MALDITO MENTIROSO (Suspendida)

Capítulo 19: "Nene Caprichoso"

Capítulo 19

"Nene Caprichoso"

-tengo una buena noticia y una mala – dije al llegar a la mesa.

Tanto Oliver como Eva abrieron los ojos intrigados.

-la buena es que Iván viene en camino – mi amiga chilló de felicidad – la mala es que la que se debe irse ahora soy yo – dije mirando a Oliver, esperando su cólera.

-¿Cómo que te vas? ¿A dónde? – se levantó de su silla y se paró frente a mí.

-Liam está mal, Iván se quedó con él para acompañarlo, pero el muy imbécil no quiere hacerle caso – dije entrecerrando los ojos.

-¿es un chiste? ¿Vas a dejar a tu novio a la mitad de la fiesta para ir tras Liam? – curvó las cejas y se puso serio.

-Oliver, comprende por favor, es una situación especial, es una urgencia. No voy a quedarme en paz sabiendo que me necesita – me acerqué y posé mis manos en su pecho, tratando de que me entienda.

Tomó mis manos y agachó la cabeza.

-por favor, no hagas de esto un drama – le pedí.

-está bien, entiendo ¿quieres que vaya contigo? – dijo mostrando resignación en la mirada.

-Liam y tú no se llevan de lo mejor, prefiero ir sola, voy a esperar el médico y una vez que se encuentre mejor, voy a regresar contigo – le di un beso fugaz en los labios.

Recogí mi bolso y mi abrigo dispuesta a salir de prisa antes de que las explicaciones tengan que extenderse. Miré a Eva y ella tenía una sonrisa que le dividía la cara en dos, sabía que no se debía a que por fin su novio estaría aquí, sino por lo que yo estaba a punto de hacer. me articuló un "yo me encargo".

Le rodé los ojos y Salí.

Cuando llegué a la calle caí en la cuenta que no había llevado mi coche y no iba a pedirle a Oliver que llevara, eso sería tirar demasiado de la cuerda. Por lo que caminé un par de calles hasta que encontré un taxi.

De casualidad sabia la dirección por Iván, pero nunca había estado en la casa de Liam. Cuando llegué toque el timbre, entrar sin llamar me parecía un exceso.

Me abrió la puerta Iván mientras se colocaba su saco.

-gracias Hannie, te debo una – me besó en la mejilla y salió al mismo tiempo que yo entré.

-ve y divierte a mi amiga... ah y por favor trata de mantener a Oliver un poco animado, exagera lo de Liam si es necesario.

Me guiñó un ojo y se subió al coche.

Entré en el departamento, estaba todo muy ordenado y bastante decorado para ser de un chico, tenía la cocina y el living en un solo ambiente. Una pequeña mesa para cuatro personas y un sofá bastante mullido, una lámpara de pie y una gran pantalla plana con una consola al pie, eran los únicos muebles. Si bien no había cuadros en las paredes ni adornos, todo se veía bastante acogedor, aunque no sabría decir si era objetiva al dar mi opinión o me sentía así porque era la casa de Liam.

Caminé por un pasillo y di con su cuarto, tal como había dicho Iván, estaba acurrucado bajos las mantas. Amy estaba parada en un rincón de brazos cruzados y golpeando su pie contra el suelo, muy ansiosa. Iba vestida de fiesta, por lo cual supuse el motivo de su impaciencia y su evidente mal humor, debía ser la cita de Liam para esta noche y chicas como ella, se ponen muy de malas cuando las dejan vestidas y peinadas.

Me aproximé a la cama, agitándole la mano a Amy, no era momento de ponerme en simpática con ella.

-Liam soy yo – dije removiéndolo un poco y descubriéndole la cara, sus ojos estaba cerrados pero se abrieron de par en par cuando oyó mi voz.