Capitulo 5: "Besa bien?"

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Fue como si el cielo me escuchara y salió Ash llamándome. 

-Todo va bien, Kels?- pregunto observando a los chicos delante mía. Su mirada se clavo en la de Aaron que tenía cara de pocos amigos.

-Si, si, estoy bien- apoyé mi brazo en su hombro y en seguida me cogió de la mano

Aaron nos miró con indiferencia luego esquivo a Ash y entró al bar seguido de sus hermanos, que tenían todos, las cabezas agachadas. 

-Los conoces?- inquirió siguiéndolos con la mirada.

Volví a mirarlos alejar.

-Solía llamarlos familia...- dije con la mirada perdida.

Ash me contemplo confuso y entendió que no tenía que haber hecho esa pregunta y se encogió de hombros.

-Quieres bailar?- le observe frunciendo el ceño extraña.

Su sonrisa era radiante y seductora. Sus ojos brillaban bajo la luz de la lampara y su respiración era calmada. Vacilé un momento.

-Bailar?- repetí.

-Bajo lluvia.- su sonrisa se amplio.

-Estas borracho?- dije medio riendo.

-Lo suficientemente consiente para saber lo que digo- me agarró de la mano hasta llevarme a la carretera donde ningún coche pasaba. 

La lluvia seguía cayendo como una cascara. Sentí las gotas mojando cada parte de mi cuerpo; el pelo, el cuello y toda mi ropa. Mañana tendré un buen resfriado. Me sujetó de la mano alejándose y luego me acercó a él en un giro hasta quedar pegada a su pecho. Podía oír su respiración en mi cuello. Volvió a darme otro giro y esta vez en el aire, observe como disfrutaba de esto y solté una carcajada. Estaba loco, loco de remate y me hacía reír, reír como una idiota. Empezamos a bailar, el típico baile de salón, con una mano entrelazada, la otra la apoyaba en su hombro y la suya en mi cintura apoderándose de mi espalda. Por un momento me deje llevar por la brisa, por las gotas de agua, por sus ojos, por nuestras risas... y olvide por completo el nombre de Aaron, solo por un momento me sentí aquella chica feliz que compartía todo con su mejor amiga, que reían y jugaban sin importarles nada, sin existencia de monstruos, vampiros, hombres lobos, brujas.... Me sentía yo, la pequeña Kels que se escapo de un orfanato para ayudar a su mejor amiga. Todo era como un gran sueño. Ash consiguió hacerme feliz en esos momentos, consiguió quitarme todo el peso de encima, los problemas, la tristeza todo había desaparecido en ese baile debajo de la lluvia.

Mientras me dejaba fluir por mis pensamientos, sorprendida, sentí los labios intensos de Ash. 

Oh dios mio, me esta besando!

Y estaba helada, era presa de mi cuerpo. Por más que luchaba por apartarme no podía, era como estar bajo el hechizo de sus labios, que por cierto saben ricos, algo a alcohol pero ricos. Debe de ser eso! las cervezas! quien sabe cuanto bebió con mi ausencia. Intente relajar mi cuerpo y dejarme llevar por sus labios, hacía tiempo que no besaba unos labios apasionado como los suyos y tengo que admitir que un poco lo estaba disfrutando, un poco mucho.

(***)

Al día siguiente desperté sin gritos de parte de Tris. Estiré mi cuerpo haciendo un largo ruido con mi boca. Salté de mi cama y entré al baño. Por primera vez en semanas había dormido como un angelito, sin pesadillas, sin lagrimas, sin nada. Ni siquiera pensé en lo guapo que se veía Aaron ayer.

Oh, maldita sea, lo estoy pensando ahora.

Hoy hace sol, no puede ser! Ash tiene que ser un sabio o trabaja en el tiempo porque no puede ser todas su intuiciones ciertas. Me di una ducha de 10 minutos y salí enrollada en mi toalla. Me paré ante el espejo y me contemple. Tenía la piel blanca y serena. Mis ojos estaban más brillante  de lo normal, con vida pero... Me llevé los dedos a mis labios. Tenía un corte, un corte provocado por dientes. Ash. Me había besado con tanta pasión dejándome el labio lastimado y hinchado. No puedo disimular nada de esto a Tris. No sabía si alegrarme o enfadarme por aquello. Pero en parte me alegraba de haberlo besado, por haberme él besado con tanta pasión. Sin duda sabía besar, era un seductor, aparenta a la vista. Rebusqué en mi armario la ropa de hoy. Volví al espejo y me retoqué, pintando los labios con exageración para que no se me notara la mordida. Bajé al comedor y me preparé el desayuno. Mis cereales favoritos. Comencé a devorarlos hasta que bajo Tris con el pelo de chiwawa arrascandolo con una mano y la otra en su trasero. Solté una risa y ella se sobresaltó.

Aaron II (Cancelada)Where stories live. Discover now