Capitulo catorce.

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[Leed la nota del final]

-Nos vemos mañana ¿vale? - le digo a Alejandro dándole dos besos.

-Claro, hasta mañana - dice él y me voy rápidamente de allí.

(...)

-¿Tris? - me dice Jesús al otro lado de la línea cuando descuelgo el móvil.

-Presente, en cuerpo, por que en alma... - le contesto sarcástica.

-¿Por qué no contestas a mi hermano? ¿Que os ha pasado?

Le cuento todo lo que ha pasado esta tarde, incluso lo de Alejandro.

-Una pregunta Jesús, ¿quien es Alicia?

-Su ex - dice seco.

-Yo creo que son más que eso - le digo pero bueno, me da igual, le quiero olvidar, además estoy muy cabreada con él, se suponía que no iba a haber más secretos y aparece un ex de la nada...

-Joder Tris, yo pensaba que lo sabías...

-No importa, mañana hablamos.

-Vale, hasta mañana guapetona.

Cuelgo el móvil y miro al techo, ¿como voy a olvidar al chico del que estoy enamorada?

(...)

Me levanto por el irritante ruido del despertador, pero hoy tengo ganas de levantarme.

Raro, lo sé, pero a partir de hoy la chica enamorada de Daniel Oviedo, va a ser la chica soltera abierta a nuevas relaciones.

Voy al baño y me aseo, después me pongo unas mayas negras y una sudadera gris, tambien mis air max blancas, me coloco la mochila y bajo las escaleras.

-¡Buenos días! - saludó a mis padres.

-Tris que contenta estas hoy ¿no? - me dice mi padre.

-Sí bueno - me encojo de hombros y me bebo el zumo que me ha preparado mi madre.

Suena el timbre y doy por supuesto que son los gemelos.

-Adiós - me despido de mis padres y salgo - ¡buenos días! - les saludo sonriendo, y ambos me miran raros.

-¿Y esa felicidad? - pregunta Jesús.

-No sé - me encojo de hombros y bajo las escaleras hasta ellos, les doy dos besos y les sonrio.

-Tris, ¿podemos hablar? - me pregunta Daniel.

-Vale, luego, que ahora llegamos tarde.

(...)

Llegamos al instituto Alicia se sube encima de Daniel como un koala, pues genial.

Miro a Jesús que la mira con cara de asco y suelto una leve carcajada.

Veo a Alejandro que esta mirando el móvil, por lo que me acerco a saludarlo.

-¡Alejandro! - le grito alzando la mano y yendo hasta él, él sonrie y me da un abrazo.

-Tris - dice abrazándome - menos mal que conozco a alguien, me sentía marginado - me río ante su comentario y veo de reojo a los gemelos, Dani esta ¿celoso? Y la cara de Jesús, pues, es un poema.

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¿Queréis que mañana debido a que es Navidad haga un maratón de cinco capítulos?

Bea la fea ||gemeliers||Where stories live. Discover now