Angel Rebelde (Terminada)

Vida dura.

Trato de hacer la mesa y cuando por fin sirvo los platos el sale. El me mira algunos segundos, sonrio.

- No quise tomarme el derecho, pero supuse que no habias comido y... queria agradecerte por lo de anoch y... - Me quedo sin respiracion.

- Gracias, realmente muero de hambre. No te preocuoes, no fue nada.

Bajo la mirada, camino para sentarme enfrente de el. Trato de comer sin observarle. Pero cuando pasan los segundos el se atrave a hablar.

- Shandy... - Mi nombre en su boca sabe tan bien, alzo mi mirada - Se que no me incumbe, ni nada por el estilo. Pero realmente me preocupa - Mira para otro lado - Talvez, quisieras decirme que ocurre contigo, que esta mal, porque te muestras tan dura e invensible pero a la final eres tan bulnerable. ¿Porque temblabas anoche de esa forma?

Me quedo ahy, estatica, sin palabras, sin saber que mas decir. Miro para otro lado, siento su intensa mirada en mi perfil. Las imagenes pasan tan rapido por mi mente que no puedo ni hablar, me traslado tan rapido a esa noche que mis ojos se comienzan a acumular de lagrimas. Me siento tan estupida e impotente por la manera que me pongo por solo recordar. Cuanto quisiera olvidar.

La sangre esta por todos lados, a pesar de mi dolor habia podido vestirme. Me siento sucia, puerca, poco mujer, nunca mas nadie me querria y pues me siento la escoria mas asquerosa del mundo.

- Porfavor Shandy, dime que ocurrio. Ya llame a emergencias, pero debes decirme.

Tan solo miraba un punto fijo, lagrimas no dejaban de caer, estaba en el suelo porque la cama me daba asco. Mama hablaba pero realmente no entendia lo que decia.

- Mi niña, porfavor... - Comienza a llorar - Dime... No te puedes quedar callada toda la vida.

Siento la mano de Justin sobre la mia, por instinto la saco con miedo. Pero al observar su mirada soy yo la que coloco mi mano sobre la de el, su otra mano deja la mia en medio.

- Tranquila, Shh.... - Me pide - No llores. Esta bien si no deseas hablar de eso. - Su mano sube a mi rostro y en un toque tan suave su dedo pulgar quita las lagrimas que caen. Dios, eso es tan suave y a la misma vez tan fuerte para mi cuerpo que me siento vibrar.

- No quiero hablar de eso... - Confirmo, el solo asiente.

Su mano acaricia con lentitud mi mejilla, se siente tan bien su toque. Y realmente me sorprendo cuando su mano se quita y no quiero que lo haga. Separamos nuestras manos

- Come... - Susurra.

Yo tan solo asiento.

Trato de tragar pero me es dificil con todo lo ocurrido, el sueño de anoche, el recuerdo de ahora y la cercania que he tenido hacia Justin.

Siento su mirada ciertas veces, trato de tranquilizarme y no ponerme nerviosa. El se levanta para poner su plato en el lavavo y yo hago lo mismo.

- Mmm... ¿Una cervesa? - Propone. No recuerdo tomar desde que me ocurrio todo, cuando tenia quince amaba las fiestas y pues mas de una vez llegue borracha a mi casa.

- Necesito una - Asiento. El solo sonrie. Me tiro sobre su mueble, se tira a mi lado. Abre la cervesa de botella y me la entrega, luego abre la de el y da un largo trago.

- ¿Alguna vez has tomado? - Habla en voz burlona, un poco mas difente de minutos antes. Me gusta mas el Justin de ahora.

- Si... - Rio - Cuando recien descubri las fiestas, a lo mejor catorce o quince tome algunas veces y digamos que no tengo tolerancia con el alcohol. - Le doy mi primer largo trago a la cervesa.