Cielo De Amor

Capitulo 31

Pasaron un par de minutos y Matthew ya estaba de vuelta en el auto, arrojó una mochila negra al asiento trasero y  volvió a emprende nuestro recorrido que a saber no tenía ni idea a donde nos dirigimos. La velocidad con la que Matthew iba realmente me estaba asustando.

- ¡Matthew! - intente llarmale pero simplemente estaba tan concentrado en sus pensamientos que ignoró mi llamado - ¡Matthew! Por favor baja la velocidad - Le supliquė mientras ponía mi mano en su hombro

- ¿Qué dices? - Me miro rápidamente y volvió a mirar la carretera

- por favor baja la velocidad

- ¡Oh! Lo siento - empezó a bajar la velocidad - ¿mejor? - Me miro y Asenti

- Matthew ¿Que sucede? - quise saber que era lo que el sabía

- Es complicado todo esto, ya creo saber quien está detrás de todo esto - hizo una pausa - tenemos que hablar

- Es lo que estoy intentando hacer

Matthew me dio una mirada tranquilizante y se desvió de la carretera, pasábamos por el lado de unos enormes árboles hasta que se detuvo.

- ¿Por qué te detienes? - le pregunté mientras lo miraba retirar la llave del auto

- Quiero que veas algo, ven - Me animo a salir, y así lo hice. Matthew agarró mi mano y caminamos unos siete pasos y pude ver la ciudad en su máximo explendor - Todo estara bien Maddie - beso la Coronilla de mi cabeza

- Lo se, se que a tu lado nada puede pasarme, pero de verdad quiero saber que está pasando ¿Qué es lo que tu sabes?

- y es lo que haré - me soltó y regreso al auto, pero esta vez subió por encima de el y se sentó en la parte de arriba - ven acá - Me llamo e inmediatamente camine hacia aya y él me ayudó a subir - por donde empezar

- por el inicio ¿Qué te paso? ¿Quién te hizo esto? - puse mi dedo sobre la herida de su labio

- Quiero que mantengas la calma ¿Bueno? Lo que te voy a contar no es algo muy grato Maddie - Asenti, después de saber lo que había hecho Mabel nada podía sorprenderme tanto - Decidí no ir al Instituto porque tenía que hablar con tu madre, fue difícil convencerla de que lo hiciera pero después de que aceptará le comenté todo exactamente todo lo que había pasado, lloró mucho, me pidió perdón por todo, le dije que estaría muy pendiente de ti, pues no permitiría que algo malo te sucediera y para mi sorpresa ella asintió sin ningún problema

- fue por eso que me dejo venir contigo - Le interrumpi - eso me había parecido extraño

- Exacto, pero después de salir de tu casa sucedió esto - hizo una muestra de que se refería a sus heridas - Mientras me dirigia a casa sentí que alguien me seguía pero por más de que miraba a mi alrededor no lograba ver nada hasta que vi a ese tipo frente a mi con un bate de béisbol en su mano, sabía que nada saldría bien.

》》Le pregunté que quería y sólo se rió sarcasticamente, se fue acercando a mi y antes de propinarme un golpe me dijo que te mataría a ti pero antes te haría sufrir al matarme a mi, luego de eso golpeó una de mis costillas con su bate, intente defenderme pero por algún motivo las fuerzas me faltaban, después de darme un golpe en el rostro caí al suelo con la vista nublaba pero entonces la vi a ella - Me miro fijamente y pasó saliva con dificultad - Vi a Mabel a unos pasos de aquel tipo, Mabel está detrás de todo esto Maddie

- Entonces es verdad - baje mi mirada - Mabel ha estado provocando todo esto

- Entonces ¿ya lo sabías? - preguntó el intrigado al ver mi reacción

- Digamos que si, Ian me comentó que la había visto con un tipo mientras había fingido su viaje a Miami y hablaron acerca de mi - Le comenté brevemente lo dicho por Ian

- Entonces Ian lo sabía - apretó su quijada - ¿Por qué nunca dijo nada?

- por miedo, pero ya, eso no importa, lo importante es que ya sabemos que mi propia hermana está detrás de todo esto y que quiere matarme, que  rara es la vida - solté una risa que sonó más como un bufido.

- Cuando aquel tipo apuntó con su arma en mi frente pensé que ese era mi fin, pero el sonido de su celular me salvó, recibió una llamada de alguien, el le comento lo que estaba sucediendo y luego de una breve discusión con quien sea que fuese esa persona me dijo que debía agradecer mucho a esa persona sino ya estaría muerto, eso implica que hay otra u otras personas detrás de esto Maddie, pero ¿Quien?

- No lo se - susurre - pero, tengo miedo Matthew mucho miedo de lo que te pueda suceder a ti, si eso sucede nunca me lo perdonaría

- No me pasará nada Maddie, ni a ti, ni a mi, no permitire que eso suceda

Abracé a Matthew y me aferre a él sintiéndome segura a su lado, sabía que el me protegeria así como yo haría lo mismo con él.

- Maddie te amo - soltó Matthew y yo me separé de él  para observar mejor su rostro - si, te amo y no soportaría perderte una segunda vez

- Matthew no me perderás, nunca más porque tu seras el único hombre en mi vida - Lo dije pensando en que de igual manera pronto moriría

- Nada me haría más feliz - Me miro fijamente, agarró mi mentón y llevo mis labios hasta los suyos.

Me beso con tal delicadeza como si temiera a lastimar mis labios, senti mi cuerpo temblar por la sensación que eso emanaba.

- Mira el cielo Maddie - alzó su mirada - las estrellas y la Luna están de testigos y saben lo mucho que te amo y lo importante que eres para mi

- Nuestro cielo de amor - Le sonreí y el asintió

- Nuestro cielo de amor Maddie - volvió a besarme.

Me encantaba entrelazar mis dedos con el cabello de la parte trasera de su cabeza, se sentía tan genial. Matthew profundizó el beso, me besaba con tanta pasión, tanto deseo que sentí arder mi parte íntima y sentí un breve susto porque esto antes no me había pasado.

No deje de besarlo y lentamente me fui recostando en la carcasa fría del auto, Matthew apoyo su brazo a un lado de mi cabeza para seguirme besando, baje mis manos a su espalda y empecé a subir su camisa, esto hizo que el se detuviera y me mirará directo a los ojos.

- ¿Estas segura de esto Maddie? No quiero que pienses que me quiero aprovechar de ti y tampoco quiero que te lo tomes tan a la ligera

- Quiero hacerlo y que el cielo sea testigo de esto - el sonrió y volvió a besarme

Esa noche, allí encima de su auto sin importar el frío, esa noche experimente el dolor más placentero que se puede sentir.

Su piel rozaba la mía que temblaba pero no precisamente por frío, sentir que en ese momento éramos uno sólo y sentirme especial, deseada, esa noche definitivamente había sido la más especial de toda mi vida.

Esa noche conocí el amor en todo su explendor

Hey pipoooool

¿Que tal les pareció el capitulo?
Sexiwis jajajaja
Espero sus comentarios y sus sensuales estrellitas

Nos leemos pronto