Solo soy una Greengrass. (SSG)

Capítulo 19. Más y más explicaciones.

Capítulo 19. Más y más explicaciones.

Miré a mamá mientras ella fingía que yo no estaba ahí y seguía doblando su ropa (que ella misma había lanzado al suelo cinco minutos atrás, cuando entré de golpe a su habitación)

—Aún no lo entiendo —dije de brazos cruzados.

—Ya te lo he explicado, no hay más que decir.

Y es que, no me lo había creído. La dulce, semi perfecta e irritante Melody... Embarazada.

"Está embarazada, Marlee" me había susurrado mamá la noche anterior, luego de que hice un escándalo con la noticia de Melody, yo le miré divertida "Hablo enserio, Marlee"

Lo que me pregunté cuando al fin comprendí que era enserio, fue ¿Por qué el padre del bebé no estaba arrastrándose tras mi prima prometiéndole una vida juntos?

Entonces Melody se apareció llorando a moco tendido, dijo algo como "sé que no te agrado, pero no tengo a donde ir"

Y contó la historia de lo que parecía un amor perfecto, ella se mudó con él, todo bien hasta que... Bueno, bam, un bebé en camino. Él se enfada, niega que sea suyo y la echa... Tan tan.

Siento que odio a ese tipo. No por hacerle eso a mi prima, sino por hacerlo... Ignorando completamente a Melody.

— ¿Por qué no me dices el nombre del tipo? —zapatee con capricho.

—Porque vas a hacer una de tus cosas raras y vas a encontrarlo, y matarlo —me dice mirándome seriamente.

— ¿Tú me ves capaz de asesinar a una persona?... Oh claro que sí —murmuro ante sus gestos.

—Ve a cambiarte, Marlee —ordena y lanza su ropa al ropero nuevamente —. ¿Qué?

—Eres un desastre al ordenar cosas.

— ¡Ve a cambiarte!

Chillo cuando me golpea con una de sus camisetas y salgo riendo de su cuarto.

Cuando llego al mío, veo a Beatrice recostada en mi cama con su uniforme ya puesto, juega lanzando una pelota al aire.

— ¿Y cómo se llamaba el cabrón? —inquiere sin dejar de lanzar la pelota.

—No me lo dijo —mascullo y cierro la puerta mientras me saco la camiseta.

—Bueno, de alguna forma vamos a enterarnos, ¿No?

—Por supuesto —le aseguro deshaciéndome de mis pantalones para luego tomar mi uniforme.

Cuando me arreglaba la camisa dentro de la falda, Bea se levantó y me miró indecisa.

—Marly...

— ¿Qué?

—Tú... casi pareces preocupada por Melody.

Dejo de arreglarme y la miro escandalizada.

— ¡Por supuesto que no! Sólo... Sólo que a un idiota así, no se le deja vivir... Um, es decir, en paz... Ya sabes.

—Todos sabemos que vas a matarlo —suspiro ante sus palabras—. Pero en verdad parecías preocupada por Melody anoche.

—No, no me interesa.

Doy por terminada la conversación al meterme al baño y dar un portazo. Puedo oír a Bea bufar y volver a lanzarse a la cama.

Al bajar, luego de un rato, ya vestida y preparada, me quedo algo tildada al ver a Melody y Daniel charlar como si se conocieran desde hace años.