupaba. Los unicos chicos que tenia en mente eran esos que solo existian cuando leias una linea de un libro. Mi querido patch, mi rudo christian, mi valiente thomas, mi bipolar river... Eran los unicos hombres de mi vida. Y mi padre, como no olvidarle. El hombre que puso la semillita.

Por lo que estaba tranquila. Mi vida no estaba para lidiar con chicos. Todavia no estaba preparada. Y dudo que pronto lo estuviese.

Leer los libros me habia ayudado en saber lo que era un amor. Y normalmente dolia. No queria sufrir, por lo que preferia algo ficticio e irreal.

-Llegamos.- dijo alejandome de mis pensamientos. Le mire por unos segundos, viendole mirar al frente con una sonrisa hasta que su mirada se junto con la mia.

Nos quedamos un rato asi, en silencio mirandonos a los ojos. Sus bonitos y brillantes ojos estaban de un color mas oscuro, ipnotizandome. No sabia que decir, con solo mirarle me bastaba.

Si que es guapo el jodido. ¿Le violamos?

Me quede asi, enbobada, hasta que un golpe en el coche nos saco de nuestro contacto. Estaba empezando a granizar.

Con una sensacion rara le mire por ultima vez, esta vez para agradecerle el viaje.

-Muchas gracias, hunter.-

-No hace falta que me agradezcas todo el rato.- rio.- lo hago encantado.

Le sonrei y a continuacion sali del coche, corriendo como si mi vida fuese en ello para no mojarme mas. Aunque imposible, estas bien de mojada.

Una Sombra Mas Bajo La LunaWhere stories live. Discover now