Alec abrió los ojos, el paisaje ya le era muy familiar y por un momento solo se quedo ahí observando las hojas del árbol sobre él, que se movían con el viento.
-Hola Alec. –Dijo Max que estaba sentado cerca de él.
-Hola Max. –Dijo Alec incorporándose.
-Eso estuvo cerca ¿Eh?
Alec lo dudo por un momento pero su memoria despertó con la imagen del demonio, su persecución y el miedo que esos momentos llevaban. –¿Te refieres a mi reciente encuentro con un señor de las tinieblas? En realidad lo tenía todo controlado.
Max rio –Eso no fue lo que me pareció.
-Todo es en perspectiva amiguito.
-Hablas como Jace.
-No tenía idea de que conocías a Jace, aunque tiene lógica, si estas en mi mente, debes conocer a todos aquellos a quienes conozco.
-Pienso que no solo estoy en tu mente.
Alec no podía estar más de acuerdo con ello. De alguna manera este pequeño niño desconocido y misterioso aun para él se había metido en su corazón de una manera inexplicable.
-Yo pienso igual. –Alec no podía dejar de mirar al pequeño y ver similitudes entre ellos, Max usaba anteojos, así que no era una proyección de él mismo, pero su cabello, su tono de piel y sus ojos eran muy parecidos.
-Deja de mirarme así, Alec. Lo que tienes que hacer es intentar recordar y... Entrenar. Lo que hiciste con esa daga fue horrible.
-¿Disculpa? Mate al demonio y no morí en el intento. –Alec parpadeo al niño. -¿No estoy muerto verdad?
Max rio. –No, pero casi.
-Bueno, tal vez no me vi de lo más elegante pero al final de cuentas lo que importa es quien quedo en pie y no esparcido por toda la habitación.
-Sangraste tanto que casi fuiste esparcido por...
-Sí, si lo recuerdo.
-Y tampoco quedaste en pie.
-Eres un increíble observador.
Max nuevamente rio y se puso de pie. –Tengo que irme, es hora de que despiertes.
-Supongo. –Dijo Alec con pesar ya que le gustaría poder quedarse con Max.
-Y por cierto, -Dijo el pequeño sonriendo. –Bienvenido a casa.
* * * * *
Cuando Alec abrió los ojos y después de parpadear en un par de ocasiones para que su visión se aclarara, logro ver un techo abovedado color caoba con terminaciones dignas de un castillo, poco a poco su cuerpo despertaba y el dolor con él. No había una parte de su cuerpo que no doliera, sangrara o pareciera que simplemente no estaba ahí. Pese a sus lamentos logro percatarse de una mano que lo sujetaba, él no estaba solo en la habitación. Alec se incorporo lentamente, y sentada en la orilla de la cama, mirándolo con lujo de detalle, una mujer, familiar y extraña al mismo tiempo, ella se parecía a Isabelle, pero con diferente tono de ojos.
-Hola, -Le dijo ella amablemente y su voz hizo que Alec se sintiera melancólico.
-¿Hola? –Contesto con duda el chico.
-Se supone que debo angustiarme por Jace e Isabelle. –Dijo la mujer que para su sorpresa estaba dejando rodar una lágrima por su rostro. –Y se supone que debes ayudarme con eso.
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Te Encontrare
FanfictionQue pasaria si un temible demonio tomara los recuerdos de Alec? "Te encontrare" es un fanfiction Malec que cuenta la historia de como Magnus y sus amigos se embarcan a la búsqueda de Alec cuando este es alejado de todos ellos. Cuando lo encuentran...