R.E.D

Capítulo 23: Saca un número ¿Tuvieron suerte?

Entramos al auditorio, una voz comenzó a informar las siguientes instrucciones.

—A todos los participantes, tomen sus lápices y por favor pasen a la puerta que se encuentra al fondo a la izquierda. Ahí estará un soldado pidiendo su nombre para verificar en la lista de los seleccionados que lograron pasar. Una vez confirmado su nombre, se les pedirá que en la caja que se encuentra justo ahí, tomen una ficha que tendrá un número escrito en ella.

¿Un número? Para qué será eso, pensaba mientras nos dirigíamos a la puerta. Me daba nervios ¿Qué número me tocara? Cuando se trata de cosas al azar, me toca números muy infortunados, como ser la primera en algo o ser la última.

—¿Su nombre? —Me preguntaron en la puerta.

—Histon Rad —dije.

—Bien, saque una ficha por favor de la caja.

Realmente tengo mala suerte respecto a cosas de azar.

Había varias fichas adentro, podía sentirlas, tomé una sin pensarlo demasiado y la saqué. No abrí mi puño, no quería saber el número.

—Me puede mostrar el numero señorita. —El soldado me dijo.

—Ah, sí claro —Se lo mostré sin verlo.

—Bien, número 28.

—Oh genial, gracias tanto quería saber el número. — lo miré decepcionada.

Lo hizo a propósito. Seguí por el pasillo hasta llegar a donde los demás estaban reunidos, era un salón grande, con bancos individuales enumerados. Claro, de eso se trataba los números.

—Bien, ya se dieron cuenta para qué sirve el número que acaban de sacar. Aquí hay 60 bancos y en ellos hay un examen diferente a los de los demás. Hay 10 exámenes diferentes y unos son más complejos que otros. Tendrán un total de 2 horas para contestar la prueba psicológica. Tener cuidado con las respuestas que den, esos exámenes tienen algunas trampas, es cosa mental. Que tan bien esta su razonamiento y su lógica. —El encargado de ahí nos estaba explicando de qué trataba.

—Por cierto ¿dónde está Grey? ¿Qué lugar le habrá tocado? —Me pregunté.

—Bien diríjanse a sus asientos todos. —Dijo.

— ¿Dónde está el 28?... 26, 27 ¿47? Pero qué rayos... ¿se equivocaron? 2, 34, 12, 45, ¿están revueltos? disculpa ¿están mal acomodados o así es? —Le pregunté.

—Nunca les dije que estaban en orden ascendente. —Contesto el soldado.

—Cierto. —Me dije a mi misma.

—Rad ¿Qué número buscas? —Escuche la voz de Grey.

— ¿Dónde estabas? No te vi hace rato. —Le dije.

—Fui al baño rapidito. —El rió.

—28 y ¿tu?

—11, creo que lo encontré Rad tu banco.

—En serio ¿dónde? —le pregunté.

—Ahí. —Me señaló con la mano.

—Estas de broma, cierto —Lo mire con cara de que no lo creía. Me enseñó el 28 anotado.

—¡Nooo! ¿Porque ahí? —El peor lugar donde me podía haber tocado. Enfrente del escritorio del soldado que aplicaría el examen.

—Grey ¿ya encontraste el tuyo? —Volteé para buscarlo y lo miré.

— Te odio, te toco en la última fila, sin miradas que te comerán en el proceso del examen—Se comenzó a reír y me sacó la lengua.

—Estoy en la zona del infierno. —Suspiré.

—Bien, todos están ya acomodados en sus respectivos lugares, mucha suerte a todos y dar lo mejor de ustedes en estas dos largas horas.

—Da miedo eso. Y ¿porque está sonriendo? —Pensé al verlo.

— ¡Comiencen! —Exclamó el soldado.