Capítulo 23 "Tranquilo"

114K 5.3K 393
                                    

— ¿Ya estas lista, cariño? —escuché la voz de mi papá entrando a la habitación.

Ya habían pasado los tres días, me sentía mucho mejor.

—Sí, papá. —dije caminando hacia él, me acercó a él con un cálido abrazo.

Salimos del hospital, íbamos en su auto, él se estaba conduciendo mientras yo miraba por la ventanilla la típica naturaleza rural, pensando en mi madre, la he decepcionado demasiado, que me trate como cualquier persona. Eso me sigue y me seguirá doliendo...

— ¿Cómo te sientes hija? —me preguntó mi papá sacándome de mis pensamientos.

—Bien. —susurré sin ánimos.

—Necesito que me expliques ¿Qué es lo que tienes con Johnson? —dijo con su semblante tranquilo, él se caracterizaba por no ser tan agresivo. Lo miré, tomó mi mano y añadió —. No te preocupes hija, sea lo que sea que ustedes tengan, yo te apoyo ¿Entendido?

—Si papá. —dije.

—Aunque no estoy de acuerdo con que me lo hayas ocultado. Eso del embarazo. —dijo estacionando el auto. Ya habíamos llegado.

Entré a la casa que más bien parecía una mansión era hermosa y grande.

Me encontré con Jane y su barriga de embarazada, me puse triste al verla y a la vez feliz...

—Hola Joscelin. —dijo saludándome con un beso en la mejilla —¿Cómo estás?

—Bien y tú, ¿Cómo va el embarazo? —le pregunté un poco triste.

—Bien, solo crece y crece. —murmuró sonriéndome —. Ven te mostraré tu habitación. —asentí y caminé detrás de ella.

Subimos las escaleras me enseñó una puerta la cual abrió y esa sería mi habitación, era espaciosa, bonita y fresca, me gustaba.

—Te dejaré a solas, bajarás a cenar ¿Cierto? —asentí y salió de la habitación.


Leonardo Johnson


Estaba en la oficina con Carlos y Marco. No le he contado sobre la pérdida de mi bebé. Estábamos enredados con unos documentos.

—Hey Leo. —escuché a Marco —¿Qué paso con su bebé? —me preguntó, lo mire mal pero triste. Mientras Carlos nos miraba sorprendido y perdido.

— ¿Qué bebé? —preguntó Carlos.

—Joscelin estaba embarazada. —respondí con pesar.

—Lo siento mucho hermano. —dijo tocándome el hombro.

—Déjense de estupidez y pónganse a trabajar. —exclamé sonriendo un poco.

Ya habíamos terminado de arreglar todo el desastre que había en la empresa.

Estaba a punto de irme cuando entra Daniela en mi oficina.

—Hola mi amor. —dijo sarcásticamente.

— ¿Qué haces aquí? —espeté sin tomarle importancia.

—Solo quería saber cómo estaba el amor de mi vida. —cerró la puerta y caminó hacia mí.

—Estoy bien, ya te puedes retirar.

—No vine solo por eso, mi amor. —dijo pasando su mano por mi abdomen, e intentando besarme.

— ¿Entonces? —me aparté.

—Quiero estar contigo. —dijo agarrando mi corbata.

—Retírate. —dije apartándome.

—Está bien, pero pronto caerás. —exclamó caminando contoneando sus caderas exageradamente.

¿A qué se refiere con «caeré»?

Salí de la oficina, le di las buenas noche a mi secretaría y me dirigí a mi auto ya allí me dispuse a conducir hasta la casa de David a ver cómo está Joscelin.


Joscelin Wilson


Estaba cenando con Jane y mi padre, me agradaba esto. Jane no era la clase de madrastra que me imaginaba, es todo lo contrario.

—Hija, desde pasado mañana volverás al instituto. —dijo mi papá llevándose un bocado de comida a su boca.

—Está bien papá.

Mi padre salió no dijo para donde iba. Yo me quedé con Jane en la sala ayudándola con algunas cosas que ya tenían del bebé.

—Y ¿Ya saben que sexo es? —pregunté doblando unas camisitas muy pequeñas.

—Sí, es niño. —dijo entusiasmada, me alegraba verla así.

— ¿Hola? —escuché la voz de Leonardo, me giré y estaba allí con su semblante tranquilo, y sus manos en los bolsillo.

—Leonardo. —exclamé lanzándome a sus brazos el cual me atrapó en un fuerte abrazo, tomando mi rostro entre sus manos para luego besar mis labios.

— ¿Qué hacías, mi princesa? —me preguntó mirando para donde estaba Jane, saludándola.

—Estaba ayudando a Jane acomodar unas cosas del bebé —cuando dije eso se puso triste —. Tranquilo. —susurré mirándolo a los ojos, muy pocas veces lo miraba así pero no me gustaba. La verdad yo también estaba triste pero trataba de olvidar. Aunque me fuera muy difícil.

Mi Sexy Hermanastro [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora